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Siembran
en jardines etnobotánicos plantas medicinales
Coadyuva UV a preservar medicina indígena
en Zongolica
Edith
Escalón |
Estudiantes
que hablan náhuatl y otras lenguas entrevistaron a los indígenas
para incluir sus conocimientos en un catálogo de medicina
tradicional |
Decenas
de plantas medicina les que los indígenas de la región
de Zongolica utilizan para hacer limpias, curaciones y tratamientos
naturales, y el conocimiento que aún conservan en cuanto a
su uso serán preservados desde ahora gracias al trabajo de
estudiantes y académicos de la Universidad Veracruzana (UV),
quienes establecieron con apoyo comunitario un jardín etnobotánico
en la zona con más de 150 especies nativas y publicaron un
catálogo que detalla cómo utilizarlas.
Estas acciones se enmarcan en el proyecto GRAMIT (Grupo Regional de
Apoyo a la Medicina Indígena Tradicional) que coordina, desde
hace siete años, un grupo de académicos e investigadores
de las carreras de Biología y Agronomía de la UV, en
la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (FCBA) de
la zona Córdoba-Orizaba.
Las plantas medicinales fueron colectadas en las regiones aledañas
al Barrio de Dolores, la Acuxteca, Fuente Porras, La Quinta, Zongolica,
Ixcohuaca y San Sebastián, comunidades principalmente de origen
náhuatl, de donde provienen los más de 50 indígenas
que integran la organización de médicos tradicionales
de la región.
Asimismo, los universitarios les hicieron entrevistas que se fueron
transformando en largas conversaciones, para así recuperar
información e integrar sus experiencias al catálogo
de medicina tradicional que realizaron como parte del proyecto GRAMIT,
documento que incluye los conocimientos botánicos y científicos
que se tienen sobre las especies.
“Al principio, los médicos tradicionales no hablaban
mucho, contestaban apenas, pero poco a poco nos fuimos ganando su
confianza, sobre todo los que hablamos la lengua indígena y
somos de la región, y así creció la disposición
y la colaboración. Ahora que ya les entregamos el catálogo
ya vieron que el trabajo de la UV es serio”, informó
una de las alumnas que participaron en el levantamiento de información
etnobotánica.
Otros
grupos se interesan
A raíz de este trabajo, otras organizaciones de médicos
tradicionales buscaron ser parte del proyecto GRAMIT y solicitar a
la UV apoyo para integrar un catálogo propio y establecer un
jardín etnobotánico que dé cuenta de sus prácticas
de medicina tradicional. Es el caso de los grupos de la comunidad
de Chicac, del municipio de Coscomatepec, y de Huitzila, del municipio
de Soledad Atzompa, donde justo ahora están por terminar la
sistematización de los saberes médicos tradicionales
y científicos en el catálogo, así como el establecimiento
de los jardines etnobotánicos gracias al apoyo de un nuevo
grupo universitario de la misma Facultad. |
Yaquelin Gueno Heredia, académica de la FCBA. |
“El
proyecto GRAMIT no sólo incluye estas acciones, sino también
una serie de estrategias para fortalecer y sistematizar la medicina
indígena de Veracruz. Fue gracias a las reuniones mensuales
que realizamos para informar de los avances de este proyecto que otras
organizaciones se enteraron del trabajo que concluimos en Zongolica
y decidieron participar”, comentó Yaquelin Gueno Heredia,
académica de la FCBA.
Añadió que son los universitarios, apoyados por las
comunidades, quienes recuperan la información etnobotánica,
realizan la investigación florística, dirigen el trabajo
de la parcela, establecen las camas, hacen los letreros para las plantas,
buscan y especifican sus nombres científicos y organizan la
siembra por grupos de padecimientos. Es decir, son quienes coordinan
el trabajo en los municipios. |
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Además de esas organizaciones de médicos tradicionales
que ya tienen avanzados los trabajos de sistematización del
conocimiento tradicional, hay otros cinco grupos –principalmente
del centro del estado– que apenas se están integrando
al proyecto. El objetivo a mediano plazo, dijo, es establecer una
red de jardines de plantas medicinales que comparta información
y fortalezca esa área en toda la entidad.
Catálogos
útiles
Gueno Heredia, también coordinadora de la UV de este proyecto,
informó que el catálogo –que ya fue editado
y entregado a la organización indígena en Zongolica–
presenta fotografías de las plantas, detalles de su morfología,
sus nombres (científico y común, en náhuatl
y en español), así como un cúmulo de información
etnobotánica que no sólo resulta útil para
los estudiosos del área, sino para las propias comunidades.
“Gracias a este documento se puede saber cómo se llaman
las plantas, cómo son, cómo y para qué se usan,
qué enfermedades curan, cómo se preparan, cuál
es la parte útil para las curaciones, dónde se encuentran
las especies, en qué clima viven, cómo se cultivan,
dónde se colectan, etcétera”.
Explicó que las más de 150 especies que ya tienen
sembradas en el jardín etnobotánico de Zongolica,
y que las comunidades se encargan de vigilar, se clasifican en función
de las enfermedades que alivian, entre ellas las del aparato digestivo
y respiratorio, de las vías urinarias, de la piel y de la
mujer, así como los padecimientos de los niños y las
enfermedades de filiación cultural (como el susto, el empacho,
los golpes, etc.), que en una zona indígena como ésta
son imprescindibles.
Gueno Heredia resaltó, además, los beneficios académicos
que reportó este proyecto a los universitarios de la FCBA,
pues con el trabajo práctico científico se titularon
tres alumnos de Biología de esta Facultad (Armando Alafita
González, Gustavo Domínguez Montalvo y Gabriela Grajales
Silva), y se ha consolidado el trabajo del cuerpo académico
que integran Yolanda Martínez, Roberto Ramos, Héctor
Oliva Rivera, Feliza Ramón, Pilar Navarro, Yolanda Murrieta,
José Luis Oviedo, Carlos Galán, Guillermo Nava y Antonio
Pérez, además de Yaquelin Gueno. |
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