- Abrir puertas y ventanas exteriores para garantizar una ventilación adecuada e iluminación natural de las áreas, procurar que no haya obstrucción ni apilamiento de materiales y equipo en las ventanas.
- En caso de usar ventiladores, se debe procurar que el aire interior sea expulsado hacia el exterior y que éste no sea direccionado hacia las personas.
- Si existe aire acondicionado mantener el clima con una gradación entre 24° y 26° C. De ser posible, evitar su empleo y tratar de ventilar de forma natural el espacio por unos minutos cada hora.