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Con el apoyo del Instituto Veracruzano de Cultura (Ivec)
y el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC),
la Universidad Veracruzana concluyó en el puerto de Veracruz
y en Xalapa el diplomado Imágenes en movimiento, que durante
tres meses acercó a un nutrido equipo de estudiantes con
los más activos maestros, realizadores, directores y productores
fílmicos de México.
El diplomado –cuyo fin es sentar las bases para la formación
de jóvenes cineastas en la entidad– incluyó
aspectos fundamentales del cine como apreciación cinematográfica,
guión y narrativa, producción y realización.
Xalapa ha abierto sus puertas a la creación fílmica.
Con apoyo de la UV y otros inersionistas, se han producido cintas
como Tiempo Real, Otilia Rauda o El coronel no tiene quien le escriba.
El diplomado logró encaminar con éxito las inquietudes
de decenas de jóvenes entusiastas del cine, en cuya clausura,
además de la entrega de los reconocimientos, se proyectaron
los cortometrajes El río y El sueño de David, ambos
escritos, dirigidos y producidos por los propios alumnos.
También se proyectaron los cortometrajes realizados en el
puerto y los producidos en Salamanca y Morelos, los cuales también
forman parte del proyecto del CCC por impulsar la formación
de jóvenes cineastas en el interior de la república.
Su directora, Ángeles Castro Gurría, satisfecha por
los resultados obtenidos luego de tres meses de trabajo, dijo que
los productos elaborados por los jóvenes veracruzanos superaron
en mucho las expectativas de lo que es un diplomado básico
en el que sólo se da lo elemental: “Estoy muy entusiasmada
con el compromiso de los participantes, con su talento, con sus
ganas, además porque los maestros del CCC en muy poco tiempo
hicieron un muy buen trabajo”.
Sobre la responsabilidad del CCC por descentralizar el cine de las
grandes plazas como el Distrito Federal, Guadalajara o Monterrey
y llevarlo a otros sitios como Veracruz, añadió que
se trata de una política del Consejo Nacional para la Cultura
y las Artes (Conaculta) y que ahora con el apoyo de la
UV y el Ivec empieza a dar frutos: “Esto nos genera
mayor compromiso y responsabilidad. Por eso esperamos contar con
los recursos suficientes para poder continuar. En Veracruz hay historias,
hay talento y hay jóvenes que están muy ávidos
de expresarse en el lenguaje audiovisual y necesitan contar con
las herramientas para ello”.
Según Castro Gurría, el siguiente paso es evaluar
los procesos que se llevaron a cabo y que siempre se pueden mejorar
para hacer un nuevo planteamiento del curso o darle seguimiento
a éste.
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