- Toda el agua está expuesta a deficiente tratamiento de purificación
- El agua de pozo también es propensa a la contaminación
- Expertos de la UV y sector privado participaron en el ciclo de conferencias “Gota a gota: charlas mensuales sobre agua”
Jorge Vázquez Pacheco
Fotos: Omar Portilla Palacios
25/04/2024, Xalapa, Ver.- El agua disponible, aunque sea tratada y envasada, no siempre es segura para consumo humano y se debe tener cuidado con la que se extrae de pozos, mencionaron especialistas de la Universidad Veracruzana (UV) y del sector privado, al participar en la charla “Los mitos y realidades del agua que bebemos”.
La actividad se desarrolló en el marco del ciclo de conferencias “Gota a gota: charlas mensuales sobre agua”, organizado por la Coordinación Universitaria para la Sustentabilidad (Cosustenta) de esta casa de estudios.
Jorge Alberto Carballo Juárez, Químico Farmacéutico Biólogo, asesor de Cosustenta, demostró como debe ser el proceso de purificación del agua para consumo humano recomendando la inyección de ozono en la etapa del pretratamiento y no en la previa al llenado del garrafón, asegurando con ello una efectiva desinfección y oxidación de los compuestos químicos no deseados.
Recomendó además que, en esta época de estiaje, la comunidad se asegure del origen del agua que adquieren a través de pipas ya que, si tienen sistemas de purificación de agua caseros (filtro de arena, filtro de carbón y lámpara de luz U.V.), no podrá asegurarse una adecuada remoción de los contaminantes del líquido que consumirán, poniendo en riesgo su salud.
Raúl Velásquez de la Cruz, ingeniero ambiental integrante del equipo de Agua de la Cosustenta, añadió que, generalmente, se considera segura el agua embotellada, pero variable, según la empresa y su ubicación.
El especialista en diagnostico ambiental alertó que en algunos casos se llega a comercializar agua embotellada que se torna verdosa al cabo de algunos días. En lo que toca al agua entubada, dijo que su problema es la contaminación por hierro, aunque reconoce que la que se recibe en Xalapa, procedente de vertientes cercanas, es de buena calidad luego de su tratamiento para hacerla llegar a los domicilios.
A la pregunta ¿es segura el agua de pozo para consumo humano?, Velásquez de la Cruz comentó que no siempre, ya que está expuesta a filtraciones contaminantes industriales, fertilizantes agrícolas y actividad ganadera.
La totalidad del agua que se obtiene mediante ósmosis inversa –denominada “agua ósmica”– sí es despojada por completo de minerales que pudiera tener un agua obtenida de una fuente natural directa, estos minerales se deben obtener por otras vías, como en frutas y verduras.
“Una persona normal requiere de por lo menos ocho vasos de agua, aunque esa necesidad es variable, de acuerdo con la actividad cotidiana de cada individuo”, concluyó.
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