Miguel Figueroa-Saavedra Ruiz
Departamento de Lenguas
Docente, UVI Xalapa
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Durante este semestre se han llevado a cabo en las cuatro Sedes de la UVI (Grandes Montañas, Totonacapan, Huasteca, Selvas) el Taller de Lexicografía dirigido a las lenguas nacionales, el primero que con este carácter se imparte en la UV. En este Taller han participado los estudiantes de la Orientación de Lenguas, algunos estudiantes de la Orientación de Derechos y algunos miembros de la Academia Veracruzana de las Lenguas Indígenas (AVELI).
El propósito de este Taller era dar a conocer a los futuros gestores interculturales para el desarrollo las posibilidades que los diccionarios pueden ofrecer para la trasmisión de saberes, la mejora del aprendizaje y el mantenimiento y animación de las lenguas locales. No sólo se enseñó qué es un “diccionario” y su uso, sino que se enseñaron las pautas básicas para la planificación de un diccionario.
A ese respecto se insistió en la importancia de tener un objetivo claro que responda a las necesidades de los hablantes, tanto para conocer y mejorar el uso de su lengua como para adentrarse en otros conocimientos de tipo profesionalizante o de cultura general. Si no se toma en cuenta ese aspecto fundamental, la realización de diccionarios está condenada a ser un mero esfuerzo que sólo sirva para rellenar los estantes de las bibliotecas con “tumbaburros”, pero no para facilitar a las personas el conocimiento de su medio a través de la lectura y reflexión sobre su propia lengua.
En los Talleres participaron hablantes de zoque-popoluca, zapoteco, hamasipijni, náhuatl (del centro, norte y sur), nhanhü, tutunaku y español. Cada uno de ellos integraron equipos monolingües y multilingües para el diseño de proyectos lexicográficos tanto lingüísticos como no lingüísticos con diferente aplicación.
Así, por ejemplo, surgieron las siguientes propuestas:
• Diccionario de Gastronomía de la Región de Tequila en español, cuyo propósito era dar a conocer los platos tradicionales y componentes característicos de la región, la mayoría con nombres en náhuatl,
• Diccionario de Medidas Nahuas propias de la Huasteca, escrito completamente en náhuatl,
• Diccionario de términos jurídicos Español-Náhuatl, donde los términos en español de uso general en textos legales son explicados en náhuatl estableciendo posibles términos equivalentes;
• Diccionario Tutunaku de vocabulario textil, para conocer todas aquellas palabras que se refieren a la fabricación de prendas y telas y el significado de sus diseños;
• Diccionario bilingüe Hamasipijni-Nawatl para facilitar el aprendizaje del tepehua a estudiantes nahuas;
• Diccionario de uso escolar para niños zoque-popolucas para ayudar a aprender a leer y escribir su lengua y a entender el significado de las palabras, etc.
En estos proyectos se planteaba la necesidad de la existencia de diccionarios en la propia lengua que facilitaran el aprendizaje de otros idiomas nacionales o extranjeros (sin tener que acudir a la intermediación de la lengua española), es decir, diccionarios de L2-L1 donde la L1 sea el resto de lenguas nacionales; y la creación de diccionarios monolingües que explicarán los significados de las palabras de uso común o técnico para los propios hablantes de las lenguas. Estos dos productos editoriales son en la actualidad un vacío tan llamativo y útil, como escandalosamente ausente de la oferta editorial.
Entre las propuestas más interesantes y viables a corto plazo surgió la idea de confeccionar un vocabulario multilingüe de términos académicos para los miembros de reciente ingreso de la UVI. Este Diccionario terminológico de uso académico Español-Hamasipijni-Zapoteco-Zoque-popoluca-Nawatl-Tutunaku-Nhanhü para miembros de la UVI, buscaría explicar en cada una de las lenguas de empleo en la UVI los conceptos encerrados en aquellas palabras que son de uso técnico en aquellos materiales que se emplean de modo general en textos y discursos entre facilitadores y estudiantes.
Así, palabras como “heurístico”, “desarrollo”, “identidad cultural”, “nódulo”, “orientación”, “gestor intercultural”, “sustentabilidad”, etc. serían explicadas y comentadas en su sentido científico en diferentes lenguas y se trataría de proponer posibles palabras equivalentes en cada lengua. De ese modo, tendríamos una herramienta didáctica que favorezca el aprendizaje significativo de los conceptos, explore sus posibilidades de cognición en cada lengua (abriendo nuevos sentidos de exploración reflexiva) y también anime al uso de las lenguas dentro de la UVI al dotarles de una terminología que actualiza y legitima su uso en los discursos académicos como lenguaje científico. Se propulsa así la literacidad funcional de las lenguas y se las incorporaría a las industrias de producción cultural y científica.
Quién sabe, quizás ese propósito dé pie a un Segundo Taller Lexicográfico para el siguiente semestre donde dar comienzo a semejante obra, tan útil como seguramente laboriosa, deseablemente sería bien recibida tanto por estudiantes como facilitadores.
Para concluir, sólo decir que doy las gracias a todos aquellos maestros y alumnos que con su asistencia, colaboración y participación dieron sentido a este taller. De su trabajo, comentarios y sugerencias se prevé que para el próximo semestre que los estudiantes puedan disponer de un Manual de lexicografía para estudiantes de la UVI donde se recojan las enseñanzas y trabajos de los estudiantes en estos talleres. Espero que con tal fin envíen todos los participantes sus tareas para contribuir a esta obra.
Un saludo a todos.
Miguel Figueroa
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