Aracely Hernández, Shuguey Enríquez y Blanca González
21/09/2020, Veracruz, Ver.- Directivos del Instituto de Investigaciones Médicas Biológicas (IIMB), Instituto de Ingeniería e Instituto de Medicina Forense de investigación de la Universidad Veracruzana (UV), región Veracruz, rindieron sus Informes de Actividades del periodo 2019-2020, el martes 15 de septiembre.
Estuvieron presentes Alfonso Gerardo Pérez Morales, vicerrector de la región Veracruz; Ángel Rafael Trigos Landa, director general de Investigaciones; Ulises Gonzalo Aguirre Orozco y Juan Pablo Munguía Tiburcio, secretarios regionales Académico, y de Administración y Finanzas, respectivamente; Enrique Morales González, coordinador regional de Posgrados, y Juan Manuel Fragoso Montalvo, secretario regional del Sindicato del Personal Académico (Fesapauv).
Instituto de Investigaciones Médico Biológicas
José María Remes Troche, en la presentación de su II Informe, dio a conocer que el IIMB fue una de las intuiciones de la región que no detuvo actividades por la Covid-19.
Señaló que uno de los componentes más importantes de esta institución, sin dejar a un lado la docencia y la investigación, es el centro de atención al cáncer, una actividad esencial que continuó brindando atención a los pacientes oncológicos a pesar de la pandemia.
De esta forma y gracias a la gestión de la Vicerrectoría, recibieron todo el apoyo para que el personal mantuviera las medidas de seguridad sanitaria.
A este respecto, Remes Troche recordó la partida de Raúl Deveze Bocardi, a quien definió como un pionero y estandarte del Centro de Atención al Cáncer y quien falleciera cumpliendo su labor.
En este sentido y a manera de homenaje, el titular del IIMB pidió a la Junta Académica y autoridades universitarias presentes un minuto de silencio.
El investigador también resaltó que este año se cumplió con un objetivo importante para el IIMB, que fue la consolidación del cuerpo académico (CA) Investigación y Servicio.
Otro punto relevante que mencionó fue la generación de conocimiento científico durante este periodo, con la de 22 trabajos de investigación en revistas indizadas nacionales e internacionales.
Sobresale la campaña de detección oportuna de hígado graso para los trabajadores de la región, que se hizo en colaboración con el Centro de Estudios y Servicios en Salud (CESS) y la Asociación Mexicana de Gastroenterología, beneficiando a casi 500 personas.
También, al inicio de la pandemia, se crearon cápsulas informativas en colaboración con la Facultad de Medicina y la Vicerrectoría, con el objetivo de educar a la población sobre Covid-19.
Finalmente, un reto importante para esta dependencia fue conseguir la prueba de detección de SARS-CoV–2, una labor titánica que se hizo en conjunto con la Vicerrectoría y el CESS. Hasta el momento se han realizado cerca de 300 pruebas.
Con relación al Centro de Atención al Cáncer, resaltó que se logró tener las autorizaciones de las instituciones de respaldo y vigilancia tanto de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) como de la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias.
También comentó que aun en medio de la pandemia, se brindó atención de radioterapia a más de 150 pacientes, que comparado con el año pasado representó un incremento del 65 por ciento.
En el tema de internacionalización e interculturalidad, los investigadores del IIMB han participado en múltiples proyectos que se ha presentado en otros países, lo que ha dado difusión y visibilidad a la UV.
Instituto de Ingeniería
En su III Informe, Estela Montes Carmona, directora del Instituto de Ingeniería, aseguró que dentro del eje de liderazgo académico del plan rectoral de la UV han cumplido con los estándares de calidad, pertinencia, equidad y ética.
Ejemplo de ello es el programa educativo de la Maestría en Ingeniería de Corrosión, que se encuentra en el padrón del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), que gracias al núcleo académico básico integrado por investigadores lo han mantenido como uno de los más relevantes en el país.
La planta académica está integrada por 27 docentes, más de la mitad de ellos con doctorado, asegurando con esto una educación de calidad.
Dijo que se cuenta con dos CA consolidados: Corrosión, y Electroquímica, Materiales y Medio Ambiente, esto ha permitido que se establezcan relaciones con algunas de las facultades de ingeniería y vínculos internacionales, con la participación de investigadores de España y Portugal que han impartido cursos como “Ciencia y tecnología para el estudio y conservación de materiales metálicos de interés histórico”.
Con relación al desarrollo e investigación, la académica señaló que en el presente periodo se han producido 25 artículos y un capítulo de libro. También han tenido participación en diferentes espacios interdisciplinarios.
Además, los investigadores José Luis Ramírez y Gonzalo Galicia –integrantes del CA Electroquímica, Materiales y Medio Ambiente– obtuvieron la patente por el “Dispositivo portátil para medir la corrosión”.
En proceso están dos patentes más, una de ellas denominada “Dispositivo de separación de gas en flujo multifase de hidrocarburos”, que se hizo en colaboración con la empresa Geolis, S.A de C.V., y el CA Dinámica de Sistemas.
La otra es “Método y procesador para la maximización y eficiencia de bomba jet en sistemas hidráulicos en levantamiento artificial”, del CA Sistemas Dinámicos y Autónomos.
Instituto de Medicina Forense
Guadalupe Melo Santiesteban presentó su Informe de Actividades y entre los logros destacó el rubro de investigación con la publicación de cuatro artículos indizados y tres más de difusión, para próximamente publicar en el libro Técnicas actuales de neurocirugía.
En docencia, dijo que se generó la vinculación con la Asociación de Técnicos Embalsamadores de la República Mexicana y un nuevo convenio con los histotecnólogos a nivel nacional.
También mencionó el programa educativo de la Maestría en Medicina Forense, que ha permitido que los alumnos participen en estancias universitarias y profesionales, como en la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Murcia.
En este sentido, también se han tenido intercambios estudiantiles, como es el caso de una alumna de Bolivia, así como una estancia en el Instituto de Ciencias Forenses de Perú de una alumna que cursa la Maestría en Medicina Forense.
Mencionó que se consiguió que los alumnos del Técnico Superior Universitario (TSU) Histotecnólogo y Embalsamador realicen su servicio social en los laboratorios de patología del sector salud público, como en los hospitales del IMSS e ISSSTE, así como en el sector privado con en el Hospital Ángeles.
La actividad editorial es otra de las áreas que muestra mayor productividad con la Revista Mexicana en Medicina Forense, que este año logró consolidarse y permite la publicación de tres números por periodo cuatrimestral con gran difusión en Latinoamérica.
Respecto a la infraestructura, dijo que se lograron muchos avances gracias al apoyo de las autoridades universitarias, entre ellos la remodelación total de la sala de autopsia de quirófanos de neurocirugía, así como del horno crematorio que ya tiene la chimenea que requería el sistema de salud para la legalización de no contaminación y de emisión de gases; las aulas y laboratorios de patología, biología molecular y de toxicología fueron remodeladas.
El Vicerrector, el Director General de Investigaciones y Pedro Gutiérrez Aguilar, director general del Área Académica de Ciencias de la Salud, coincidieron en las felicitaciones por los logros obtenidos, así como la proyección que el instituto ha tenido por la labor de los académicos e investigadores y de todo el equipo.
Asimismo, destacaron el gran avance que ha tenido la entidad universitaria, sobresaliendo sus programas académicos como únicos en el estado, por ello también reconocieron a los investigadores que tienen el perfil del Programa para el Desarrollo Profesional Docente (Prodep) y que están adscritos al Sistema Nacional de Investigadores (SNI).