Carlos Castro Rivera
Webmaster
Administrativo, UVI Xalapa

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Serie: Taller de Habilidades para la Publicación y Difusión de Contenidos en Internet
(Ver inicio de esta Serie)
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HOLA!:
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Agradecimiento

Este correo es para agradecerles a todos ustedes (estudiantes, administrativos y profesores) el haber participado en el TALLER DE HABILIDADES PARA LA PUBLICACIÓN Y DIFUSIÓN DE CONTENIDOS EN INTERNET, y confirmarles que todos los trabajos que me enviaron, como productos del mismo, ya están publicados en el Blog.

En Ixhuatlán y en Espinal cumplimos con la actividad y esperamos que los contenidos vistos puedan sernos de utilidad a todos.
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Los puntos básicos

Apenas tocamos los puntos básicos pero hay muchas más cosas que ver, para una próxima ocasión podremos desarrollar más cosas y abordar con mayor detenimiento distintas opciones para mejorar y fortalecer nuestras habilidades, que todos tenemos, simplemente es cuestión de explorarlas y ver lo fácil que resulta expresarnos más allá de los públicos locales.
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El potencial de una cultura digital

Internet es publicación, pero también es participación, integración, socialización y construcción de redes globales.

Precisamente aquí está uno de los puntos fuertes de la red, que nuestras palabras, que nuestra voz y nuestras inquietudes puedan tener un mayor impacto y cobertura.

Hoy día nos encontramos inmersos en la multiplicación de nuestros contactos. Yo crecí en un mundo de teléfonos fijos, de periódicos de papel, de televisión, de periódicos murales en la escuela, de máquinas de escribir mecánicas, de cartas escritas a mano y de búsqueda de información en bibliotecas públicas. Todo eso lo viví, y todo ese mundo está evolucionando.

Ustedes, muy jóvenes, se relacionan intensamente con el correo electrónico, con el messenger, con los celulares y los mensajitos, con internet.

El mundo no va a regresar a los medios que yo conocí cuando tenía 18 años. Como muchas personas de mi edad, soy un «Migrante Digital», de una cultura de papel me sumergí en una cultura digital. Nicolás Copérnico, Leonardo da Vinci, Johannes Gutenberg o Charles Darwin no imaginaron el mundo que nos heredarían por la fuerza de sus revolucionarias ideas. Un mundo que a ellos los sorprendería, y quizá un mundo que no acabarían de entender, demasiado avanzado tecnológicamente para lo que conocieron.

Pero ustedes, a su edad, tienen a su alcance más conocimientos de los que ellos produjeron. Están en una universidad, en un centro de producción y distribución de conocimientos muy distinto a los que estos sabios vieron en sus tiempos. Es algo que no deja de sorprenderme, principalmente porque lo que ustedes pueden hoy escribir y dar a conocer, viaja más rápido y más lejos de lo que la imprenta de Gutemberg jamás hubiera logrado.

Sólo por poner un ejemplo, en la Edad Media a un «copista» le tomaba 10 años reproducir a mano un libro; en el Renacimiento a Gutenberg le tomaba 6 días reproducir un libro en su imprenta de «tipos móviles», y la distribución de un libro podía llevar meses o años transportándolo en carretas y barcos de vela.

Hoy, un texto sencillo y breve (fotos y videos incluidos) nos puede llevar tan sólo 20 minutos, lo enviamos por correo electrónico o lo subimos a una página web para distribuirlo a decenas, cientos o miles de personas en cualquier parte del mundo, en el mismo instante en que clicamos un botón en la pantalla de la computadora.

Este mundo tecnológico que para nosotros es «natural» porque vivimos en él, para gente de la Edad Media, del Renacimiento, o del Siglo XIX, sería difícil de entender.
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Un Taller para conectarnos

Les invito a no desconectarse, a que mantengamos el contacto y sigamos participando de lo que Copérnico, da Vinci, Gutenberg y Darwin no conocieron, pero anticiparon con sus inventos y sus nuevas formas de comprender, de explicar y de construir el mundo en el que nuestras ideas y nuestros pensamientos heredaron lo mejor de sus vidas.

Y lo repito, mantengamos el contacto y sigamos participando. El Taller que tuvimos no terminó en la sesión de cinco horas que compartimos todos, durará todo el tiempo que nos sigamos haciendo preguntas sobre lo que hacemos, mientras sigamos poniendo palabras en un texto, y mientras sigamos tomando imágenes.

Es lo que esos cuatro sabios, con los medios que tenían a su alcance, siguieron haciendo cada día.
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¡¡¡ Sigamos en contacto, no nos desconectemos !!!

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