Desde que irrumpió la red en el escenario de la información hace ya bastante años, hemos vivido una época de cambios acelerados e innovación, aprovechando las capacidades de captura, organización, transmisión y almacenamiento de grandes volúmenes de datos.
El exceso de información, como cuando nos enfocamos en un árbol, y éste nos impide ver el bosque, nos hace perder el rastro del conocimiento -y más, el de la sabiduría- en el mar de la información.
Una frase del poeta islámico persa Mevlana Jalal Al din Rumi dice: «El arte del saber, consiste en saber qué ignorar». Para innovar es necesario saber qué ignorar: lo conocido, lo probado una y otra vez, lo practicado comúnmente, lo que dicta el sentido común. Hoy más que nunca las sociedades y las organizaciones reciben un impulso innovador, tanto por los adelantos tecnológicos como por las crecientes demandas sociales entre las que destacan, por increíble que parezca, la paz, el respeto a los derechos humanos, la desmilitarización, el cese de hostilidades, la atención de las heridas y daños causados por la guerra y los conflictos de todo tipo, sin olvidar la sustentabilidad integral, el acceso al agua, a un medio ambiente sano, a alimentos que no causen más daños, por los contaminantes que se emplean ya en la agricultura, el derecho a una economía participativa e incluyente, redistributiva, que cancele los mecanismos de acumulación rapaz de la riqueza en unas pocas manos, el derecho a la autonomía y soberanía de las naciones sobre sus recursos, el fin de las alianzas militaristas o beligerantes, y del intervencionismo transnacional. Todas las acciones que acompañan a las formas modernas de colonialismo, representan problemas que ameritan una serie de acciones democráticas urgentes, que frenen la explotación de los recursos naturales de los países subdesarrollados y también el desarrollo armamentista de los países hegemónicos.
Lo que ha revelado el conflicto entre la OTAN y Rusia, enclavado en el territorio ucraniano, es que no se ha avanzado gran cosa desde la segunda guerra mundial, para frenar las amenazas de la conflagración nuclear. Lo ha dicho recientemente el secretario de la ONU, que estamos a un tris, a un error, a un malentendido de un desastre de proporciones apocalípticas.
Y es que el número de cabezas nucleares almacenados por distintos países representan la mayor amenaza a la vida en el planeta Tierra. Nos hemos entretenido mucho con la crisis de energía, la crisis del agua y la crisis de alimentos, hasta la COVID parece una enorme distracción que tomó por sorpresa a los sistemas de salud aún de los países del llamado primer mundo. La peor crisis que enfrentamos cada los seres humanos es la crisis del poder nuclear enloquecido que pende sobre nuestras cabezas.
Estas reflexiones en el marco de la innovación y las bibliotecas cuya historia ya se calcula en milenios, justifica dirigir una mirada atenta a los procesos por medio de los cuales las bibliotecas atienden al medio que les rodea y al cual se deben.
Una somero análisis PESTEL de las bibliotecas dejaría al descubierto cuán necesaria e importe es la innovación en ese ámbito en estos momentos.
Las bibliotecas son pivotes de la humanidad contra la guerra, contra la ignorancia y la injusticia que deviene en guerras, es un baluarte de la paz, de la coexistencia de los hombres y sus ideas, las bibliotecas ofrecen soluciones de manera ordenada a los problemas del mundo. Las clasificaciones bibliotecarias son sistemas latentes de innovación que permiten atisbar ramas enteras del conocimiento en muy poco tiempo. Lo que no se sabe resalta por su ausencia en las bibliotecas. Aunque se ha acelerado la producción de conocimientos, todavía hay mucho por hacer con su análisis, organización y con la explotación de datos.
Sirvan las siguientes notas para un esbozo de análisis PESTEL (por las siglas en inglés de los rubros a continuación) para bibliotecas.
POLITICO
La consolidación del gobierno de la cuarta transformación (2018-2024) consume recursos, tiempo y esfuerzo de las autoridades y hasta parece que se relega el trabajo con la variable del conocimiento social y la socialización del conocimiento, aunque se ha avanzado en la comunicación directa con la sociedad a través de las conferencias mañaneras, es indispensable que se haga un trabajo de organización, curaduría y análisis de dicho ejercicio diario, sin contar con la vasta producción de información oficial y del ámbito académico que a pesar de la pandemia se sigue generando día a día. Un actor que se difumina en la escena es el estamento bibliotecario del país que mucho tendría que aportar a estos propósitos.
ECONÓMICO
El estancamiento económico precedente, la pandemia y sus consecuencias económicas y ahora la inflación desatada por la guerra en Ucrania, presionan a los gobiernos, empresas e individuos a ser más cuidadosos con el dinero, a no hacer gastos innecesarios, no obstante esto también afecta rubros indispensables como la producción editorial, el acceso a fuentes de información de calidad y las bibliotecas sufren estos obstáculos cada vez con mayor dureza. Incapacitadas para mantenerse actualizadas, vigentes y útiles, las bibliotecas ven retroceder su impacto e influencia ante la inmediatez de los servicios virtuales de información, las bibliotecas digitales, los repositorios digitales, etc. No obstante, es evidente que la sociedad ha sido tomada por sorpresa por las TICs y están desviando su idea de información, conocimiento y cultura hacia las versiones que promueven las empresas y no la larga tradición académica.
