• La investigadora y activista afirmó que esta arte escénica es una herramienta valiosa para romper estereotipos y fomentar la igualdad entre hombres y mujeres 

Doris Difarnecio Mejía, activista y actriz, visitó el CECDA de la UV

Carlos Hugo Hermida Rosales 

Fotos: César Pisil Ramos (1) y archivo Universo (2 y 3) 

24/09/2024, Xalapa, Ver. “El teatro cuestiona las formas de ver el mundo; desde mi trayectoria he visto a esta arte escénica propiciar transformaciones impresionantes que aportan al crecimiento social, cultural y a la autonomía de la reflexión”, aseveró Doris Difarnecio Mejía, investigadora y activista. 

En su visita al Centro de Estudios, Creación y Documentación de las Artes (CECDA) de la Universidad Veracruzana (UV), la experta resaltó la importancia que tiene en Latinoamérica para decolonizar la mente y darle otra interpretación a los acontecimientos históricos.  

Doris Difarnecio, quien nació en Colombia, se crío en Nueva York y radica en Portugal, relató que se desarrolló entre dos culturas, pues mientras su padre proviene de la costa italiana, los orígenes de su abuela se remontan a África.  

Mencionó que en las culturas de los países latinoamericanos las mujeres tienen roles específicos preestablecidos, que las restringen a cocinar, cuidar el hogar y procrear hijos, lo cual se acentúa en las comunidades indígenas.

La activista compartió que el teatro le ayudó a alcanzar una sanación total y absoluta

“Crecí planchando camisas para mis hermanos, porque mis papás afirmaban era mi responsabilidad de género, y repetí esta acción hasta que dejé en claro que ellos podían hacer oficios performativos asignados a las mujeres”, comentó. 

La activista compartió que su historia familiar es complicada e incluye distintos tipos de violencias, que logró representar desde el teatro a fin de alcanzar una sanación total y absoluta.  

Aseguró que también es una herramienta valiosa para romper estereotipos y fomentar la igualdad entre hombres y mujeres.  

“En San Cristóbal de las Casas he visto a actrices chamulas –etnia indígena– que no se arriesgaban a levantar el rostro porque las consideraban atrevidas, encontrar su voz en el escenario y alzar la mirada”, enunció.  

Doris Difarnecio declaró que el ser humano necesita de sus semejantes y lo que hace afecta a la vida de los demás, por lo cual es esencial desaprender algunas nociones para crear un mundo donde todos quepan.  

Al hablar del performance, mencionó que es un arte en vivo efímero que puede ser abordado desde la investigación, usado en el activismo y para visibilizar y unir luchas sociales sin buscar el aplauso.  

“Representa una acción donde se usa un cuerpo que ha heredado nociones, y resignifica el lugar que ocupa en el contexto y el mundo”, manifestó.  

La actriz y activista colombiana, radicada en Portugal, señaló que el teatro brinda oportunidad de reflexionar sobre los problemas sociales