- Fue un regalo del Voluntariado de la UV a la primera generación del Telebachillerato El Paisano
- “Algunos de nosotros todavía no conocíamos Veracruz y el mar, me emocioné mucho cuando lo vi”: Marisol Córdoba
- También visitaron el Teatro “Clavijero” e hicieron un recorrido en turibús
Paola Cortés Pérez
Xalapa, Ver. 08/07/2016.- El miércoles 22 de junio fue un día muy diferente para los 14 estudiantes del Telebachillerato El Paisano, pues los esperaba una excursión al Acuario y al centro histórico de Veracruz, así que tuvieron que despertarse muy temprano y preparar todo lo necesario para emprender la gran aventura.
El viaje fue organizado por el Voluntariado de la Universidad Veracruzana (UV) como regalo de fin de cursos a la primera generación del plantel educativo integrado por 11 estudiantes, así como para cuatro jóvenes con el mejor promedio de segundo y cuarto semestre.
Los vehículos partirían de la comunidad El Paisano, municipio Las Vigas de Ramírez, en punto de las 6:50 horas de la mañana pero la salida se retrasó debido a que uno de los estudiantes no llegaba. Dieron las 7:30, no pudieron esperar más a su compañera y partieron rumbo a su destino.
Después de una hora y media de recorrido, los jóvenes pararon en la ciudad de Xalapa unos minutos, después continuaron hacia el puerto de Veracruz. Fueron acompañados por el profesor Gerardo Rosas Ricaño y el padre de familia José Erasto Córdoba.
Durante el viaje, algunos estudiantes se durmieron mientras otros platicaban y observaban el paisaje en espera de ver el mar, pero en todo momento estuvieron tranquilos.
Faltaban 15 minutos para las 11:00 horas cuando se llegó al primer destino: el Acuario de Veracruz. La hora de ingreso estaba programada a las 11:30, así que aprovecharon los minutos restantes para tomar un pequeño refrigerio.
Por fin llegó el momento que habían esperado con nervios y ansias. Permanecieron formados, ordenados y casi en silencio, ya listos para iniciar el recorrido en el Acuario. Los primeros animales que les dieron la bienvenida fueron unos coloridos peces koi.
La primera sala mostraba algunas especies que viven en la selva de Los Tuxtlas. Los chicos quedaron asombrados al observar de cerca al tucán real, las guacamayas y algunas tortugas. Pero las que fueron constantemente fotografiadas fueron las coloridas guacamayas.
En la galería de agua dulce quedaron maravillados al ver tantos peces de diferentes tamaños, y las que se robaron la atención de los estudiantes de El Paisano fueron las nutrias. En esta sección permanecieron largos minutos para poder grabarlas mientras nadaban.
“Todo me ha asombrado, todo me parece mágico, me gustó todo, parezco un chiquillo porque todo me sorprendió”, expresó el señor José Erasto.
Al llegar al túnel, los estudiantes permanecieron por algunos minutos para observar las diferentes especies que atravesaban y continuaron hacia la “Pecera Arrecifal”, el tanque de mayor tamaño en el acuario.
Después de la breve explicación, los jóvenes de inmediato se acercaron a las grandes ventanas de acrílico para fotografiar o tomar videos a los tiburones, las rayas blancas y a las decenas de peces de colores, con la intención de mostrarlas a sus familias y a sus compañeros de escuela.
Continuaron por la galería de agua salada, donde se exhiben más de 60 especies de organismos arrecifales incluidos peces, reptiles e invertebrados.
Le siguió el tiburonario, donde vieron a tiburones tigres y tiburones aleta de cartón; fue la exhibición que más gustó y sorprendió a los estudiantes. Durante la explicación no quitaron la vista del gran ventanal que los separaba de los tiburones que majestuosamente paseaban frente a ellos, como lo externó Federico Martínez Córdoba, quien agregó que su animal favorito son los delfines.
La sala que exhibe a tres especies diferentes de medusas también los dejó maravillados por las formas y pigmentos que les ponen en el acuario para que el visitante pueda verlas.
