- Nicte-Há Ximena García Güizado cursa la Especialización en Promoción de la Lectura del Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación de la Universidad Veracruzana
- A través del círculo de lectura y escritura creativa “Una voz para habitarnos”, integró una cartografía lectora de mujeres autoras vinculada con los intereses y prácticas de las asistentes
Texto y fotos: Carlos Hugo Hermida Rosales
16/02/2023, Xalapa, Ver.- Nicte-Há Ximena García Güizado, quien cursa la Especialización en Promoción de la Lectura de la Universidad Veracruzana (UV), realizó un proyecto de mediación de lectura literaria y escritura creativa con perspectiva de género feminista, por medio de un círculo-taller dirigido a mujeres estudiantes de las licenciaturas en Educación Primaria y Preescolar de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”.
La alumna de este posgrado, adscrito al Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación (CECC), compartió que en esta iniciativa participaron 10 jóvenes cuyas edades van de los 18 a los 23 años.
A través del círculo de lectura y escritura creativa “Una voz para habitarnos”, que se realizó en 13 sesiones presenciales, abarcando de noviembre de 2022 a enero de 2023, Nicte-Há García integró una cartografía lectora de mujeres autoras vinculado con los intereses y prácticas de las asistentes.
Ello con la finalidad de favorecer la formación de lectoras autónomas en la educación normalista, con el uso de estrategias didácticas participativas y vivenciales que prioricen las experiencias de las mujeres, con lo que se contribuya a la capacitación de las futuras mediadoras de lectura y redacción.
En “Una voz para habitarnos” se realizaron ejercicios de respiración consciente, prácticas de lectura en voz alta, registro de escritura creativa mediante una bitácora, consultas de recursos digitales y análisis críticos de literatura, entre otras acciones.
Las actividades finalizaron con entrevistas individuales semiestructuradas que se aplicaron a cada una de las participantes, y un conversatorio de cierre en el que se compartieron inquietudes y experiencias.
Nicte-Há García mencionó que esta iniciativa demostró que el proceso de escritura colectiva motiva la redacción propia, mientras que el de lectura grupal crea espacios y vínculos de confianza.
“El círculo permitió a las integrantes reflexionar sobre lo que implica ser lectora, escritora o mediadora”, afirmó.