💡 #InformaciónConCiencia La nueva normalidad: elementos indispensables
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Sábados En La Ciencia #OlivaNoticias #MultimediosPublicado por Oliva Noticias en Miércoles, 20 de mayo de 2020
Varios países, principalmente de Latinoamérica, que aún tienen altos números de contagios activos y de decesos, se preparan para salir del confinamiento. La pandemia de covid-19, reveló un panorama de emergencia para el cual no estábamos preparados y que al parecer no se puede sostener más. Por ello debemos regresar a la “normalidad” nuestras actividades.
El semáforo covid-19 señala que las instituciones y empresas deberán retomar funciones a partir del próximo primero de junio. ¿Estamos preparados? La respuesta es que no, y no sólo para México, como hemos visto en las noticias, mientras no tengamos una vacuna y mayor conocimiento de cómo afecta el virus al organismo humano, todos estaremos en riesgo. Por lo que no debemos bajar la guardia.
Por ello, a nuestras antiguas rutinas debemos adaptar nuevos aspectos, lo que muchos llaman una “nueva normalidad”. Si queremos sobrevivir a la pandemia con bajas pérdidas de vidas humanas, será necesario cambiar algunos de nuestros hábitos, por ejemplo: la forma en que nos transportamos, las medidas de higiene, los modos de socializar e incluso nuestras creencias.
Como muchos observamos, la cuarentena no pudo detener a todos los que tienen la posibilidad quedarse en casa. Pero los contagios en muchas ciudades fueron mínimos, ya que una parte de su población se ha quedado en casa y guardado sana distancia.
Cuando todos regresemos a trabajar el riesgo de contagio aumentará, y para evitar contagiarnos no podremos hacer nuestras actividades igual que como lo hacíamos antes. Por lo que hicimos una recopilación de recomendaciones que los expertos han proporcionado en diversos medios:
Continuar con las medidas de sana distancia, uso de cubrebocas e higiene de manos
La mayoría de los centros de trabajo en México están acostumbrados a la cercanía de sus empleados, en algunas oficinas los trabajadores prácticamente se encuentran hacinados. Este es un factor de alto riesgo ante el covid-19 y otras enfermedades contagiosas.
Evita tener cercanías innecesarias, recuerda que para esta enfermedad hay personas que portan el virus que pueden no presentar síntomas, otras que tardan en presentarlos. El uso generalizado de cubrebocas reduce el riesgo, pero debes usarlo adecuadamente, sin moverlo constantemente y sin dejando tu nariz destapada.
Lava tus manos continuamente con jabón durante un poco más de 30 segundos por vez. Hazlo rutinariamente, porta crema hidratante para evitar que se te resequen. Evita tocar tu cara, si te es urgente hacerlo, antes ponte un poco de gel con alcohol en las manos si no puedes aguantar a lavártelas.
Compartir cualquier objeto es un riesgo, lleva tus propios utensilios y herramientas de trabajo (lapiceros, calculadoras, entre otros). Limpia todas las superficies con las que tienes contacto con detergentes rutinariamente, también el teléfono con un líquido antiséptico antes de cada uso.
Evita abusar de toallas, cubrebocas y guantes desechables. Las toallas desechables no son más efectivas que las lavables, puedes fabricar tus propios cubrebocas y los guantes desechables no son necesarios para todos los oficios. Al no ser una situación de la que saldremos rápidamente, generar tantos residuos plásticos es aumentar las dimensiones de otro problema, al que más temprano que tarde, tendremos que enfrentar como humanidad: el calentamiento global.
Tener miedo o sentir angustia está de más, si guardas estas medidas en tu sitio de trabajo, reducirás al mínimo la posibilidad de contraer el virus. Si no las guardas, también esta de más sentir miedo, eso sólo debilitará tu sistema inmune.
