Editorial

Apostar por el cambio conlleva siempre riesgos imprevistos por más cuidadoso que pueda ser el apostador. Cambiar es jugar con fuego porque desplazar de su centro de gravedad cierto orden de cosas –tan sólo modificar con un leve empujoncito el ciclo de la costumbre– tiene dos posibles consecuencias a corto o largo plazo: salir airoso del empeño o incinerarse en el intento. Los jueces o dictaminadores, los que ostentan el privilegio de emitir la última palabra, sea para alabar o condenar, son siempre los observadores pasivos situados del otro lado de la escena o los críticos de profesión, aquellos atentos al menor traspié, pero indiferentes o ciegos al esfuerzo que significa la elaboración de una nueva propuesta que entre a formar parte de lo que solemos llamar “la realidad”, a falta de un término menos convencional.

El Comité Editorial de La Palabra y el Hombre se ha propuesto, a la vez que rediseñar la imagen de la revista, enfocar sus objetivos hacia la divulgación de la cultura dentro y fuera del campus universitario. Dicho término –divulgación– no significa “aligerar” el contenido sino buscar caminos apropiados para alcanzar cada vez un mayor número de lectores en un contexto en suma complejo.

En esta ocasión rendimos homenaje a dos eminentes académicos, miembros fundadores de La Palabra y el Hombre, cuyo deceso lamentamos profundamente: el dramaturgo Emilio Carballido y el director de teatro Dagoberto Guillaumin. Por lo que concierne a las ilustraciones que redondean el número, además del dossier dedicado al reconocido artista veracruzano Pepe Maya, se destaca la serie de la fotógrafa alemana Gerta Stecher sobre el paisaje latinoamericano.

La sección Palabra Clara y Palabra Nueva incluye tres ensayos que tienen un punto en común: “Una literatura embargada”, de Edward W. Said, “Panorama de la literatura árabe contemporánea en español”, de Jesús Guerrero, y “Pitol traductor”, de Rosa Beltrán. Las tres exposiciones conciernen a los problemas de la traducción literaria y su correspondiente difusión en el mercado editorial de habla inglesa e hispana.

Complementan esta sección “El canto circular”, de Adán Medellín, que obtuvo el Premio Nacional de Relato “Sergio Pitol” en 2007, destinado a jóvenes creadores, y en la concepción de la hibridez literaria está el texto “La amarga memoria”.

Estado y Sociedad contiene el relevante discurso de John B. Thompson: “El libro en la era digital. La revolución oculta”, y el documentado artículo de Jorge Alonso: “El planeta Tierra, los movimientos antisistémicos y la alerta roja zapatista”. El primero retoma las palabras que pronunció el autor al recibir la Medalla al Mérito Universitario, concedido por la UV en 2007 en el marco de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU). En su intervención aborda el destino de la letra impresa en el mundo de la edición electrónica. En cuanto al texto de Jorge Alonso, es un compendio de las ponencias desarrolladas en el Coloquio convocado por los zapatistas, la revista Contrahistorias y la Universidad de la Tierra en diciembre de 2007, en San Cristóbal de Las Casas.

En Artes destaca, además de los tributos a los maestros Emilio Carballido y Dagoberto Guillaumin, el artículo de Eduardo de la Vega Alfaro, titulado: “Diego Rivera y el cine”, el cual es una contribución a la historia nacional del séptimo arte. En la sección Miscelánea se presenta, entre otras colaboraciones, el ensayo de Arturo García Niño sobre el film de culto de Ridley Scott, Blade Runner, que cumplió veinticinco años de su estreno sin que haya perdido vigencia.

Evitamos emitir por adelantado cualquier juicio de valor sobre el contenido de esta cuarta emisión de La Palabra y el Hombre, para dejar a la competencia del lector la libertad de evaluar los materiales que ahora le ofrecemos. Él es el factor decisivo para la apuesta.