En Homenaje a Veracruz convergen
cultura y tradiciones de nuestro estado

fin de que aquéllos comprendieran las diferencias entre el cristianismo y la idolatría, entre el bien y el mal, todo al compás de sones ejecutados con tambor y flauta de carrizo– y la Danza de los negritos, que surgió en los tiempos en que Tezcatlipoca, el señor negro, sustituyó en el panteón mesoame-ricano a Quetzacóatl, el señor blanco, y que más tarde cobró importancia con una danza que representaba la creencia popular de la sanación por medio de la serpiente. Esta rutina se complementa con la danza prehispánica dirigida a los cuatro puntos cardinales del universo y sus respectivos dioses.
En la tercera parte del programa se representa el tradicional recorrido realizado en Tlacotalpan, que es presidido por enormes muñecos que aluden a personajes míticos y fantasiosos o figuras relevantes del medio social y político, los cuales desfilan por las calles de la ciudad en medio de la música y la algarabía de los tlacotalpeños.
Posteriormente, escenifican la Fiesta de las Cruces que se realiza en Alvarado el 3 de mayo, cuando cada barrio erige una cruz sobre un altar adornado con flores de coyol, mientras las jarochas reparten horchata a la concurrencia. Este número finaliza con un fandango en el que el ballet interpreta El siquisirí, La Bruja, El zapateado y La bamba.
El espectáculo culmina con el carnaval veracruzano, donde reyes, rumberas y comparsas muestran al público, a ritmo de pregones y danzones, la alegría y el regocijo de esta festividad popular, tan famosa ya en el mundo.
Homenaje a Veracruz –cuya premier se presentó el 6 de septiembre en el puerto jarocho, con el objetivo de recaudar fondos para la reforestación del campus Mocambo y de las áreas verdes cercanas a la usbi– reunió a más de 100 bailarines, quienes estuvieron acompañados por el grupo Tlen Huicani, cuya misión principal es rescatar y difundir el patrimonio musical de los pueblos veracruzanos.