A través de las prácticas funerarias se puede tener un acercamiento a la vida pasada de los pueblos, sus costumbres, miedos y creencias que subsisten y permanecen en el orden social. Los sistemas de enterramientos prehispánicos en territorio mesoamericano posiblemente respondieron a la necesidad cosmogónica de representar tradiciones mágico-religiosas, aspectos que pueden ser percibidos en la disposición del material óseo, así como en la ofrenda asociada, elementos que nos son indispensables para el estudio sistemático del culto mortuorio.