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La comida, elemento de mediación para dialogar con los difuntos

  • Arturo Gómez dijo que la ofrenda o los alimentos no sólo se da durante la celebración dedicada a los fieles difuntos, por el contrario, en muchas culturas todo el año hay conmemoraciones

 

Arturo Gómez, del Museo Nacional de Antropología

Arturo Gómez, del Museo Nacional de Antropología

 

Paola Cortés Pérez

Fotos: Omar Portilla Palacios

01/06/2022, Xalapa, Ver.- La comida es un elemento de mediación para dialogar y convivir con los difuntos, expuso Arturo Gómez Martínez, del Museo Nacional de Antropología, al dictar la conferencia magistral “Alimentos y ofrendas para los difuntos”, como parte de las actividades del Seminario “El lugar de los muertos: el Mictlán”.

El evento académico es organizado por el Instituto de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV), en el marco del 65 aniversario de la fundación de dicha entidad.

En la conferencia realizada el jueves 26 de mayo a través de la cuenta de Facebook Instituto de Antropología-UV, mencionó que algunas culturas tienen el pensamiento de que los muertos comen y no cualquier alimento, por lo tanto, se les debe atender al ser parte fundamental de su vida.

Mencionó que el calendario agrícola está estrechamente ligado al calendario ritual. En las fechas indígenas hay particularmente tres festividades que coinciden: el carnaval y la fiesta de La Candelaria; los rituales o fiestas de petición inician a partir del 3 de mayo, con la celebración de la Santa Cruz; y finalmente Todos Santos, que empata con las cosechas que servirán para preparar la comida para los difuntos.

Explicó que la ofrenda es la disposición y la colocación de ciertos elementos, en el caso de los difuntos habrá un elemento relevante: la convocatoria.

Las ofrendas consideran la causa del fallecimiento, la fecha y el lugar donde serán colocadas

Las ofrendas consideran la causa del fallecimiento, la fecha y el lugar donde serán colocadas

 

“Una vez convocados, les disponemos la ofrenda comestible y ya estando todo listo se procede a dialogar con ellos. La gente gasta mucho y se esfuerza para cultivar alimentos y flores; además, preparan cestos, semillas, frutos y un sinfín de cosas que serán colocadas en las ofrendas.”

Arturo Gómez subrayó que la ofrenda o los alimentos no sólo se dan durante la celebración dedicada a los fieles difuntos, por el contrario, en muchas culturas todo el año hay conmemoraciones en las que se dedican alimentos, rituales, danza, música y otros elementos a sus muertos.

Las ofrendas tienen una diversidad de alimentos, para ello se considera la causa del fallecimiento, la fecha y el lugar donde serán colocadas.

El maíz no debe faltar en la ofrenda, es fundamental para los vivos y los muertos porque conlleva la noción “cuerpos de maíz” y de ciudadanía.

“Este cereal sufre un proceso de vida similar al de los humanos: nace, crece, muere y lo entierran. Hay este proceso de metamorfosis de muerte creadora, el sembrar el maíz es sepultar también la carne de los humanos.”