- Cumplen con la Norma Oficial Mexicana
- El agua que vierten es gratuita, fomenta un estilo de vida saludable y reduce el impacto ambiental
- El costo del agua en botella individual es 900 por ciento mayor que el de agua de garrafón y mil 600 por ciento mayor que el de agua de abastecimiento público
Los bebederos brindan agua potable las 24 horas y son verificados por un laboratorio certificado.
David Sandoval
Los bebederos y el servicio de agua purificada disponibles en la zona de Rectoría de la Universidad Veracruzana (UV) cumplen con los estándares de calidad a nivel nacional, por lo que son una buena opción para la comunidad universitaria.
Además de ofrecer agua potable las 24 horas, los dispositivos instalados en cada edificio son verificados por un laboratorio certificado que analiza la calidad del agua y a la fecha se han obtenido buenos resultados, esto quiere decir que los purificadores operan adecuadamente, expresó Lázaro Sánchez Velásquez, responsable de la Coordinación Universitaria para la Sustentabilidad (CoSustenta).
El agua es un derecho universal que debe estar al alcance de todos, no obstante su abastecimiento adecuado es un problema complejo, reconoció; por tal razón en próximas fechas se efectuará una campaña informativa para sensibilizar a la comunidad universitaria en el uso de los bebederos.
Sánchez Velásquez puntualizó que “considerando que el consumo diario recomendado de agua por una persona es de dos litros, la disponibilidad gratuita de agua purificada resulta en un considerable ahorro económico para la comunidad”.
Se relaciona con el fomento de una vida saludable y la reducción del impacto ambiental, ahorro económico y satisfacer el derecho universal de acceso al agua potable.
Por ello, los purificadores de agua instalados en cada edificio tienen su propio tinaco, que es hermético, evitando así la contaminación provocada por objetos extraños.
“En México, la calidad del agua para consumo humano está regulada por la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994 ‘Salud ambiental, agua para uso y consumo humano’ que marca los límites permisibles de calidad y tratamientos a que debe someterse el agua para su potabilización.”
Esta norma se aplica al proceso de purificación que tienen los bebederos, con un sistema que opera de la siguiente manera: una bomba hidroneumática conduce, con presión constante, el agua del tinaco al sistema de filtración; después de ser filtrada, el agua pasa por una lámpara ultravioleta donde es desinfectada, finalmente el agua ya purificada se almacena temporalmente en el tanque presurizado que la suministra a los muebles distribuidores.
Respecto al ahorro económico, el académico señaló que “el costo del agua en botella individual es 900 por ciento mayor que el de agua de garrafón y mil 600 por ciento mayor que el de agua de abastecimiento público; el agua es más cara que la gasolina en muchos lugares”.
Sánchez Velásquez destacó que “mediante el uso de bebederos evitaríamos el desecho de PET, ya que según especialistas cada mexicano genera siete kilos de este plástico al año; cuando se recicla sólo es reutilizado 35 por ciento, mientras que el restante se desecha, hay que considerar también la energía que se utiliza para elaborar las botellas, transportarlas y reciclarlas. Si consideramos que Xalapa es una ciudad con problemas de vialidad, el uso de los bebederos puede repercutir en la reducción del tráfico al suspender el abastecimiento de garrafones y botellas de agua”.
La presencia de los bebederos en Rectoría permite a toda la comunidad universitaria el acceso al agua purificada, donde además de tomar agua pueden llenar o rellenar sus botellas de manera gratuita.
Por el contrario, las bebidas endulzantes generan problemas relacionados con el metabolismo y las enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes e hipertensión.
En relación con el ahorro económico que representan, explicó que el costo de un sistema de purificación puede variar entre seis mil y 12 mil pesos dependiendo de las características de la entidad, no obstante su costo de inversión puede recuperarse en poco tiempo: un año para una dependencia que consume cinco garrafones a la semana, por ejemplo.
El Coordinador de CoSustenta comentó que en próximos días comenzará una campaña de difusión para el consumo de agua de los bebederos, en la cual se resolverán las inquietudes de quienes laboran en la zona de Rectoría.
Se ubicarán mesas de información en cada entidad de la zona para que el personal administrativo, técnico y funcionarios conozcan los beneficios de utilizar los bebederos, “queremos que la comunidad nos dé su voto de confianza ya que éste es un programa serio”, afirmó.