“Me gustó ver las medusas por los colores que les pusieron, además no puedo creer que esos animalitos tan pequeñitos sean tan sorprendentes, por ejemplo nos dijeron que por donde comen también defecan, eso me impactó mucho”, compartió Liliana Martínez Córdoba.
Para cerrar el recorrido, el grupo disfrutó del espectáculo de los delfines, los pingüinos y los manatíes. Salieron muy contentos y motivados tras la visita.
Todas las áreas de exhibición sorprendieron a los jóvenes, ya que sus teléfonos móviles no pararon de grabar videos y tomar fotografías. Incluso el profesor y el padre de familia que los acompañaron también se mostraron sorprendidos y entusiastas en todo momento. Posteriormente fueron a comer, para continuar el recorrido por Veracruz.
“Me gustó mucho ver toda la diversidad que hay en el Acuario, las especies que están preservando. Me encantaron las morenas verdes, por el color y forma que tienen, son muy bonitas”, mencionó Marisol Córdoba.
El siguiente punto sería un breve recorrido en el Teatro “Clavijero”; las chicas quedaron encantadas al ver las lámparas y estatuas de mármol que decoran el lugar.
Aunque el calor fue sofocante para los jóvenes, su ánimo no decayó en ningún momento y continuaron disfrutando del viaje. Fue así que subieron al turibús para conocer algunos de los lugares de relevancia histórica en Veracruz.
Para aminorar un poco el bochorno comieron helado, momento que aprovecharon para intercambiar opiniones sobre el recorrido en el Acuario y en el turibús.
A decir de algunos de los chicos, lo único malo del viaje fue que no pudieron meterse al mar, ya que para algunos fue la primera vez que estuvieron tan cerca de él.
“Algunos de nosotros todavía no conocíamos Veracruz y el mar, me emocioné mucho cuando lo vi, me hubiera gustado sentirlo pero no tuvimos la oportunidad, pero de todas maneras lo disfrutamos”, expresó Marisol Córdoba.
Pasaban de las 19:00 horas cuando tomaron un último refrigerio antes de volver a sus casas. Dulce María Torres Martínez y Yulissa Torres Guzmán, quienes obtuvieron los mejores promedios del segundo semestre, compartieron que tomaron muchas fotos para mostrarlas a sus parientes y amigos.
Respecto al viaje, los jóvenes dijeron que no esperaban recibir un regalo de esta magnitud, “sólo que nos dieran unos pequeños presentes, pero cuando nos dijeron que el regalo sería un viaje nos emocionamos, no pudimos ni dormir”, comentó Claudia Córdoba.
“Aunque fue muy padre, lo más bonito fue haber convivido con mis compañeros porque difícilmente estaremos todos juntos, después cada quien agarrará su rumbo”, dijo Liliana Martínez Córdoba.
Para Gerardo Rosas Ricaño, profesor del Telebachillerato, esta excursión fue una hermosa sorpresa, “será una experiencia que no olvidarán”.
Recordó que desde el momento en el cual les comunicó a sus estudiantes sobre el viaje, estuvieron muy contentos y él muy emocionado porque esto les ayuda a ampliar su aprendizaje. “Gracias al Voluntariado UV tuvimos la oportunidad de viajar a Xalapa y ahora a Veracruz, lo que ha contribuido también a su formación integral”.
Agradeció a la Universidad Veracruzana y a su Voluntariado por enriquecer el desarrollo de las comunidades a través de las Casas UV, en este caso por obsequiarles este viaje, “me llena en plenitud verlos felices y por lo mismo estoy muy contento”.
Después de más de dos horas de camino regresaron a El Paisano, donde sus familias los esperaban impacientes para que les contaran sobre su viaje de fin de cursos.
Elia Beltrán Coronel, presidenta del Voluntariado de la UV, detalló que esta actividad escolar se llevó a cabo con los recursos recaudados por las diversas actividades que han organizado y por donaciones de algunos empresarios.
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