Integrar medidas de higiene al llegar a casa
Cambiarse el calzado y quitarse la ropa de calle al entrar en cualquier casa, es una costumbre para muchas culturas en el mundo. En México sólo pocas familias lo hacen, pero por tu bien y de quienes te esperan adopta el hábito.
Continúa limpiando todos los objetos que ingresen a tu casa, incluyendo los objetos que lleves a la oficina. Evitar en lo posible las reuniones en casa, y si son sumamente necesarias, adopta una medida para que las personas que te visitan no traigan patógenos de la calle.
Sana distancia en todas nuestras relaciones sociales
Saludar de mano, de besos y abrazo, ya no es opción. Evítalo, muestra tu afecto y alegría de los reencuentros de otras formas, que tal con palabras y cuidado de la salud mutua.
No sabemos lo que pasará con el fin de la cuarentena, pero resulta lógico pensar que habrá un aumento de contagios. Evita sitios concurridos.
Cuestiona todo lo que escuches
Con el fin del confinamiento se vivirá un reforzamiento de las relaciones sociales, también la trasmisión de noticias, opiniones y creencias. Tanto de persona a persona como en los grupos a los que pertenecemos en nuestras redes sociales. Muchas de ellas pueden poner en riesgo nuestra salud, ya sea preocupándonos de más o haciéndonos más confiados.
Participar de discusiones tampoco es la solución, si podemos moderar los comentarios absurdos como por ejemplo: que el covid-19 no existe, que es un virus producido en laboratorio u otras teorías conspirativas, hagámoslo. Vayamos en contra de la desinformación. Pero si eso supone un desgaste emocional y dañar nuestras relaciones familiares, mejor seamos tolerantes y pacientes.
Todos tenemos incertidumbres, para muchas personas aferrarse a creencias irracionales les funciona como un bote salvavidas para no caer en la desesperanza. Pero debemos recordar que es mejor buscar fuentes confiables y contrastarlas (compararlas con otras fuentes confiables), aunque sea muy difícil entre toda la marejada de noticias que desinforman.
Consuma noticias e información procedente de la divulgación científica
Las noticias que divulgan ciencia no suelen ser tan atractivas como las que promueven la desinformación, pero a diferencia, si son útiles. Aun así, las personas no solemos consumirlas tanto. Estamos seguros de que la pandemia ha dado un giro a esta situación y de ahora en adelante, nos fijaremos más en videos y escritos que nos acercan a conocer cómo funciona el mundo, nuestro cuerpo y nuestra mente a partir de hallazgos científicos.
Sobre todo adoptemos una postura crítica ante toda la información que se nos pone enfrente, buscaremos la fuente y la comparémosla con otras relacionadas. Porque si algo es constante en la ciencia, es la duda.
Esperemos que esta postura no sólo sea a nivel personal, lo que ya es una gran ganancia. Ojalá que también las autoridades consideren los hechos científicos en la toma de decisión. Muchos analistas políticos han insistido en esto por décadas, pero no habíamos tenido una llamada de atención tan firme como la pandemia.
Cuidar de los trabajadores y dependencias dedicadas a la salud
Como hemos atestiguado, mientras muchos pudimos adecuar nuestras funciones a trabajo desde casa o con medidas que reducían el riesgo de contagio, para los trabajadores de la salud fue diferente. El sistema de salud es el campo de batalla de primera línea contra el covid-19, su carga de trabajo aumentó y ha tenido muchas bajas importantes para todos. A pesar de su destacada labor, los profesionales de este sector han recibido tratos que no merecen.
Es muy importante que ahora que habrá más personas circulando, ocupando los medios de transporte donde ellos viajan, y en las calles, procurar su protección y cuidado. Las personas del sector salud si están expuestas, más que cualquiera, al contagio por covid-19 y otras enfermedades, pero ellos no son una fuente de contagio.
Ellos y ellas toman sus precauciones y medidas de seguridad para no contagiarse y no contagiar a su familia. Si mantienes la sana distancia de ellos, como de cualquier otra persona y sigues las medidas de protección señaladas anteriormente, no corres ningún riesgo de contagio por compartir con ellos un autobús u otros espacios públicos.
