- Desde que implementaron el proyecto BIOVERA en 2012, han obtenido financiamiento para desarrollar investigación durante dos años
- La colaboración ha permitido que tres egresados de esta casa de estudio cursen un posgrado en Alemania
- Jorge Gómez cursó un doctorado en la universidad alemana, a finales de enero presentará su examen de titulación
Paola Cortés Pérez
Xalapa, Ver., 24/01/2017.- Académicos y estudiantes del Centro de Investigaciones Tropicales (Citro) de la Universidad Veracruzana (UV) y de la Universidad de Göttingen, Alemania, desarrollan desde 2012 el proyecto de investigación intitulado “BIOVERA: Exploración y explicación de patrones de biodiversidad a lo largo de gradientes de altitud, clima e influencia antrópica en el centro de Veracruz, México”.
Thorsten Krömer, coordinador principal del proyecto e investigador alemán adscrito al Citro, dijo que el objetivo de este proyecto interdisciplinario es encontrar posibles explicaciones a los patrones de diversidad y distribución vegetal a lo largo de gradientes de altitud e influencia humana en las faldas del Cofre de Perote, en la región central del estado.
Se conoce como gradiente a una línea recta que va desde un punto bajo (en este caso, el nivel del mar) hasta llegar a un punto alto (el Cofre de Perote), y puede ser de diversos tipos: altitud, perturbación antrópica (la manera en que el hombre transforma el ambiente), entre otros.
“Es muy interesante trabajar en esta área porque hay diferentes tipos de vegetación, desde la selva mediana en las tierras bajas, pasando por el bosque mesófilo, hasta los bosques de coníferas en la parte alta, debido a los diferentes tipos de climas a lo largo del gradiente.
”Pensamos que sería muy interesante estudiar las plantas y su relación con factores abióticos, climáticos y de suelo, así como la influencia humana, que causan cambios en la riqueza de especies y composición de la vegetación.”
Recordó que el inicio de la investigación fue por el interés de sus estudiantes, César Carvajal Hernández y Jorge Gómez Díaz, en el estudio de los helechos y las plantas herbáceas terrestres. Además, este último le hizo saber el deseo de realizar su doctorado en Alemania, de tal manera que el investigador del Citro se puso en contacto con algunos colegas de la Universidad de Göttingen, para iniciar con la investigación de este gradiente.
Esta colaboración, indicó, se formalizó en noviembre de 2013, con la organización del simposio “Proyecto interdisciplinario Cofre de Perote”, realizado en Xalapa; y más tarde (en julio de 2014) se dio la firma del Memorándum de Entendimiento entre la UV y la universidad alemana.
A partir de la firma, en enero de 2015 fue aprobada la solicitud para realizar estancias cortas de investigación para el intercambio de investigadores mexicanos y alemanes, en el marco de la Convocatoria de Cooperación Bilateral 2014-01 del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD, por sus siglas en alemán), para organizar talleres y reuniones en sedes de ambas instituciones, detalló.
“Esto nos permitió obtener financiamiento para el intercambio académico y estudiantil, incluso hemos recibido fondos económicos para costear durante dos años viajes de académicos y estudiantes de ambas universidades.”
Durante una estancia en 2015, cuatro alemanes realizaron trabajo de campo en el gradiente de estudio que está a tres mil 500 metros de altitud, donde se ubican ocho áreas de investigación cada 500 metros y se observan diferentes grupos de plantas: helechos, herbáceas terrestres y epífitas, lianas leñosas, arbustos y árboles.
También indicó que se midió el microclima, se realizó la caracterización de los perfiles de suelo y se tomaron muestras de hojarasca y suelo.
A partir de esta colaboración es que tres alumnos egresados de programas educativos de licenciatura y maestría de la UV, obtuvieron una beca del Conacyt-DAAD para realizar su doctorado en la Universidad de Göttingen.
Posteriormente, del 23 al 26 de febrero de 2016, algunos miembros del proyecto participaron en la Conferencia Europea de Ecología Tropical y la 29 Conferencia Anual de la Sociedad de Ecología Tropical, llevadas a cabo en la Universidad de Göttingen.
