- Presentaron propuestas como carreteras solares e invernaderos hidropónicos
- Participaron 120 estudiantes de diversos bloques y EE
Equipo que presentó “Materiales compuestos”.
Karina de la Paz Reyes
Un total de 120 estudiantes de la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Veracruzana (UV) presentaron sus trabajos en la Feria de Proyectos, donde exhibieron lo aprendido en el aula en las diversas experiencias educativas como Temas Selectos de Física.
Este evento se desarrolló a iniciativa del académico Miguel Antonio Roldán, con el propósito de generar un “espíritu empresarial” en los estudiantes de la Facultad y “que se den cuenta de que hay posibilidades de desarrollar sus proyectos”.
Roldán precisó que participaron estudiantes del segundo al quinto bloque. Se trató de 70 estudiantes (organizados en 17 equipos) que concursaron en la categoría Ingeniería de Proyectos para la Industria Química; y 50 (en 13 equipos) que se postularon para la categoría de Ciencias e Ingeniería de los Materiales.
Equipo que presentó “Carreteras solares”.
La inauguración estuvo a cargo del director de la Facultad de Ciencias Químicas, Rafael Gómez Rodríguez; además de Guadalupe Huesca Sánchez y Álvaro Montano, de la Secretaría de Economía del Gobierno Federal. También participaron académicos, administrativos y estudiantes.
Rafael Gómez destacó que esta actividad tendrá impacto en la próxima acreditación del programa de Ingeniería Química. “Uno de los puntos más importantes que se evalúan es el resultado del aprendizaje, es decir, cómo llevan a la práctica lo que aprenden en las aulas”.
Agregó que este evento es muy importante por varias razones: “En primer lugar, al promover las habilidades productivas de nuestros alumnos se fomenta una mentalidad emprendedora, que ayudaría a la generación de empleos que el país necesita, y es una manera de resolver de raíz las causas de la pobreza y la inseguridad.”
Equipo que presentó “Un invernadero totalmente sustentable con las mejores cosechas”.
Añadió que esta feria también es importante porque, a diferencia de lo que a veces se cree, al exhibir los resultados de los trabajos se comprueba que los estudiantes tienen una enorme capacidad.
Algunos ejemplos
“Materiales compuestos” fue el tema que exhibieron las estudiantes Paloma Zurisadai Rodríguez Ruiz, María Teresa Martínez García, Karina Pitalu Ortiz Falfán y Sandra Villegas.
María Teresa explicó que su exhibición es parte de lo aprendido en la experiencia educativa (EE) Materiales, Ciencia e Ingeniería de los Materiales. “Un material compuesto se conforma con dos o más materiales para obtener una combinación de propiedades que no se puede lograr de otra manera. Se pueden seleccionar para alcanzar combinaciones no usuales de rigidez, peso, resistencia a la corrosión, dureza o conductividad. Se utilizan con frecuencia en construcción, en la industria aeronáutica, entre otros”, añadió.
Autoridades de la Facultad de Ingeniería Química, de la Secretaría de Economía y algunos estudiantes.
Otro de los equipos –integrados por Maximiliano Andrade Guerrero, Karla Carretero Armenta, Alejandra Olguín Morales, Kenia Stephanie Marín Hernández, José Ubaldo Chicuéllar Paz y Alexo Enrique Villegas Montero– planteó como propuesta “Carreteras solares”.
Se trata de aprovechar las superficies de vías de comunicación terrestre para la captación de energía solar y así producir energía en el país, explicó Maximiliano. Se trata de un método de captación de energía que se utiliza en países como Alemania y Estados Unidos; si bien aún no están dadas las condiciones en México, es una propuesta a largo plazo para dejar de depender del petróleo, abundó.
Una propuesta más fue “Un invernadero sustentable”, del equipo integrado por Yair Arturo Méndez Espinosa, Jiovanny Arellano de los Santos, Brenda Carolina Casillas Rodríguez, Lilia Itzel López Sánchez, Luis Ángel Luna Escobar y Patricia López Andonegui.
La propuesta consiste en aprovechar al máximo la energía del sol, cuyo resultado son alrededor de tres cosechas al año. El diseño se basa en un modelo hidropónico con forma de domo para aprovechar la mayor cantidad de rayos solares, con paredes de policarbonato que permite el paso de la luz y dirige dicha energía a los acumuladores respectivos.
