• “La adolescencia es una de las etapas de cambio más importante”: Christian Julia Maraboto Croda, egresada de posgrado en la UV 
• Hace llamado a evitar consumo de bebidas azucaradas por las complicaciones a la salud que genera 

Christian Julia Maraboto Croda aseguró que la crianza parental determina estilos de vida saludable

José Luis Couttolenc Soto 

Fotos: Luis Fernando Fernández y cortesía Christian Maraboto 

15/01/2024, Xalapa, Ver.- La adolescencia es una de las etapas de cambio más importante en la vida del ser humano, y allí cobra importancia la crianza parental que puede ser factor determinante para adoptar estilos de vida saludable o hábitos de alimentación, y evitar el consumo de bebidas azucaradas. 

A la anterior conclusión llegó Christian Julia Maraboto Croda, resultado de su investigación “Prácticas de crianza parental, estilos de vida y consumo de bebidas azucaradas en adolescentes”, con la que obtuvo la Maestría en Biología Integrativa, tras defender su tesis en examen de grado en el auditorio de la Dirección General de Investigaciones. 

Para su investigación y con la dirección de María del Socorro Herrera Meza, la estudiante de posgrado realizó un estudio cuantitativo de tipo transversal, descriptivo y analítico, en una muestra de 442 adolescentes de entre 11 y 16 años de edad (alumnas y alumnos de tres secundarias técnicas de Xalapa). 

Con consentimiento informado de los padres y el asentimiento informado de los adolescentes, Maraboto Croda aplicó como instrumentos la escala de crianza parental, escala de estilos de vida y el cuestionario BEVQ-15.

Con la defensa de su tesis “Prácticas de crianza parental, estilos de vida y consumo de bebidas azucaradas en adolescentes”, la universitaria obtuvo la Maestría en Biología Integrativa

Encontró que la preferencia de cierto tipo de bebidas como tés comerciales azucarados, té verde, yogurt para beber, frappé de café y algunas bebidas alcohólicas, está diferenciada entre hombres y mujeres; los resultados sugieren que el control y apoyo de los padres correlacionan positivamente con algunos estilos de vida, dado que el consumo de mililitros, kilocalorías e hidratos de carbono de las bebidas azucaradas detonan padecimientos.

Tales hallazgos, apuntó la universitaria, permiten afirmar que las prácticas positivas de la crianza parental de los adolescentes se relacionan con estilos de vida más saludables y menor consumo de bebidas azucaradas. 

Julia Maroboto refirió que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2018, el consumo de los grupos de alimentos no recomendables fue elevado entre las y los adolescentes; las bebidas no lácteas endulzadas fueron las más consumidas con el 87%: el cual fue mayor en hombres (89.8%) en comparación con mujeres (84.7%). 

Detalló que el consumo en exceso de bebidas azucaradas a largo plazo puede desarrollar enfermedades cardiovasculares como hipertensión, sobrepeso y obesidad, entre muchas otras. 

La alumna de posgrado realizó un estudio cuantitativo de tipo transversal, descriptivo y analítico, en alumnas y alumnos de tres secundarias técnicas de Xalapa

Se estima que en México anualmente el 7%  están relacionadas con el consumo de bebidas azucaradas; para 2030 1 de cada 2 niñas y niños desarrollarán diabetes; Chiapas es el estado con mayor consumo de bebidas con azúcar (los niños se desayunan con este tipo de bebidas) y Veracruz está entre las primeras entidades con mayor índice de sobrepeso y obesidad, principal factor para desarrollar diabetes. 

En la investigación, fue importante también la asesoría que le brindaron Yolanda Campos Uscanga, adscrita al Instituto de Salud Pública, y Tania Romo González de la Parra, del Instituto de Investigaciones Biológicas.