• A través de un curso Profa reflexiona sobre una sindemia, integrada por tres epidemias: obesidad, desnutrición y cambio climático

Más que recursos económicos, comer sano requiere una buena planeación y organización

Karina de la Paz Reyes Díaz

Fotos: SAISUV (1 y 3), Omar Portilla Palacios (2)

17/06/2022, Xalapa, Ver.- El consumo de alimentos tiene efectos negativos en el cambio climático y, en ese sentido, el Sistema de Atención Integral a la Salud de la Universidad Veracruzana (SAISUV) busca sensibilizar a su comunidad académica.

Cuando se habla de cambio climático generalmente se piensa en el uso de combustibles fósiles, pero el asunto va más allá, un ejemplo es la “insostenible” producción de carne que vive el planeta, dados los gases de efecto invernadero que generan los rumiantes.

También está la agroindustria que, por ejemplo, pone de “moda” comer aguacate y para abastecer tal demanda ha sido necesario talar bosques en Michoacán, ecosistemas que cada año dan alojamiento a la mariposa monarca, cuyo servicio de polinización es inestimable.

Pero no es necesario comer tanta carne y en el caso del aguacate son muchas las variedades regionales. Es en ese tenor que reflexionan en el curso-taller del Programa de Formación Académica (Profa) “Alimentación sostenible para la salud colectiva”, explicó Yahel Teresa Vichi Martínez, especialista en educación para la salud e integrante del SAISUV.

“Lo que tratamos de hacer es que a través de conocimiento científico, los participantes puedan aprender qué es una alimentación saludable”, apuntó.

En torno a la dieta hay muchos mitos y la prioridad es la pérdida de peso, pero en este curso del Profa no fomentan eso, sino la adopción de un estilo de vida saludable, es decir, que permita salud y bienestar.

Incluso, fomentan la llamada “dieta de la milpa” y buscan desmitificar que comer alimentos elaborados a base de masa de maíz –tortillas y tamales– ineludiblemente implica aumento de peso.

Yahel Teresa Vichi, especialista en Educación para la Salud del SAISUV

Reaprendiendo a alimentarse
Recordó que en 2019 el SAISUV inició el curso-taller “Alimentación como estilo de vida saludable”, dirigido a personal académico. En esa primera edición participaron 230 trabajadores y en 2020 fueron 257, de todas las regiones universitarias.

A partir de abril de 2020 el programa educativo, ahora nombrado “Alimentación saludable”, se ofertó en modalidad virtual, adaptándolo a las condiciones suscitadas por la pandemia.

En términos generales, desde su creación como “Alimentación como estilo de vida saludable” se han habilitado 23 grupos con un total de 487 académicas y académicos.

No obstante, dada la importancia de promover la alimentación saludable en toda la comunidad trabajadora de la UV, en el periodo julio 2020-diciembre 2021 crearon el curso-taller “Reaprendiendo a alimentarse”, que se impartió a 24 grupos, con un total de 418 personas de diversas dependencias, también de las cinco regiones universitarias.

En octubre de 2021 realizaron la más reciente actualización de esta propuesta académica. En ella consideraron la transición alimentaria y nutricional del país, cuya característica es un elevado consumo de productos ultraprocesados y el abandono de las dietas tradicionales, lo que ha contribuido a la presencia de una sindemia, integrada por tres epidemias: obesidad, desnutrición y cambio climático.

Así surgió el curso “Alimentación sostenible para la salud colectiva”, cuyo propósito es desarrollar –mediante sesiones remotas– conocimientos, habilidades y estrategias que permitan proponer e implementar hábitos dietéticos saludables, considerando el efecto que tiene el consumo de alimentos en el medio ambiente.

A la fecha se han realizado dos ediciones del curso, en las que participaron académicos, igualmente de todas las regiones.

Además, el lunes 13 de junio inició uno más, en modalidad intensiva –10 sesiones de dos horas cada una–, dirigido a la Facultad de Ciencias Químicas, región Veracruz. “La virtualidad ha permitido alcanzar a toda las regiones”, destacó la entrevistada.

Si alguna entidad académica está interesada en que les impartan este curso, puede solicitarlo al correo saludpublicasais@uv.mx

Los ultraprocesados y el medio ambiente
Una invitación que se hace en este curso es retomar los patrones alimentarios característicos de las regiones en las que se habita, porque si bien hablan de la “dieta de la milpa”, una es la del norte y otra la del sur de la entidad –así es en el país, en general–, comentó Yahel Teresa Vichi.

“No es necesario adoptar patrones dietéticos de otros continentes”, remarcó. Además, en el curso reflexionan sobre el consumo de los alimentos ultraprocesados y los efectos que tienen no sólo en el organismo, cuando se consumen, sino en el medio ambiente, cuando se producen.

“Hay muchas infografías que dicen que para producir un litro de refresco se requieren hasta 400 litros de agua. Estamos en una crisis de agua, entonces ¿qué huella hídrica puede tener mi dieta?”

Son varios los mitos que buscan desvanecer con este curso, otro de ellos es que comer saludable no significa consumir los llamados alimentos orgánicos.

“Nosotros no fomentamos el consumo de alimentos orgánicos como tal, porque sabemos que es parte de una élite y que no todas las personas pueden tener acceso, por el costo que tienen. Si los pueden adquirir, adelante; pero si no, basta con consumir local, alimentos naturales. Incluso les invitamos a que no compren ‘la fruta perfecta’ ya que la naturaleza es diversa. Invitamos también a que no desperdicien alimentos.”

Comer sano, dejó en claro, más que recursos económicos requiere una buena planeación y organización, y de ello también trabajan en el curso.

Si alguna entidad académica está interesada en que les impartan “Alimentación sostenible para la salud colectiva”, puede solicitarlo al correo saludpublicasais@uv.mx.