- La artista y académica adscrita al IAP de la UV participa en la exposición que celebra el 236 aniversario de la Antigua Academia de San Carlos
- Coordina el Seminario Permanente de Investigación Artística en esta casa de estudio
Karina de la Paz Reyes Díaz
11/12/2017, Xalapa, Ver.- “Los conocimientos desestabilizan los saberes: lo que ya sabes no te produce nuevos conocimientos; lo que te desestabiliza es lo que te produce nuevos conocimientos. En esta vulnerabilidad es en la que voy trabajando, tiene mucho que ver con cuestiones filosóficas. Esta es mi idea del dibujo, que no es una mímesis de la realidad, sino como un espacio de ordenamiento, y éste no sólo incluye la lógica racional, también la simbólica, estética, de sensaciones. Es algo mucho más complejo”: Natalia Calderón.
Desde el 2007, Natalia integra la plantilla académica del Instituto de Artes Plásticas (IAP) de la Universidad Veracruzana (UV), es originaria de la Ciudad de México, estudió el Doctorado en Artes y Educación en la Universidad de Barcelona, España; la Maestría en Artes por la Utrecht School of the Arts en Holanda y Licenciatura en Artes Visuales en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
De acuerdo con su página personal http://natalia-calderon.com, ha presentado su trabajo artístico en distintas instituciones nacionales e internacionales como la Antigua Academia de San Carlos, Ciudad de México, 2017; la Fundación Antoni Tàpies, Barcelona, España, 2015; la 1era Trienal Offside Effect, Tiblisi 2012, Georgia; el Museo de Arte de San Diego, Estados Unidos, 2011, y en la Feria de Arte Kunstvlaai, Ámsterdam, 2010.
Lugares Inciertos es título de la obra con la que actualmente participa en la exposición Dibujo: lenguaje abierto. 236 aniversario de la Antigua Academia de San Carlos, cuya vigencia es de noviembre 2017 a marzo 2018 en las galerías del propio recinto, ubicado en la Ciudad de México.
De la pieza (ensamblaje de taburetes y dibujo con carboncillo) cita en su página: “Es parte de la investigación que realizo sobre la educación artística y los espacios de relaciones pedagógicas en el arte. El ensamblaje de los taburetes conjuga los distintos posicionamientos que se interrelacionan en el aprendizaje conjunto. Y los dibujos, que fueron hechos con carboncillo sobre las paredes y suelo, muestran las múltiples posibilidades que este aprendizaje proyecta”.
Y sobre su interés por la producción de conocimiento en el arte, no sólo la cuestión meramente estética o decorativa, sino los vínculos con la formación pedagógica y los enfoques hacia lo social, se realizó la siguiente entrevista.
¿A qué se refiere con producción de conocimiento en el arte?
La idea es que toda experiencia produce conocimiento, pero ¿qué tipo de conocimiento es el que se genera en las experiencias artísticas? ¿Por qué es tan valorado? Para dar cuenta de esta producción de conocimientos es que la investigación artística se mezcla con otros campos del saber en la academia, pero de alguna manera es guiada por estos proyectos artísticos, que son la columna vertebral de la investigación.
¿En qué situación se encuentra la investigación artística en México?
Es interesante, porque si bien podemos pensar que desde siempre se ha relacionado el arte y la investigación, de distintas maneras, este nuevo campo llamado “investigación artística” (que inició en Europa del Norte) ha permeado todas las latitudes.
Entonces, en Latinoamérica y en México hay un fuerte grupo de personas que mezclan investigación y arte, y cada vez vemos más exposiciones, seminarios y otras actividades sobre esto. Creo que es un campo que está muy burbujeante y vivo, y lo que hace falta es aclarar los límites o márgenes que lo circundan.
Es importante que espacios como el IAP defiendan esta postura de cómo se puede relacionar el arte con la investigación, sin que sea teoría o práctica, o producción o investigación, sino ambas. Una investigación guiada por una producción artística.
¿Por ejemplo?
