- Algunos productos naturales pueden originar efectos tóxicos a largo plazo
- La administración oral del extracto de la planta durante 35 días en modelos murino arrojó efectos positivos
José Luis Couttolenc Soto
Fotos: Omar Portilla Palacios, Eduardo Rivadeneyra e Isaac Zamora
29/10/2023, Xalapa, Ver.- Los investigadores de la Universidad Veracruzana (UV), Eduardo Rivadeneyra Domínguez e Isaac Zamora Bello, realizaron un estudio para conocer si el extracto de la planta centella asiática puede servir como alternativa para mejorar las convulsiones en pacientes epilépticos, obteniendo resultados favorables.
La centella asiática es una pequeña planta herbácea de la familia Apiaceae, originaria de Asia; se usa como hierba medicinal ayurvédica y en la medicina tradicional china.
Los investigadores, adscritos a la Facultad de Química Farmacéutica Biológica (QFB), de la UV, explicaron que el estudio lo realizaron en ratas de laboratorio a las que administraron oralmente extracto de centella asiática L. Urb. durante 35 días consecutivos, hallando efectos anticonvulsivos sin generar nefrotoxicidad, hepatotoxicidad ni alteraciones en la citometría, que hace sugerir que puede servir como alternativa para mejorar convulsiones en pacientes epilépticos sin alterar los niveles químicos de las pruebas de función hepática y renal.
Isaac Zamora detalló que la epilepsia es un trastorno neurológico cuya principal característica es la presencia de crisis epilépticas espontáneas, resultantes de descargas sincrónicas de una población neuronal debido a un dinamismo anormal de las redes neuronales; afecta a alrededor de 50 millones de personas en el mundo, de las cuales entre 75 y 80% se encuentran en países en desarrollo.
Por su parte, Eduardo Rivadeneyra comentó que su participación en el proyecto de centella asiática y su efecto anticonvulsivo fue para determinar parámetros bioquímicos y hematológicos de la planta, dado que algunos productos naturales pueden originar a largo plazo efectos tóxicos que dañan hígado, riñones o la médula.
Sobre el proceso de la investigación, expuso que concluidos los 35 días de administración del extracto, dividieron a las ratas en tres grupos: uno denominado “vehículo”, otro con dosis de centella asiática de 200 y 400 miligramos por kilogramo, y uno más de carbamazepina.
A cada grupo se les extrajo sangre en el día 35, se depositó en tubos, uno con anticuagulante TTA y el otro fue un tubo seco (sin anticuagulante) para determinar los analitos que integran las pruebas de funcionamiento hepático.
Puntualizó que los valores son diferentes en quienes viven a nivel del mar y quienes radican en partes altas como la Ciudad de México, situación que sucede de manera similar en las ratas.
Rivadeneyra Domínguez precisó que junto con Zamora Bello verificó que en los grupos en estudio a los que se administró centella asiática de 200 y 400 miligramos no había diferencia significativa, la concentración de extracto que trabajaron no les hizo daño, lo que lleva a considerar que el extracto estandarizado podría ser de utilidad para el desarrollo de nuevas terapias seguras en el tratamiento de convulsiones asociadas con epilepsia.
La investigación ya se encuentra publicada en la revista británica BMC BioMed (BMC), especializada en publicaciones de acceso abierto, y se puede consultar en https://bmccomplementmedtherapies.biomedcentral.com/articles/10.1186/s12906-023-04179-2
Categorías: Ciencia, Principales