• El investigador ha dedicado las últimas cuatro décadas a estudiar la observación y el registro de los movimientos de los astros que realizaron los habitantes de Mesoamérica 
• Sus trabajos se centran en la iconografía y los horizontes calendáricos de Xochicalco, Morelos y Teotihuacán

Rubén Bernardo Morante López

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Fotos: Omar Portilla Palacios 

18/06/2024, Xalapa, Ver.- El Centro de Estudios, Creación y Documentación de las Artes (CECDA) de la Universidad Veracruzana (UV) rindió un homenaje al antropólogo Rubén Bernardo Morante López, en un evento que incluyó dos mesas de diálogo y la proyección del video “Tesoros del pasado”, donde se aborda la trayectoria del docente. 

En el evento estuvieron Ahtziri Molina Roldán, coordinadora del CECDA, así como catedráticos y alumnos de esta entidad académica.  

El investigador homenajeado ha dedicado las últimas cuatro décadas a estudiar el registro y observación que de los movimientos de los astros realizaron los habitantes de Mesoamérica.  

El antropólogo ha publicado en una gran cantidad de libros y revistas

Sus trabajos se centran en la iconografía y los horizontes calendáricos de Xochicalco, Morelos y Teotihuacán, colaborando en más de 20 proyectos museográficos nacionales e internacionales. 

Gracias a su empeño, ha sido ampliamente galardonado: con la Medalla “Alfonso Caso” en 1998, además de los Premios “Miguel Covarrubias” en 2002 y 2013, y “Alfonso Villa Rojas” en 2018. 

Rubén Morante comentó que, aunque siempre deseó estudiar arqueología, primero se formó en administración, porque la disciplina le ofrecía sobradas oportunidades laborales y le permitía crear patrimonio.  

Al paso de los años su verdadera vocación lo llamó y comenzó a trabajar en Teotihuacán, para lo cual contó con el apoyo incondicional de su familia. 

Al homenaje asistieron investigadores y estudiantes del CECDA

“Me trasladaba desde Orizaba en tren, pues era el transporte más económico, y ahorraba de todas las maneras posibles; hoy en día la arqueología me permite vivir bien”, mencionó. 

El investigador compartió que la labor de un arqueólogo requiere de tesón, compromiso y responsabilidad, pues es quien descubre acciones relevantes realizadas por nuestros antepasados para analizarlas y, posteriormente, darlas a conocer a la sociedad. 

Enfatizó en la importancia de retribuir a las comunidades en las que se realizan los proyectos arqueológicos, ante lo cual la divulgación de la información y el reconocimiento a sus habitantes es una buena forma de hacerlo. 

“Agradezco mucho el homenaje organizado por mis colegas y alumnos, pero la vida misma, a lo largo de mi trayectoria profesional, me da dado la mayor gratificación”, aseguró.