Derechos Humanos

Fundamental replantear política migratoria mexicana: Judith Aguirre

  • “Si bien México tradicionalmente era un país de tránsito, debido a situaciones como la violencia en Centroamérica se ha convertido en uno de destino”
  • “La movilidad de niños migrantes menores de 12 años se multiplicó, y pasó de poco más de cuatro mil en 2020, a una cifra mayor a 32 mil en 2021”

 

Judith Aguirre Moreno

Judith Aguirre Moreno

 

Texto y fotos: Carlos Hugo Hermida Rosales

04/05/2022, Xalapa, Ver.- Judith Aguirre Moreno, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Veracruzana (UV), mencionó que es fundamental repensar y replantear la política migratoria mexicana referente a refugio y asilo, ya que si bien México tradicionalmente era un país de tránsito, debido a situaciones como la violencia en Centroamérica se ha convertido en uno de destino.

“Cuando se plantean muchos casos de refugio, la nación se vuelve menos humanitaria”, aseguró.

La investigadora participó en el evento “Reflexiones sobre los derechos de la infancia en México” organizado por la UV, con la conferencia virtual “Niños migrantes”, el pasado 3 de mayo.

Judith Aguirre afirmó que actualmente la población mundial se enfrenta a una crisis sin precedentes, en la que el número de personas que vive en un país distinto al que nació es mayor que nunca.

Compartió que en México la movilidad de niños migrantes menores de 12 años se multiplicó, y pasó de poco más de cuatro mil en 2020, a una cifra superior a 32 mil en 2021.

Muchos de estos pequeños huyen de la violencia social y de la que se da al interior de sus hogares, fueron desplazados de su país natal debido a desastres naturales, o simplemente buscan reunirse con sus familiares que viven en Estados Unidos.

En el trayecto que emprenden están expuestos a agresiones físicas, psicológicas y sexuales, y en ocasiones son secuestrados por miembros del crimen organizado que los utilizan en el negocio de trata de blancas o para engrosar sus filas.

En caso de que logren llegar a su lugar de destino, se enfrentan al síndrome de Ulises, malestar emocional que incluye el estrés de aprender otro idioma, el temor a ser rechazados y discriminados y un futuro lleno de incertidumbres.

La investigadora comentó que aunque tanto México como Estados Unidos promueven en los últimos años la creación de albergues para niños migrantes, la falta de preparación de las autoridades desemboca en deportaciones rápidas a sus países de origen, lo que los expone de nuevo a las situaciones de las que escaparon.

Enfatizó que es necesario modificar las políticas públicas migratorias en papel y acompañarlas de recursos económicos, ya que sin ellos no servirán de mucho.