Si en la entrega anterior reflexionábamos sobre la mitología y los mitos, en esta entrega queremos centrarnos -particularmente- en el vínculo que hay entre el mito y las leyendas, en el entendido que unos y otros apelan al lenguaje y sus distintas formas del habla para acuñar relatos que contribuyen -significativamente-, a sentar las bases religiosas o profanas en casi todas las culturas del hombre.
Tal como se viera en aquella entrega, el mito es un recurso que facilita la constitución de narraciones primordiales relacionadas con el principio de los tiempos y el advenimiento del ser humano como figura ontogénica desde quien se define la matriz original de todo pueblo, cultura o sociedad. Si en el caso de los mitos la presencia de seres sobrenaturales es un elemento fundante (ya que desde la decisión o intervención de dioses o monstruos se da pie a la creación de los mundos), en el caso de las leyendas tenemos que son los hijos de los dioses los responsable de encontrar en los héroes o figuras fantásticas, los recursos aleccionadores y explicativos para entender buena parte de los fenómenos o eventos que han caracterizado la historia de la humanidad desde sus ancestros.
El Diccionario de Antropología cuyo editor es Thomas Barfield (2000), al hablarse del mito señala que el mito como relato ha evolucionado desde sus formas originales, pero desde siempre ha venido acompañado de una aceptación que los reconoce como «fácticamente ciertos», por lo tanto con una «profunda influencia en la forma en que la cultura estructuraba e interpretaba el entorno experiencial (359). Y si bien fue la oralidad el dispositivo del que se valió para su difusión, desarrollo y continuidad, habría de venir la escritura para que estos relatos trascendieran, destacando del texto su condición de recurso para contribuir a recordar sus historias ya conocidas, pero ahora codificadas para vivir una experiencia de contemplación personal y silenciosa, sin dejar de reconocer el aporte que representó para su lectura en contexto públicos.
Potter y Robinson en su libro Mitos y leyendas del mundo (2019), un texto pensado y escrito para jóvenes que compendia una serie de narraciones que dan cuenta de algunos de los mitos más importantes en las principales culturas del mundo, señalan que los mitos y leyendas eran narraciones de historias antiguas que se hacían y contaban para explicar las cosas que, por entonces, la gente no podía explicar más que acudiendo a ese tipo de narraciones. Así, cuando los griegos, por ejemplo, no podían explicarse algún fenómeno, inventaban una historia. En la difusión de las mismas, jugaban un papel importante aquellos que iban de pueblo en pueblo narrando a la gente que, en las plazas o lugares públicos, los escuchaban.
Por otro lado, en el diccionario de Mitos clásicos (García Esperón, González Ovies & Mijangos, 2017), apuntan que desde la Antigua Grecia nos han llegado parte de los mitos más famosos, sin embargo, este tipo de narraciones tienen un vinculo cultural con la influencia que llegaron a tener los egipcios y fenicios sobre los griegos; pero serían los creadores de Zeus, Poseidón, Hades, Hermes, Atenea, Artemisa, entre otros dioses y diosas, quienes llegaron a profesar una firme creencia en sus epopeyas, en las hazañas de sus dioses y héroes. En su análisis sobre estos mitos, dividen su historia en tres etapas: la edad de los dioses en el que se explica la forma en que el mundo fue creado, la de los dioses y los hombres, donde desde el Olimpo descienden para convivir, poner a prueba, ayudar o castigar a los hombres (incluida la procreación) y la de los héroes.
Son estos últimos personajes, quienes comienzan a tener importancia una vez que los griegos dejan de creer en los dioses debido -en buena medida- a las nuevas formas de explicación racional que para entonces alcanzan y con ello un sentido distinto a su cultura, su vida cotidiana, su vinculo con el mundo; por lo que hacen de los héroes sus motivos narrativos y con ello, la creación de las leyendas. A partir de aquí, este tipo de relatos contribuyen a dar identidad a los pueblos, al narrar hechos históricos con cierta dosis de fantasía que suelen recrear eventos que pudieron haber sido reales pero la imaginación ha abonado para darles un toque mágico, alegórico, fantástico.
