Noviembre de 2015.- La planicie costera del Golfo de México es la ruta migratoria más importante en el sistema de migración de aves Neártico-Neotrópico. Más de 250 especies de aves de latitudes boreales abandonan estacionalmente sus sitios de reproducción en Canadá, Estados Unidos y el norte de nuestro país para migrar al sur de México, Centro y Sudamérica.
Durante su paso, estas aves adoptan diferentes estrategias de vuelo con las que navegan las variables ambientales que enfrentan. Corrientes de viento, precipitación, topografía del terreno, distribución de grandes de cuerpos de agua, disponibilidad de hábitat y recursos alimenticios son algunas de las que más influyen su migración.
 |
 |
La organización conservacionista Pronatura Veracruz A.C. (que tiene un convenio de colaboración con la Universidad Veracruzana desde 2013), mantiene actividades investigación, monitoreo de poblaciones, educación ambiental y conservación de hábitat en varias localidades de Veracruz. El Dr. Ernesto Ruelas Inzunza —becario de repatriación de CONACYT en INBIOTECA— continuó este año como colaborador de largo plazo de Pronatura en tareas de investigación y monitoreo.
El objeto principal de este proyecto es entender la ecología de poblaciones de aves migratorias y contribuir a su conservación. A través de dos sitios para monitoreo en Cardel y Chichicaxtle, Veracruz, se estudian los patrones de largo plazo en la demografía poblacional de unas 30 especies de aves rapaces y acuáticas, los efectos de cambio climático en la fenología de su migración, y su distribución geográfica y temporal.
Otra parte de este estudio se lleva a cabo en una estación de anillado en las dunas de Cansaburro, cerca de San Isidro, Veracruz. En este sitio se estudia la conectividad migratoria de las aves capturadas ahí respecto a sus áreas de origen. La principal fuente de información son las aves marcadas originalmente en otras localidades y recapturadas aquí (en la fotografía, un gavilán pollero Accipiter cooperii de 5 años de edad, que fue anillado originalmente Grand Forks, North Dakota, Estados Unidos, a más de 3,200 km de Cansaburro), si bien en el pasado se han utilizado isótopos estables de hidrógeno para determinar sus localidades natales.
Además de ser el principal responsable del análisis, síntesis y curación de datos de la información generada por este proyecto desde 1991, el Dr. Ruelas dirigió este otoño dos proyectos de investigación con estudiantes del proyecto.
 |
 |
El primero de ellos es la determinación de contaminación por mercurio en especies residentes y migratorias de aves rapaces. El mercurio es un contaminante que ingresa a redes tróficas principalmente en ecosistemas acuáticos y transita a otros elementos del sistema de manera diferenciada: se encuentra en concentraciones más altas en las especies que se sitúan en la cúspide de la pirámide alimenticia por efecto de la bioacumulación. En contraste, se encuentra a muy bajas concentraciones en estratos más bajos del ecosistema como plantas y consumidores primarios. Durante la temporada de 2015, que concluyó el pasado 20 de noviembre, se capturaron poco menos de 300 individuos de una docena de especies de rapaces residentes y migratorias en Cansaburro. Se obtuvieron muestras de sangre de buena parte de éstas para buscar trazas de este contaminante.
Un segundo proyecto de investigación fue resolver si existen una migración diferencial por clases de edad en el aguililla cuaresmera (Buteo swainsoni). En la migración de esta aguililla existen dos pulsos de migración que se hipotetiza pertenecen a dos poblaciones de orígenes geográficos distintos o a diferencias en las clases de edad de esta especie (en algunas otras especies de aves se han reportado a los adultos migrar en fechas diferentes que aquellas de los juveniles).
 |
 |
Los conteos de migración de esta temporada arrojaron resultados interesantes. Se cuantificaron más de 4,200,000 aves rapaces y 180,000 aves acuáticas, un número ligeramente abajo del promedio anual. En un análisis de la primera década de este estudio, publicado en 2005, se validó el uso de los conteos de aves de Cardel y Chichicaxtle para estimar cambios poblacionales. En 2016 se espera publicar los datos de tendencias poblacionales de la segunda década de operación sistemática de este proyecto.
Las tareas de educación ambiental y protección de hábitat mediante la creación de áreas privadas de conservación forman parte integral de este proyecto, que en 2016 cumplirá 25 años de actividades en el corredor de aves migratorias más importante del mundo.
Este trabajo abre las puertas a futuras investigaciones de estudiantes de posgrado del INBIOTECA.
 |
 |
