Ciencia

Se hace ciencia para buscar el bien común: Carlos Ávila

  • Durante la ponencia que ofreció como parte de las actividades del Seminario Científico organizado por el Inbioteca 
  • “La mayor parte del proceso evolutivo no ha sido por competencia sino por la cooperación entre los humanos” 

 

Carlos Ávila habló sobre la importancia de la ciencia y el impacto de la actividad humana en el planeta

Carlos Ávila habló sobre la importancia de la ciencia y el impacto de la actividad humana en el planeta

 

“Se hace ciencia por curiosidad, por el amor al conocimiento, para buscar explicaciones al funcionamiento de la naturaleza y para buscar el bien común, aunque muchos la cuestionen porque a veces no se logre, por ejemplo, la bomba atómica” 

 

Paola Cortés Pérez 

25/11/2021, Xalapa, Ver.- Carlos Héctor Ávila Bello, investigador adscrito al Centro de Estudios Interdisciplinarios en Agrobiodiversidad, de la Universidad Veracruzana (UV), dijo que se hace ciencia para buscar el bien común, al dictar la ponencia “Nuestro legado académico y el Antropoceno”. 

La charla, que tuvo lugar el viernes 19 de noviembre, es parte de las actividades del Seminario Científico organizado por la Coordinación de Posgrado del Instituto de Biotecnología y Ecología Aplicada (Inbioteca). 

Planteó que la historia de la ciencia es la historia de cómo unos paradigmas se imponen a otros paulatinamente, aunque las luchas pueden ser políticas y económicas, dado que el desarrollo científico está en un continuo movimiento. 

Las preguntas fundamentales que debe plantearse un científico son: por qué, para qué, para quién, cómo (refiriéndose a los métodos), especialmente en una institución pública como la Universidad. 

“Se hace ciencia por curiosidad, por el amor al conocimiento, para buscar explicaciones al funcionamiento de la naturaleza y para buscar el bien común, aunque muchos la cuestionen porque a veces no se logre, por ejemplo, la bomba atómica.” 

Con respecto a la participación de los científicos en la elaboración de políticas públicas, expresó que no sólo se debe conocer a los representantes gubernamentales –a nivel local, estatal y federal–, sino participar y estar en comunicación con asociaciones civiles, grupos ciudadanos, organizaciones no gubernamentales.

La charla fue organizada por la Coordinación de Posgrado del Inbioteca

La charla fue organizada por la Coordinación de Posgrado del Inbioteca

 

Agricultura y evolución
Carlos Ávila mencionó que el descubrimiento del fuego y de la agricultura –después– por parte del ser humano, llevó al establecimiento de grandes civilizaciones, lo cual sigue teniendo una importante repercusión en la actualidad. 

Sin embargo, señaló, esto no ha sido comprendido por las grandes ciudades o las zonas altamente urbanizadas, ya que han olvidado que dependen de las plantas cultivadas e incluso de las no cultivadas, como los árboles. 

Mencionó que la mayor parte del proceso evolutivo no ha sido por competencia sino por la cooperación entre los humanos, esto lo tenían muy claro los pueblos originarios y ahora las comunidades indígenas. 

“Es mejor cooperar que competir, pero a nosotros nos han fomentado mucho la competencia; incluso los ecosistemas y seres humanos han establecido relaciones de cooperación que han tenido como resultado la biodiversidad cultural.” 

Lo cierto es que los cambios generados por el hombre tienen repercusiones importantes en el ambiente, una de ellas es la extinción masiva de especies. 

“En este Antropoceno (era geológica actual, caracterizada por el papel central de la humanidad) estamos provocando cambios hasta geológicos, con el fracking y la minería”. 

Cabe mencionar que en el último siglo el impacto de la actividad del ser humano en el planeta ha dado inicio a la sexta extinción masiva, pues en este tiempo ha acabado con las especies que a la naturaleza –en condiciones normales– le tomaría 10 mil años extinguir, de acuerdo con investigaciones realizadas por Gerardo Ceballos González, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). 

Asimismo, Ávila Bello mencionó que las personas están dando mucho peso a la tecnología, ejemplo de ello es el impulso de la agricultura inteligente, basada en el uso de drones y robots, “no sé hasta qué punto nos separará de la naturaleza y lo que significarán estos procesos coevolutivos”.