Ciencia

Epífitas, fuente de agua y alimento para diversos animales 

  • Thorsten Krömer, investigador del Citro-UV, publicó artículo de divulgación científica sobre estas plantas en el Boletín de la Sociedad Científica Mexicana de Ecología 
  • Las epífitas son plantas que crecen sobre los árboles, principalmente, para acceder a mayores niveles de luz, no son parásitas  
  • A pesar de que son vitales para los ecosistemas tropicales, todavía hay muchas cosas que se desconocen, de ahí la relevancia de continuar investigando 

 

Thorsten Krömer, investigador del Centro de Investigaciones Tropicales

 

Paola Cortés Pérez 

Fotos: Luis Fernando Fernández (1) y Thorsten Krömer 

05/02/2025, Xalapa, Ver.- Thorsten Krömer, investigador del Centro de Investigaciones Tropicales (Citro) de la Universidad Veracruzana (UV), publicó en el Boletín de la Sociedad Científica Mexicana de Ecología el artículo de divulgación “Epífitas vasculares como fuente de agua y alimento para la fauna”, en el que destaca la interacción de estas plantas con una diversidad de animales como aves, murciélagos, ranas e insectos. 

Las epífitas son plantas que crecen sobre otras –principalmente árboles– para acceder a mayores niveles de luz, también se confunden o asocian con los parásitos; sin embargo, mientras estos sí consumen agua y nutrientes a su hospedero, aquellas solo lo usan como soporte, explicó. 

Entre este tipo de plantas se cuentan las orquídeas, bromelias y helechos; crecen principalmente en el Trópico y representan hasta el 10% de la flora mundial. En México, aproximadamente el 8% de la flora vascular corresponde a estas plantas. 

“En los bosques mesófilos de montaña que rodean nuestra Universidad en la región Xalapa hay muchas epífitas”, comentó Thorsten Krömer, quien ha dedicado más de dos décadas a su estudio, un grupo de plantas conspicuas que son relevantes para la función ecológica de los bosques tropicales. 

 

Las epífitas crecen en los doseles de los árboles en busca de mayor luz

 

En el dosel de los árboles se presenta todo un pequeño ecosistema en el que ellas ofrecen refugio, agua y alimento –específicamente néctar y polen– a una variedad de animales que polinizan las flores y dispersan las semillas de los frutos carnosos. 

En el artículo, el investigador del Citro detalla la relación entre las bromelias y los colibríes que son atraídos por las coloridas flores tubulares. Por otro lado, las bromelias tipo tanque son microhábitats acuáticos, almacenan agua en las cisternas formadas por las bases de sus hojas en estructuras conocidas como fitotelmata. 

Estos humedales ubicados en la parte superior de los bosques son vitales para diversas especies de fauna, desde insectos, anfibios y reptiles, hasta aves y monos. Un ejemplo de ellos son las ranas arborícolas, las cuales completan todo su ciclo de vida: la puesta de huevos y desarrollo de renacuajos. 

Destacó que el artículo fue diseñado y redactado para un público general con el fin de sensibilizar sobre la importancia ecológica de estas plantas, ya que la mayoría de las personas las consideran parásitas, de ahí la necesidad de continuar con su estudio y difundir conocimiento sobre ellas. 

“A pesar de que son vitales para los ecosistemas tropicales, todavía hay muchas cosas que no sabemos”, puntualizó. Por lo que su trabajo, junto con el de sus estudiantes en el Citro, ayuda a desentrañar los misterios de estas fascinantes plantas y sus complejas interacciones ecológicas. 

 

Bromelias tipo tanque son microhábitats acuáticos, almacenan agua en las cisternas formadas por las bases de sus hojas

 

Amenazas y conservación 

Thorsten Krömer platicó además sobre las amenazas que enfrentan las epífitas debido a la deforestación y el cambio de uso del suelo. 

“Si se corta un árbol, con él pueden desaparecer hasta 50 especies diferentes de epífitas, de las cuales muchas son endémicas y adaptadas a microclimas específicos de alta humedad y temperaturas estables, por lo que muchas no sobreviven cuando el bosque pierde su cobertura”, advirtió. 

Sin embargo, también existen epífitas que se han adaptado a ambientes perturbados, como las tillandsias grises o atmosféricas, ya que estas bromelias son tolerantes a una alta insolación, por lo que incluso crecen en los cables de luz. 

“La presencia de muchas especies que requieren ambientes conservados nos indica que el bosque está en buen estado; mientras que las otras revelan la perturbación del mismo. Estas características las convierten en bioindicadores para evaluar el estado de conservación”, explicó.

 

Existen epífitas adaptadas a ambientes perturbados, como las tillandsias grises o atmosféricas, que crecen en los cables