Mi investigación, que es un poco abstracta, va sobre la producción de conocimiento artístico; entonces, utilizo elementos artísticos como el video, la fotografía, el grabado, la estampa, la cerámica, la instalación, la intervención del espacio urbano para poder guiar una investigación que incluye herramientas etnográficas, antropológicas, filosóficas. La mezcla de éstos genera distintos productos, no nada más exposiciones, sino artículos y participaciones en conferencias.
Cada proyecto requiere un medio específico para poder comunicar a otros campos y actores las ideas y conocimientos que se están produciendo.
¿Cuál es el propósito final de la investigación artística?
Para mí es la relación pedagógica que tengo con otros sujetos, entendida como la relación social para la producción de conocimientos. Esto lo estamos intentando en el IAP desde hace cuatro meses, a través del Seminario Permanente de Investigación Artística.
Las sesiones son los miércoles de 17:00 a 20:00 horas en el propio IAP y reúne a 13 personas que están llevando a cabo un proyecto artístico. Todos ellos tienen distintos perfiles y provienen tanto de las artes como de otros campos de saber como la biología, la antropología y la historia.
Nos reunimos para debatir qué significa en estos contextos, como Xalapa, la investigación artística en su práctica. Cada quien lleva un proyecto y a partir de él elaboraremos una exposición en enero de 2018 y haremos unas publicaciones. El asunto es pensar que la producción artística no sólo es individual, sino que se pueden conjuntar producciones.
La exposición mostrará estos procesos, que no son de obras finales o las piezas de arte a las que estamos acostumbrados, más bien, los procesos de investigación. Será, entonces, una exposición experimental.
La investigación y el proceso artístico son conceptos que, de alguna manera, vemos como contrarios: lo libre del arte y lo riguroso de la investigación.
Lo que hemos trabajado es cómo narrar sobre los procesos artísticos a partir de lenguajes académicos, procesos que alguna vez estuvieron encriptados, escondidos y son algo especial del artista. Se trata de hacer una función más social.
Al citar “función social”, ¿se refiere a involucrar a más personas, no sólo a quienes se dedican a la creación artística?
En algunos de los proyectos específicos del seminario sí está la idea de involucrarse con otros agentes. En el caso del seminario, más bien la función social es hacia los mismos seminaristas, para que tengan mayor conciencia de estos alcances.
¿Cómo relaciona el arte contemporáneo con su trabajo de investigación?
Un ejemplo es la pieza que se exhibe en San Carlos. Es una exposición retrospectiva de dibujo, desde cómo se inició el dibujo académico, los utensilios, las metodologías, para qué ha servido a través de los años hasta llegar al dibujo contemporáneo.
La pieza con la que participo (31 bancos ensamblados y las proyecciones dibujadas en las paredes) es parte de mi investigación. Son bancos que se utilizan en este contexto específico mexicano de la educación artística y el ensamblaje de ellos habla sobre este conocimiento colectivo, el que se da a partir de cómo te encajas con los otros.
Las proyecciones sobre pared y suelo muestran las posibilidades de este aprendizaje conjunto, de las múltiples visiones que se pueden generar. Las dibujé con carboncillo. Yo siempre utilizo en mi trabajo gis, carboncillo, materiales muy vulnerables, volátiles. Para mí tiene una carga simbólica importante.
¿Por qué utilizar materiales volátiles?
Lo importante de que sea volátil es la vulnerabilidad. No son efímeros, porque están ahí, pero para mí fue muy importante en mi educación en gráfica la cuestión de la huella; la idea del gis y el carboncillo es lo que de alguna manera no permanece del todo, está ahí, un poco vulnerable. Eso, me parece, tiene relación con el aprendizaje de los conocimientos.
¿Por qué son vulnerables los conocimientos?
Lo son porque nos afectan, por la relación del afecto. Afecto de afectación y de corazón.
¿Te gustaría ver más artes plásticas y gráficas en el espacio público?
La mirada artística lo que te enseña es a mirar y tiene mucha relación con la escucha, y la escucha de estas diferencias es la única manera de producir conocimiento.
Si miras y escuchas lo mismo aprendes poco. Entonces, en la diversidad, en la variedad lo importante es ir notando estas diferencias y rescatarlas. Creo que en eso sí una educación artística, cultural, universitaria, puede ayudar mucho a tener una mirada, una escucha crítica y sensible.
Categorías: Entrevista