Vacúnate y promueve la cultura de la vacunación
En cualquier momento surgirá una vacuna para protegernos del covid-19, muchos laboratorios del mundo ya se encuentran trabajando en ella. Ojalá que fuera México el primero en encontrarla y tuviéramos la capacidad para su producción, así seríamos los primero en beneficiarnos. Pero el escaso financiamiento de la labor científica nos aleja de esta posibilidad.
Aun así, la cultura de la vacunación en adultos no es la mejor en nuestro país y la muestra de ello, son todos los que no acuden cada año a aplicarse la vacuna de la influenza. También existe una población (afortunadamente reducida) de niños que no tienen la cartilla de vacunación cubierta parcial o totalmente, debido a diferentes factores, pero principalmente a la creencia de sus padres.
Esto ya no puede pasar, para que una enfermedad como el covid-19 pueda dejar de ser una amenaza es necesario contar con inmunidad colectiva, eso significa que la mayoría de nosotros debe aplicársela cuando sea el momento.
Sigue las recomendaciones de las autoridades
Bueno, ya dijimos que no es buena idea hacer caso a lo que recibimos en nuestros grupos de redes sociales sin ser críticos. En el caso de las recomendaciones de las autoridades de salud, si bien podemos criticarlas, hay que seguirlas. Siempre y cuando estemos seguros de que la fuente es fidedigna, es decir que se encuentren en los medios oficiales.
Hacemos esta referencia, porque durante la contingencia han circulado recomendaciones en formatos oficiales, que no fueron emitidos por las autoridades. Desconocemos las razones por las que alguien hace esto, pero te recomendamos que si recibes un anuncio oficial por ejemplo, en un grupo de WhatsApp, lo busques en los medios de difusión de la respectiva dependencia que se adjudica como fuente, antes de créelo o compartirlo. Una vez constatada la fuente, siegue las recomendaciones y si quieres comparte.
Cuidemos el ambiente
Tal como pudimos escuchar del experto en ecología tropical, restauración ecológica y ambientes perturbados, el Dr. Juan Carlos López Acosta, a pesar de la transformación sin precedentes a la que hemos sometido al planeta, aun quedan reservorios importantes de amenazas comparables con el covid-19. Seguir deforestando, comerciando con la fauna nativa amenazada y en riesgo de extinción, puede ser más grave de lo que parece para toda la humanidad.
Una de las principales hipótesis del origen del covid-19 sostiene que surgió de un mercado de la ciudad Wuhan en China, donde se comercian especies silvestres. Lo que no es exclusivo de los mercados asiáticos, como se aprecia en la conferencia “Antropoceno y el covid-19 ¿Un nuevo orden mundial para la biodiversidad?» en México tenemos muchos mercados similares.
Los eventos de extracción y comercio ilegal de especies nos exponen a situaciones de riesgo que pueden ser incontrolables. Ya lo había vivido la humanidad con enfermedades como la malaria, el zika, el ébola, el VIH-Sida entre otras.
¿Qué les parece si buscamos una nueva normalidad? Una en la que los ecosistemas sean restaurados y protegidos, y con ello aumentaremos la zona de amortiguamiento que nos protege de las amenazas, pero que también garantiza la continuidad de los beneficios que ahí se permanecen. Porque los ecosistemas remanentes no sólo contienen amenazas, también contienen oportunidades de generar nuevos medicamentos, de conservar especies, de restaurar el clima planetario y de vivir en un confortable y bello lugar, como lo ha sido hasta ahora nuestro planeta.
Informando con ciencia para Oliva Noticias Multimedios
Gladis Yañez y Rodrigo López
De Sábados en la Ciencia.
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Puedes ver la charla “Antropoceno y el covid-19 ¿Un nuevo orden mundial para la biodiversidad?” En el siguiente enlace https://youtu.be/66J70SoFDWo