SOCIAL
Es posible advertir que las nuevas generaciones están adheridas a los dispositivos de tecnología, que el lenguaje está lleno de lo que se supone es fruto de la creatividad de los influencers, de los tik tokers, que hay una balanza aparentemente favorable al trabajo independiente de los youtubers, sin embargo los poderes económicos y políticos influyen o buscan desviar para su conveniencia dicha polifonía, para que como se caracteriza por el concepto de gatopardismo, todo cambie para seguir igual. Entonces tenemos portales de divertimento que tienen miles de visitas más que los canales informativos o educativos y se alienta la sociedad de la desinformación, de la ignorancia y como dice el filósofo coreano Chun Hal, la sociedad del cansancio y la deshumanización.
TECNOLÓGICO
Hasta antes del conflicto en Ucrania las empresas de las TIC parecían ser las empresas que lideraban el escenario mundial de la innovación, hasta que se tropezaron con su propia sombra al establecer mecanismos de exclusión, censura, silenciamiento de la información y de la verdad, de modo que revelaron su materia más oscura, la de encontrarse al servicio de los intereses económicos y políticos aún de ultraderecha conservadora. Por otro lado, las realidad de las hostilidades bélicas, el cese de intercambios económicos, los bloqueos deliberados a la economía rusa, han tenido un efecto complejo que paraliza la industria de los microchips, que eleva los costos de los componentes de alta tecnología que van a los ordenadores, y aunque las capacidades de estos son imbatibles con relaciones a las de hace pocos años, los costos de acceso y mantenimiento o las posibilidades de reparación o renovación disminuyen.
En el caso del almacenamiento de datos, por ejemplo, la tecnología de discos de platos giratorios se vio avasallada por la tecnología de memorias de estado sólido y ahora las optimizaciones de esta conducen a medios de almacenamiento masivos de bajo costo y desempeño diez, o cien veces superior al de hace pocos años. Esto, para las bibliotecas representa una oportunidad inigualable para preservar en forma digital la mayor cantidad de información y datos disponibles, en previsión de cualquier evento destructivo que pudiera poner en riesgo dicho patrimonio cultural e intelectual de la humanidad.
El despunte de la Inteligencia Artificial ofrece retos a las bibliotecas, así como al campo social y económico en general, y levanta cuestiones éticas primordiales como las que se relacionan con la capacidad de estas IAs de tomar la dirección de los asuntos humanos, sociales y políticos, lo cual constituye un desafío para las democracias. Pero es evidente que China y Google están buscando la llamada supremacia cuántica con el objetivo de contar con IAs cada vez más potentes, que sean capaces precisamente de ver el mejor camino entre el mar de desinformación, la mejor estrategia en el juego de intereses polivalentes.
AMBIENTAL
Las premisas de Reducir, Reutilizar y Reciclar de la sustentabilidad a galope del discurso de las nuevas energías se ha venido diluyendo ante el hecho de que la producción y la circulación de mercancías está en riesgo por la guerra. Los países deben reducir o anular las hostilidades, como ha dicho el presidente de nuestro país, hasta el punto en que haya una tregua -entre más larga mejor- para que las economías nacionales sobre todo las menos favorecidas se recuperen de la pandemia y de la guerra.
Los efecto en el clima y el medio ambiente del proceder humano errático en materia ambiental, caracterizado por los nacionalismos que privilegian su desarrollo a la contención de un fenómeno global, ya vienen con sus elevadas facturas en el ámbito de la salud y pronto en el de la disponibilidad de alimentos y otros satisfactores.
Las bibliotecas deben ser baluartes de los derechos humanos a la alimentación, el trabajo, la salud, la educación y nadie debe quedarse al margen de la herencia y los conocimientos que hasta el momento las bibliotecas preservan y atesoran.
La máxima del bibliotecario indio Ranganathan de A cada libro su lector y a cada lector su libro, hoy se debe agregar la idea de que hay una app , una red social o un sitio web que sirve a las necesidades de los usuarios, y de que es importante empoderar a los usuarios para que sean creadores y gestores de contenidos y no solamente consumidores de una producción cultural de calidad sumamente variable que lo mismo incluye los atractivos y efímeros videos de Tik Tok, y las sesudas y amenas charlas de TED.
LEGAL
Pese a la existencia de leyes, planes y programas que mencionan directamente o sesgadamente a las bibliotecas, no parece haber poder humano que restituya su función más elevada en el plano social y cultural, como casas democráticas, casas de la sabiduría, templos del conocimiento, adonde el único requisito indispensable es saber leer, para que las personas se desprendan de los velos de la ignorancia y conozcan realmente y de viva voz de los más brillantes pensadores y escritores los mecanismos para asegurar el pan, la paz, el cuidado de la naturaleza y de sus cuerpos y una convivencia enriquecedora todos los días en ambientes de pluralidad y respeto.
Las bibliotecas contienen las semillas para un mundo mejor, para un mundo nuevo, pacífico, equitativo, justo, humano.