• El catedrático de la FCAS participó en el cortometraje Adopte un perro, producción ganadora del Bengaluru International Short Film Festival 2022
• Afirmó que el país cuenta con guionistas talentosos, actores y actrices de excelente calidad y directores de primer nivel

En Adopte un perro, Eduardo Azouri interpreta a un hombre conservador, religioso y tradicionalista

Carlos Hugo Hermida Rosales

Fotos: Eduardo Azouri y Oscar Martínez

20/08/2022, Xalapa, Ver.- “México es una potencia cinematográfica latente, porque el país cuenta con guionistas talentosos, actores y actrices de excelente calidad y directores de primer nivel”, afirmó José Eduardo Azouri Miranda, catedrático de la Facultad de Ciencias Administrativas y Sociales (FCAS) de la Universidad Veracruzana (UV). 

El docente explicó que es necesario impulsar la inversión de la iniciativa privada y establecer una legislación que incentive las producciones audiovisuales, para que la industria del cine despunte en el país. 

En esta cuestión el estado de Jalisco es un ejemplo a seguir, ya que recientemente el Congreso de la entidad aprobó una ley fílmica que implementará mecanismos de planeación, fomento y promoción para el desarrollo de obras cinematográficas y fotográficas en sus distintas manifestaciones.

Eduardo Azouri participó al lado de Bea Alducin, Sebastián Lavaniegos y Alberto Gorgonio en el cortometraje Adopte un perro, producción dirigida por Carlos Barreda Ruiz que ganó el Bengaluru International Short Film Festival 2022. 

Este certamen –que se realiza en la India– está avalado por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos, por lo que exige mucha calidad a los filmes inscritos.

Adopte un perro es una tragicomedia surrealista en la que Emilio –el protagonista– rescata a un can callejero y lo lleva con los padres de su prometida, quienes lo reciben como uno de los suyos, lo que provoca que el joven se sienta desplazado. 

En la producción Eduardo Azouri interpreta el papel del papá de la novia, un hombre conservador, religioso y tradicionalista que representa a muchos jefes de familia mexicanos; la trama visibiliza que en ocasiones al ser humano le desborda el amor por los animales, pero ha perdido la conectividad afectiva hacia sus semejantes. 

El académico mencionó que al resultar ganador del Bengaluru International Short Film Festival, Adopte un perro muestra que en México se puede realizar cine de calidad y no es privativo de grandes casas productoras.

El éxito del cortometraje proyecta al cine mexicano en el extranjero, particularmente en la India, nación que es una potencia en el rubro a nivel mundial. 

“Por muchos años el cine en México fue un vehículo de identidad nacional, pero se dejó de lado a fin de dar prioridad a la promoción de películas estadounidenses, y esto ha ocasionado que olvidemos nuestra esencia y quiénes somos”, comentó Eduardo Azouri.

El docente aseguró que el país tiene personas con talento de sobra para realizar filmes de alta calidad, y que éstas sólo deben formar buenos equipos de producción y aspirar a grandes metas.