• Dentro del Programa Talentum Universidad
• Son tres jóvenes que fueron seleccionados de un total de 11 mil
• La estrategia consistió en asignarles retos para valorar su iniciativa y liderazgo
• Elaboraron proyectos en materia educativa, movilidad urbana y tecnología

Claudia Peralta Vázquez

Josué Alejandro Alemán Vilis, Tania María Vidaña Rivera y Karla Elisa Carrillo Rodríguez, alumnos de la Universidad Veracruzana (UV), compartieron las ideas que aportaron a la solución de diversas problemáticas nacionales durante su participación en el Programa Talentum Universidad, el cual reunió –de marzo a julio del presente año– a 60 estudiantes de universidades públicas y privadas de todo el país.

Los universitarios explicaron que a través de la asignación de retos e integrados en equipos multidisciplinarios, realizaron un proyecto para contrarrestar las adversidades que enfrenta la población mexicana en el ámbito de equidad de género, comunicación, movilidad urbana, educación, recursos energéticos, empoderamiento en mujeres y tecnología.

Josué Alejandro Alemán Vilis, Tania María Vidaña Rivera y Karla Elisa Carrillo Rodríguez.

Y es que Talentum Universidad, el cual forma parte del Programa Interdisciplinario de Políticas y Prácticas Educativas (PIPE) del Centro de Investigación y Desarrollo Económico (CIDE), en colaboración con la Secretaría de Educación Pública SEP, impulsa el talento y aptitudes de liderazgo de los jóvenes universitarios.

Al respecto, Josué Alejandro, estudiante de la carrera de Químico Farmacéutico Biólogo (QFB), narró que el proyecto efectuado junto con otros cuatro integrantes de diversas carreras e instituciones de educación superior de México, se centró en la posibilidad de cómo mejorar los niveles de lecto-escritura en alumnos de educación básica.

Una de las soluciones contempló establecer un programa piloto denominado “Lectura y Escritura” para ser aplicado en niños de segundo y tercer grado de primaria de 80 escuelas del país, a quienes se les iba a dar la libertad de escoger una lista de libros que les interesara leer.

El trabajo incluyó la capacitación de profesores en temas de liderazgo, ya que se considera que los formadores enseñan a leer y escribir pero no tienen idea de cómo motivar a un niño a adoptar estos hábitos.

“Se iba a trabajar con ellos en modalidad virtual y presencial y a la par en un taller para padres, con el fin de que se interesaran en mejorar y ayudar a sus hijos.”

Los maestros sienten que a pesar de que se esfuerzan en las escuelas, muchas veces los padres de familia no los apoyan, dijo.

Señaló que con base en el programa PISA de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, México se encuentra muy por debajo del nivel estándar en cuanto a lecto-escritura y tardaríamos mucho en llegar a un grado aceptable.

Por ello, involucrar a maestros y a padres de familia es una manera de ayudar a la población infantil a mejorar este aspecto.

En tanto, Tania María Vidaña Rivera, alumna de la carrera de Psicología, platicó que el reto que le tocó enfrentar al lado de su equipo fue llevar Internet a zonas rurales.

Dijo que esta labor les permitió detectar las desventajas de los habitantes de estas regiones que no cuentan con este servicio. En este sentido, no sólo se planteó la instalación de antenas receptoras de Internet, sino también integrarlo socialmente a las comunidades.

Es decir, entrenar a las personas en el uso de computadoras y capacitación para poder manejar los programas; y desde el punto de vista educativo, se propuso la instalación de un centro comunitario para el uso continuo de esta herramienta.

Añadió que para su aplicación y prueba piloto se tomó en cuenta a la localidad de San Miguel Totolapan, estado de Guerrero, para posteriormente extenderlo a todo el país.

“Mi aportación como psicóloga tuvo mucho que ver con la creación de un centro comunitario para que el Internet les fuera de gran beneficio.”

El reto de Karla Elisa Carrillo, estudiante de Arquitectura, correspondiente a movilidad urbana, se basó en la creación de un casco inteligente para ser empleado por ciclistas en caso de algún accidente.

A través de la señal de satélite, dicho artefacto enviaría una alerta a la clínica y hospital más cercano para que acudieran en su auxilio. En beneficio de la comunidad ciclista, también se propuso compartir rutas seguras mediante una aplicación para telefonía celular.

La joven expuso que este último apartado contará con el seguimiento de la Alianza para el Gobierno Abierto. Se trata de una plataforma internacional para reformadores domésticos comprometidos a que sus gobiernos rindan cuentas, sean más abiertos y mejoren su capacidad de respuesta hacia sus ciudadanos.

En él intervienen 64 países que junto con los gobiernos y la sociedad civil trabajan para desarrollar e implementar reformas ambiciosas en torno al gobierno abierto.

“Se les dará seguimiento para que pueda ser una realidad.”

Gracias al Programa Talentum Universidad, los tres jóvenes tuvieron la oportunidad de participar en ponencias y cursos, así como realizar una estancia en Estados Unidos para conocer Sillicon Valley, las instalaciones de Google, el Laboratorio Nacional de la Universidad de Berkeley y de la NASA.