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Como parte de la implementación de la tecnología en la industria y el comercio, la calidad también es un factor que se ha transformado con estas renovadas formas de producir, vender y vivir. La transformación digital, es el factor clave para la creación de nuevos puestos de trabajo y el rediseño de los existentes.
El Banco de México (Banxico) estima que el 65% de todo el empleo que existe actualmente en el país, dentro de muy poco tiempo será automatizado. Lo anterior, implica que los sistemas de calidad sufran modificaciones tanto en su desarrollo como en los resultados y su posterior manejo. Es indispensable que el Especialista en Calidad, tenga la capacidad de:
- Calidad de clase mundial
- Necesidades actualizadas del cliente nacional e internacional
- Identificar los elementos que añaden valor a los productos y servicios
- Análisis de los puntos de inspección automática y manual
- Sostenibilidad de los sistemas
- Técnicas de Calidad
- Competencias Tecnológicas
- Habilidades blandas en un entorno internacional
Lo anterior, asegurará que el Maestro o la Maestra en Ingeniería de la Calidad, comprenda no solo la calidad desde un punto de vista técnico y de gestión; sino también, para un contexto multicultural, en el que la Calidad será el lenguaje universal, así como la característica competitiva que los clientes buscarán en los productos y servicios.
El Maestro o la Maestra en Ingeniería de la Calidad, tendrá la capacidad de establecer conexiones entre los procesos y sus mediciones, para evaluar el grado de calidad que se genera en el sistema, así como establecerá propuestas para rediseñar el trabajo, de tal manera que se incremente la eficiencia y una mejor utilización de los recursos. Así mismo, tiene un amplio campo profesional, cuyo mercado laboral se sitúa en las áreas del mejoramiento de procesos, como consultores, tanto en los sectores público y privado de manufactura y servicios, en el país o en el extranjero, para desempeñar diferentes funciones y proyectarse a nivel directivo o ejecutivo para mejorar la competitividad de las organizaciones y generar cambios en los sistemas de trabajo y en la cultura organizacional.
En este contexto los posgrados contribuyen a la formación de profesionales que puedan enfrentar los crecientes retos de generación y aplicación de conocimientos y tecnologías. Las principales expectativas de contratación van orientadas a profesionales capacitados para planear, diseñar, implantar, controlar y perfeccionar sistemas integrados por maquinaria altamente especializada y factores humanos.