Por otra parte, es con las leyendas cuando los pueblos aborígenes o aquellas culturas que han desaparecido o transformado en sus bases originales, que encuentran el recursos para preservar sus antecedentes históricos, sus personajes, y con ello apuntalar una identidad cultural que les ha permitido acuñar en el imaginario colectivo de sus pueblos como del mundo entero, una referencia que puede llegar a estar en la matriz originaria del un proyecto cultural o de nación. Oportuno resulta mencionar que estas características de los mitos y leyendas, se repite en muchas otras culturas.
Por ejemplo para occidente la referencia a mitos nórdicos, también es importante; historias que tienen como paisaje la frialdad y las largas noches de invierno, con sus interminables días veraniegos, dice Neil Gaiman; pero que tenían una característica especial: son «mitos de un pueblo que no confiaba del todo en sus dioses y ni siquiera los apreciaba demasiado, pero aun así los respetaba y temía» (2019, p. 12). Odín, Thor y Loki, para las nuevas generaciones no resultan extraños o desconocidos. Así también puede decirse para el caso de América, pues países como México, Perú, Argentina, Brasil, Paraguay, tienen una importante tradición mítica en el continente.
Con todo lo anterior tenemos que entre la mitología, el mito y las leyendas hay un punto de coincidencia: son relatos, historias que abordan el origen de una cultural, que hayan en tales narraciones aquellos hechos que permiten hacer comprensible narraciones, acontecimientos, eventos, actos epopéyicos que están en el inicio y corazón de sus historias.
Así, bien vale la pena preguntarte ¿Acaso aquellas fórmulas discursivas y representacionales siguen teniendo vigencia como para dimensionar algunos acontecimientos presentes y sus personajes?, ¿Puede haber actos de fe que generen condiciones para llegar a depositar nuestras creencias en aquellos acontecimientos o eventos que se escapan a la razón y dan viabilidad a mitos renovados?, ¿Es posible hablar de la configuración de nuevos héroes que vienen contribuyendo a mediar en nuestra relación con el mundo contemporáneo?
Fuentes de referencia
Barthes, T. (2000). Diccionario de Antropología. Siglo XXI.
Gaiman, N. (2019). Mitos nórdicos. Las hazañas de hor y las intrigas de los dioses noveladas por un maestro en contar historias (4a, reimpresión ed. ed.). Ancora y Delfín.
García Esperón, M., González Ovies, A., & Mijangos, A. (2017). Diccionario de mitos clásicos. El Naranjo.
García Esperón, M., & Mijangos, A. (2018). Diccionario de mitos de América. El Naranjo.
Robinson, P. (2019). Mitos y leyendas del mundo (10a. reimpresión ed.). Grupo Editorial Patria.
Comentarios
No dice la cultura que busco
No hablar: ha seguir buscando. Hay mucha información, aunque desconozco qué cultura buscabas
Alguien quiere ser mi novio soy (mujer) me llamo Rubí 😊😊🥰🥰😙
Ah caray, de dónde es para ver si hay algún candidato
es es en roblox talve y te sale un shugar dady
Me gusta la historia 🥰🥰🥰
Que bueno, siempre es importante saberla
Ocupo mitos 😾
gracias el fbi va por ustdes :)
gracias
MUY LARGO PERO MUY BUENO EL ESCRITO…
Siiiiii
Gracias
U
Gracias por el comentario
RELARGO
Si pero ami nadamas era la fuente relativa que iva a copiar para una tarea
No mame don re largo
Feos locos
Gracias
pos aca no dice ni un solo hp malaprido mito
Eso es toda la historia yo solo necesito mitos dice que también mitos pero no hay mitos pendej0s 🤬🤬
De verdad y ya lo copie es que no lo lei
eso es demasiado yo quiero un mito de la humanidad🧐👌
Sugiero lea las 8 entregas y luego concluya
Saludos
Yo también
Yo también
Eso no lo nesesita nesecito MITOS
No eso está muy largo
🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬🤬
Bobos
Si son
noseeeeeee esta re largo mk
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