• Se plantaron alrededor de 150 árboles en el módulo 
• Se espera la primera producción en un periodo de dos años a dos años y medio 

Se plantaron alrededor de 150 árboles de limón persa en la Facultad de Ingeniería en Sistemas de Producción Agropecuaria

Carla Janeth Carmona Padilla 

Fotos: Cortesía de Víctor Manuel Domínguez Cartas 

25/01/2024, Coatzacoalcos, Ver.- La Facultad de Ingeniería en Sistemas de Producción Agropecuaria (FISPA) de la Universidad Veracruzana (UV), región Coatzacoalcos-Minatitlán, instaló el módulo de cítricos “Limón persa”, con el fin de reestructurar las áreas productivas de la entidad académica, así como tener un espacio de enseñanza y aprendizaje donde los alumnos puedan interactuar y fortalecer competencias como levantamiento de datos, observación y análisis, entre otras prácticas. 

Víctor Manuel Domínguez Cartas, académico de la FISPA, señaló que la idea surgió en agosto de 2023 y durante los meses posteriores se trabajó en preparar y acondicionar el terreno para establecer el módulo en diciembre, donde se plantaron 150 árboles de un año en un espacio de poco menos de media hectárea, esperando su primera producción en un periodo de dos a dos años y medio. 

A través del módulo convergen diferentes semestres de distintas experiencias educativas tales como Fisiología, Edafología, Diseño Experimental, Control Biológico, Producción Orgánica, Fitopatología, Fitosanidad, Introducción a los Sistemas de Producción, Conservación de Suelos y Agua, buscando una enseñanza transversal que beneficie al alumno. 

Domínguez Cartas destacó el impacto de la FISPA con relación al limón persa en las áreas social y ambiental, balanceando lo convencional con el uso de productos naturales y orgánicos para buscar compatibilidad con los microorganismos del suelo, así como económicas y productivas, destacando esta última como una faceta que impulsa la atracción de nueva matrícula. 

“Vamos a hacer un producto destacado con manejos agroecológicos y convencionales, técnicas innovadoras, con una producción significativa para mostrar que FISPA está aportando, produciendo, permitiendo mostrar a los muchachos de allá afuera que se está teniendo un impacto social y realizando actividades prácticas a través de sus módulos”, mencionó.

El módulo abarca poco menos de media hectárea

La instalación del módulo cobra importancia al existir actualmente alta demanda de cítricos, como limón y naranja, y la disminución de producción en puntos en la parte norte y centro de Veracruz provocada por enfermedades, causando que municipios productores en la zona sur tomen relevancia y auge a nivel local. 

“Estamos con esa tendencia a la cual se le ven múltiples beneficios económicos; producir limones para abastecer a nuestro mercado, tal vez no nacional, pero sí el mercado local con técnicas de mejora que permitirán un aprendizaje colectivo con los mismos maestros y alumnos, y que sea posible replicar en algún momento con algunos productores”, explicó Domínguez Cartas. 

“Uno de los riesgos a los que se enfrenta esta nueva producción es el cambio climático: las limitaciones en precipitaciones pluviales, la escasez de lluvias y el calor hace que proliferen plagas que devastan cultivos”, abundó. El académico puso como ejemplo la Diaphorina citri, un vector que transmite la bacteria Huanglongbing (HLB), que seca y da muerte a las plantas, así como la cochinilla algodonosa, mosquita blanca y araña roja, entre otras. 

Se planea contratacar estos retos mediante prevención; conocer las plagas, difundir información, dar seguimiento y llevar un control preventivo para conservar todos los árboles por superficie mediante una combinación de productos químicos y orgánicos que mantengan un balance y no sean tan severos con el medio ambiente. 

Finalmente, el módulo busca que exista divulgación de conocimiento y generación de tecnologías, dando a conocer alternativas de producción para que los estudiantes puedan llevar este conocimiento a sus comunidades y repliquen, innoven y trasciendan. 

El estudiante Rogelio Arellano Reyes comentó acerca de lo que aprendió durante la instalación del módulo: “Nunca imaginé que para tener un sembradío de limón se necesitaban conocimientos hasta edafológicos para elegir el tipo de especie; en este caso nuestro suelo nos ayuda a retener agua y los distintos tipos de siembra, nosotros usamos el rectangular, aunque existen otros como el tresbolillo y en zigzag”. 

En la instalación del módulo participaron alumnos de distintos semestres

El también estudiante Jorge Zhaid Uscanga Vázquez añadió que estas actividades complementan el conocimiento teórico del aula. “Al ir a campo podemos interactuar y apreciar lo que nos transmite el docente en las clases, aparte de que es dinámico y no se vuelve tan monótono, esto nos permite retener más en la memoria”. 

José Luis Ramírez Ochoa es uno de estos estudiantes y dio sus expectativas a corto y largo plazo acerca de las prácticas realizadas: “A corto plazo, espero ver una buena producción; a largo plazo, quisiera implementarlo de manera personal, utilizar los conocimientos adquiridos y que me sirvan como una herramienta para hacer mi propia producción”.