Del aprendizaje en investigación

Digamos que una de las responsabilidades que tienen las universidades, es la formación de capital humano. Es decir, la preparación de estudiantes para que el día de mañana se integren como profesionales al mercado laboral. En ese contexto, un estudiante además de adquirir habilidades y conocimientos relacionados con su disciplina, va forjando un acercamiento al campo de la investigación científica, en la medida que -curricularmente- la gran mayoría de las instituciones de educación superior, cuentan con un eje formativo relacionado con lo investigativo.Es así, que un estudiante universitario, puede vivir una experiencia educativa relacionada con la investigación, sea en lo curricular como en lo transversal.

De allí que sea pertinente que los profesores sepan y reconozcan el papel que como facilitadores tienen desde cada una de sus asignaturas, sin que necesariamente por sus contenidos, manejen asuntos relacionados con lo metodológico, pero sin duda sí en lo teórico disciplinario, por lo tanto saber que cuando encargan una actividad, favorecen la adquisición de alguna habilidad o un saber, pues -invariablemente- cae en un ejercicio de exploración, búsqueda o toma de decisiones, recursos propios de la investigación académica.

Cuando refiero lo transversal, es hacer de la investigación como experiencia formativa, donde  toda comunidad docente puede activarla para enriquecer su trabajo docente, pues se abre a la posibilidad de hacer del todo los días, una ocasión para favorecer la adquisición de habilidades prácticas como metacognitivas. Entrevistar a una persona, buscar información en línea, elaborar un ensayo, presentar una evidencia de lectura a partir del diseño de un resumen, un cuadro sinóptico, una tabla de contenido, un mapa mental, incluso un podcast, estaría promoviendo destrezas que llevan implícitos procesos mentales que enriquecen, alimentan o fortalecen sus conocimientos disciplinares, pero también su cualidades como sujeto de conocimiento. En el caso del estudiante, participar de experiencias de este tipo, considero le permiten ganar en confianza, habilitarse en el uso de recursos tecnológicos puestos al servicio de la adquisición de conocimientos disciplinarios.

El detalle estriba en hacer del oficio docente y la sensibilidad académica, una oportunidad para generar un espacio de formación, donde -poco a poco-, el estudiante vaya ganando en su alfabetización académica y en sus competencias investigativas básicas. En el entendido que, dependiendo de su perfil de egreso, será el lugar que ocupe disciplinariamente la formación en investigación. Es decir, antes de formar investigadores, forjamos profesionales, pero siempre que los estudiantes también sean sensibles al papel que puede jugar la metodología científica en su formación profesional, a la larga y como profesional en activo, terminarán de hacer diferencia entres sus pares profesionales.

Por otro lado, hoy que una licenciatura no garantiza el bienestar profesional, lo más probable es que aquellos afortunados que llegaron a la universidad, se le siembre también el gusanillo para seguir preparándose y apuesten por un posgrado. He ahí la posibilidad de recuperar sus conocimientos previos en materia investigativa, tanto aquellas que aprendieron en sus cursos de metodología, como esas habilidades promovidas por sus profesores de otras asignaturas, en aquellos días cuando tuvieron que desvelarse para poder cumplir con un trabajo escolar, reconociendo que si hubiesen sido más aplicados, disciplinarios, organizados, responsables, el estrés hubiera sido menor. Por cierto, la disciplina, la organización y la responsabilidad, son valores propios de la investigación que hay que objetivar desde nuestras clases.

Sirvan pues estas reflexiones para dialogar entre pares, pero también para proponer a los estudiantes que ahora nos leen, la siguiente actividad.

1. Participar de estos apuntes comentando en este blog, cuál ha sido su experiencia al respecto de su formación en investigación y qué pudiéramos hacer para su mejora, docentes y estudiantes.
2. Escuchar el podcast que aquí se liga (Los objetos de estudio en comunicación y su metodología) para realizar un ejercicio similar a lo escuchado, pero a partir de lo que se apunta en el mismo, para cada grupo según la experiencia educativa que cursen.
3. La producción deberá seguir la siguientes instrucciones para la realización: i) Descargar en su celular la aplicación Spreaker Studio, recurso que se empleará para la realización del podcast, tras las instrucciones que se darán en aula.
4. Una vez realizado el audio, deberá subirse individualmente a la plataforma EMINUS.
5. El trabajo es individual y no debe rebasar los 3 minutos de duración, ni ser menor a 2 minutos.
6. Las dudas a que haya lugar, serán atendidas oportunamente en aula.