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Los Reyes Magos sí existen

  • Niños de Ixuacán de los Reyes se comprometieron a portarse bien para que Melchor, Gaspar y Baltasar regresen el próximo año
  • “Gracias por permitirme seguir creyendo en ellos”, expresó una de las niñas beneficiadas

Claudia Peralta Vázquez

01/02/18, Ixhuacán de los Reyes, Ver.- El Voluntariado de la Universidad Veracruzana (UV) nuevamente llevó alegría a niños y niñas de este municipio, específicamente a las comunidades de Monte Grande, Coyopolan, Atecaxil y La Alameda, quienes recibieron juguetes, ropa y zapatos, a través de las campañas “Apadrina una carta” y “Dona un juguete”.

El miércoles 31 de enero, una caravana se dirigió a estas comunidades en las que los niños esperaban ansiosos el arribo de los universitarios, pues no a todos los hogares llegaron los Reyes Magos.

En Monte Grande, la primera localidad visitada, una población de 110 niños y niñas participaron en un festejo que reunió a autoridades ejidales, educativas y padres de familia quienes agradecieron y pidieron a los padrinos y madrinas del Voluntariado UV no dejar de respaldar esta causa que año con año llena de felicidad y alegría a los pequeños.

A nombre de todos los niños, Yatziri Matla Colorado, de quinto grado de primaria, expresó: “Creo que los Reyes Magos sí existen, gracias porque me permiten seguir creyendo en ellos y dejan que su espíritu entre en nuestros corazones”.

Enseguida, abrieron los regalos con la ayuda de sus padres, de la coordinadora del Voluntariado UV, Elia Beltrán Coronel; de los integrantes de los equipos de volibol, basquetbol y futbol de Halcones UV, que representaron a Melchor, Gaspar y Baltasar; de la directora de Actividades Deportivas (DADUV), Maribel Barradas Landa; del entrenador, Armando Navarrete Munguía; y del payaso Pelón Pelo Riko quien ofreció un show lleno de diversión y entretenimiento.

Al término, los niños del jardín “Benito Juárez García” y de la primaria “Miguel Hidalgo y Costilla” regresaron felices a las instalaciones de sus escuelas, cargando por un lado sus pupitres que llevaron al salón social de la localidad para permanecer sentados durante el evento, y por el otro, las bolsas con sus juguetes dentro.

Más tarde, en la explanada ubicada a un lado de la Casa UV de Coyopolan, un nutrido público infantil conformado por 161 pequeños, esperaba el inicio del festival y el momento en que se diera el conteo del 10 al cero para empezar a abrir los regalos.

Mientras tanto, bailaron y cantaron en coro varias canciones y era tanta su felicidad que hubo quienes le dieron un toque de mayor movimiento y entonación a ambas actividades, por lo que fueron premiados con muñecas y pelotas.

Carmela y Bertha Matla Elox, madres de familia de la localidad de Monte Grande, dijeron sentirse muy orgullosas de ver a sus hijos felices.

“Los Reyes Magos les traen algo muy sencillo porque todo está tan caro que no alcanza para comprarles lo que tanto anhelan, nada más lo que se puede.”

Comentaron que en la comunidad sus maridos trabajan en el campo y ellas laboran en el hogar, en actividades domésticas y al cuidado de sus hijos.

Otras mamás y niños también compartieron con Universo su sentir tras conocer sus regalos.   “Me trajeron un carro de control remoto y un balón, gracias a los Reyes Magos, los voy a cuidar y me divertiré mucho con ellos, además me portaré bien y haré mis tareas”, expresó Marcos.

“Gracias a la UV porque cada año nos apoyan”, manifestó María Luisa Colorado Palacios, originaria de Chichicazapa y madre de William Tadeo, alumno del Jardín de Niños “Benito Juárez” de Coyopolan.

Para tener un contexto de su dinámica cotidiana, agregó que diariamente William y su hermana mayor caminan 45 minutos para llegar a la escuela ubicada en Coyopolan. Muchas veces han llegado a faltar, sobre todo cuando llueve y el camino representa un riesgo para ellos.

En el festejo, también participaron niños y niñas del jardín “Juan Rulfo” y de la escuela primaria “José María Morelos y Pavón”, de La Alameda.

Así como de las primarias “José Abraham Cabañas” y “José María Morelos y Pavón”, de Atecaxil y Coyopolan, respectivamente.