• Nadia Sierra, de la SCJN, dijo que los estudiantes y abogados litigantes deben desarrollar destrezas como la creatividad y la innovación
• Usar todas las herramientas que ofrece esta disciplina favorece un cambio social y no sólo jurídico, explicó

La especialista impartió conferencia en la Facultad de Derecho

Paola Cortés Pérez

15/03/2018, Xalapa, Ver.- Nadia Sierra Campos, directora de Promoción y Difusión de Derechos Humanos en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), dijo que es fundamental que los estudiantes de Derecho desarrollen la empatía, destreza que los juristas han olvidado al momento de abordar un caso.

El 8 de marzo dictó la conferencia “La perspectiva de género en el derecho”, para inaugurar el Diplomado “Litigio estratégico, perspectiva de derechos humanos y género”, que imparte la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana (UV).

Mencionó que la empatía es un valor que ha sido olvidado por los abogados, pero es importante al momento de resolver un caso, por ello debe contemplarse en el plan curricular de las facultades o escuelas de educación superior.

“Al contarles un caso, un abogado común y corriente lo ve con una cuadratura de ley, tenemos que encontrarle la redondez a la ley para que ese caso quepa y lo puedas llevar a cabo, entonces tienes que generar otro tipo de destrezas, como la empatía.”

Los estudiantes y los abogados litigantes deben trabajar con creatividad e innovación y, sobre todo, usar todas las herramientas actuales de la disciplina para que puedan lograr un cambio social y no sólo jurídico. “Lo importante es que las personas estén en el centro y no el caso en sí mismo”, pues el derecho es una rama de las humanidades.

En su conferencia, la jurista explicó que el género se ha considerado un tema ajeno al derecho y que sólo tiene relación con las mujeres: “Aunque quisiéramos alejar o poner al derecho en un plano neutral, no se debe olvidar que está formado por la historia de las relaciones de las personas.”

En este sentido, apuntó que se han establecido normas que parecen neutrales, pero que afectan a mujeres y hombres, lo que da como resultado que los abogados trabajen y moldeen la ley de una manera distinta.