Comunicación, mitos y creencias en un contexto pandémico

Si algo ha quedado mostrado en el contexto de la pandemia provocada por el Covid-19, además de la vulnerabilidad de los sistemas de salud, como de grupos y sectores sociales históricamente arrinconados por el sistema neoliberal, es también la endeble condición desde la cual buena parte de la comunidad académica (profesores y estudiantes) ha enfrentado la contingencia. Es decir, han quedado develadas una serie de variables sobre las cuales es necesario aprender y seguir reflexionando.

Pero en ese contexto, es de llamar la atención la actitud, el comportamiento de una sociedad que del temor ante el nuevo coronavirus pasó a la desconfianza provocada por una infodemia que ha saturado de contenidos el imaginario y la representación de una parte de la sociedad, tanto nacional como internacional. Si en algún momento se ha hablado de la importancia de una educación en medios y en torno a una cultura digital, parece ser que el actual contexto ha confirmado la ausencia de una alfabetización mediática que favorezca la difusión, la producción y la apropiación crítica, reflexiva de lo que circula a través de los medios convencionales como de los emergentes.

Llegados aquí, no deja de sorprender la constitución de ciertos grupos humanos, que han hecho de la desinformación y narrativas pendencieras, un móvil para sacudir la confianza de una sociedad que, como nunca antes informada en su historia -en el papel-, se encuentra informada; lo que supondría un manejo de contenidos con un potencial conocimiento para dimensionar, comprender o explicar buena parte de los males que nos aquejan. Y ahí, la comunicación ha estado presente junto a sus medios.

Lo cierto es que en la llamada sociedad red, de la información y del conocimiento se nos ha dicho, la condición de prosumidor del que nos podemos preciar quienes además de consumir información, la producimos y la ponemos a circular, ha dado la oportunidad a la emergencia de narrativas que están contribuyendo a la definición de paisajes donde la imagen se apuntala desde diversos y diferentes relatos.

Se dice esto, por ejemplo, por la forma en que hay quienes han hecho su bandera el reclamo a sus libertades personales, para no respetar los protocolos de prevención que se han implementado en diversos países. Al tenor de esto, es de llamar la atención la forma en que ciertas personalidades del espectáculo, del arte, de la política, sobre todo, se han sumado a teorías conspiracionales a propósito de lo que está detrás -según ellos- de la pandemia y las farmacéuticas que han producido las vacunas; lo que no deja de sorprender, pues muchos de sus seguidores de la sorpresa han pasado a suscribir este tipo de interpelaciones, de narrativas.

Aquí la comunicación en sus distintos tipos, ha sido dispositivo privilegiado al hacer de plataformas como YouTube, redes sociales como Facebook, Instagram, TikTok, servicios de mensajería con WhatsApp; incluso blog y páginas electrónicas de asociaciones o personales, los medios y canales a través de los cuales promover llamados a la protesta civil en contra de disposiciones de prevención con es el uso de cubrebocas, la sana distancia, el confinamiento, frente a lo que consideran una estratagema de los poderosos, del imperio hegemónico y en especial de las farmacéuticas.

Si a constitución de mitos va de la mano del lenguaje y sus formas de representación, es necesario reconocer que hoy día la comunicación, sus medios y canales; sus formas discursivas y de representación, han venido favoreciendo la circulación de narrativas que han hecho del mito y las creencias, la confirmación de la búsqueda de explicaciones más allá de la razón, tan similar a aquel estadio del que Augusto Comte nos hablara hacia finales del siglo XIX, en su etapa teológica, cuando el ser humano depositaba en una entidad metafísica, celestial o paranormal la explicación de ciertos fenómenos o eventos.

Habría que buscar en el presente, de qué se valen estas narrativas como para incidir en el imaginario, la representación y el actuar en algunos grupos humanos, que han visibilizado asideros cercanos al mito que devienen en la emergencia de ciertas creencias que necesitan de una explicación como para comprender el papel que están jugando en el terreno de lo epistemológico, en alguna de sus formas para entender, representar y vincularse con el mundo.

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