• Invernaderos climatizados y modernas técnicas de cultivo, susceptibles de aplicarse aquí 

• Importante mejorar infraestructura en producción agrícola, indicó Rafael Garrido Hernández 

Una hectárea climatizada y totalmente cubierta de cristal

Jorge Vázquez Pacheco 

Fotos: Luis Fernando Fernández y cortesía Rafael Garrido Hernández 

17/09/2024, Xalapa, Ver.- Es importante promover e incentivar el empleo de controles biológicos en lugar de los agroquímicos, comentó Rafael Garrido Hernández, egresado de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad Veracruzana (UV) y quien recién cumplió una estancia profesional en Dinamarca. 

A partir de una conferencia ofrecida en su Facultad, en la cual se ofertó esa posibilidad, el universitario permaneció en ese país desde el 27 de diciembre de 2022 hasta el 30 de junio de este año. Su trabajo se centró en una empresa productora de flores, donde aprendió sobre maquinaria agrícola, control de calidad y exportación. Se le dotó, además, de una remuneración suficiente para cubrir sus gastos personales. 

“Esa empresa cuenta con un invernadero enorme, todo de cristal y dotado de calefacción”, mencionó en entrevista. “De hecho, es un negocio familiar y allí nos albergaron a cuatro estudiantes, dos mexicanos y dos africanos”. 

Para Garrido Hernández, el control de orden biológico ha sido lo más destacable: “En aquellos países la legislación es muy estricta y está prohibido el uso de pesticidas, pero en México mucha gente no quiere saber de ello. Es algo que apenas comienza a implementarse aquí”. 

Explicó que el control biológico consiste en la introducción de depredadores naturales contra los insectos que afectan los cultivos. “Un insecto benéfico que devora a los dañinos; así de simple”.

La depredación natural, técnica eficiente para el control de plagas

A raíz de aquella experiencia profesional, dijo que en México debemos mejorar la totalidad de la infraestructura en cuanto a invernaderos: “En Dinamarca no vi uno solo de plástico y en Veracruz no he visto uno de cristal, además era enorme, una hectárea de extensión con clima para control de temperatura, lo que permite a las plantas alcanzar buena talla y mejor calidad”. 

El egresado de la UV comentó que sus huéspedes están muy acostumbrados a su forma de trabajar, su sistema les ha funcionado perfectamente, “aceptaban algunas observaciones, pero sólo como algo complementario”. 

Con los conocimientos adquiridos en Dinamarca planea instalar un negocio sobre cultivos totalmente orgánicos, “utilizaré este tipo de controles biológicos, además de implementar un invernadero”. 

Por último, agradeció el respaldo de la UV, a través de su Dirección de General de Relaciones Internacionales, así como a los académicos Daniel Romero y Jacob Bañuelos, de quienes recibió valiosa orientación. 

“En la UV se hace lo posible porque los alumnos tengamos vinculación con formas de trabajo que habrán de sernos útiles en la actividad profesional.”