“Espero que en tres años, los alumnos involucrados en la primera fase de la investigación analicen en conjunto los resultados que obtuvieron, a fin de publicar artículos en revistas científicas de relevancia a nivel internacional.”
BIOVERA
Thorsten Krömer explicó que el proyecto “BIOVERA: Exploración y explicación de patrones de biodiversidad a lo largo de gradientes de altitud, clima e influencia antrópica en el centro de Veracruz, México”, busca conocer más sobre la relación entre la flora y los factores abióticos del área central de la entidad, que es de suma importancia para la conservación ecológica.
Especificó que el intervalo de altitud del área de estudio tiene como límite superior la ladera del Cofre de Perote en tres mil 500 metros, y en el extremo inferior está el nivel del mar, para ser más precisos, el Centro de Investigaciones Costeras “La Mancha”.
Jorge Gómez, estudiante involucrado en el proyecto, explicó que se busca analizar en esta región el impacto de las actividades humanas en el ecosistema, además de encontrar posibles explicaciones a los patrones de diversidad vegetal del gradiente.
“Quisimos incluir el componente humano porque es algo que ya no puede separarse de la naturaleza, queramos o no impacta de diferentes maneras el ecosistema. En el futuro quisiéramos modelar qué pasaría con la vegetación y la fauna si el hombre continúa con las acciones actuales, sobre todo, quisiéramos dar recomendaciones a los tomadores de decisiones y a las personas que viven en las zonas.”
Krömer dijo que cada alumno involucrado en el proyecto estudia un grupo de plantas particular, pero en un futuro se construirá un análisis amplio de todos los datos disponibles sobre la región, por lo que esperan que se sumen más investigadores y estudiantes para complementar el estudio del gradiente.
Este trabajo interdisciplinario, resaltó, es novedoso a nivel nacional y en el Neotrópico, por ello estamos atentos a los resultados que obtendremos de la investigación que hasta el momento llevan a cabo cinco estudiantes y sus tutores académicos.
“El trabajo es interesante porque aborda la zona capital alrededor de Xalapa, incluso toca zonas bajas del estado; es una investigación que hace un resumen de toda el área en la que vivimos”, apuntó Jorge Gómez.
Krömer aclaró que el proyecto aún no concluye, de tal manera que espera se sumen más estudiantes e investigadores interesados en el estudio de gradientes, especialmente de una zona importante por la diversa flora y fauna que alberga, por lo tanto merece un mayor esfuerzo de conservación.
Además, adelantó que se pretende socializar y transferir los resultados obtenidos a las comunidades locales y la Dirección del Área Natural Protegida (ANP) Cofre de Perote.
Con relación a los investigadores principales, además de él, dijo que son: Felix Heitkamp, del Instituto de Geografía, y Holger Kreft, del Grupo de Investigación “Biodiversidad, Macroecología y Biogeografía”, ambos de la Universidad de Göttingen.
Como investigadores asociados: Gerhard Gerold, del Instituto de Geografía, de la Universidad de Göttingen; Gerhard Zotz, de la Universidad de Oldenburg, Alemania; Michael Kessler, de la Universidad de Zúrich, Suiza; Juan Carlos López Acosta, del Citro; Gonzalo Castillo Campos, del Instituto de Ecología, A.C., y Kristof Kovacs, de la Universidad de Insbruck, Austria.
Los estudiantes involucrados son: César Carvajal Hernández, egresado del Doctorado en Ecología Tropical del Citro; Jorge Gómez Díaz, por titularse del doctorado de la Universidad de Göttingen; Valeria Guzmán Jacob, María Leticia Monge González y Martina Alrutz, alumnas de doctorado y maestría en la Universidad de Göttingen, respectivamente; Alma Bautista Bello, estudiante de maestría en Citro, y Maho Morita, de licenciatura en la Universidad de Göttingen.
Por último, señaló que la conformación de este grupo interdisciplinario permitirá, en un futuro, analizar más grupos de plantas, como las briofitas y líquenes, e incluso de animales (por ejemplo, aves, insectos, murciélagos, roedores, entre otros) que habitan en este gradiente.
Estudiar en el extranjero es enriquecedor
Jorge Gómez relató que desde el momento en que ingresó a la Facultad de Biología de la UV buscó becas para estudiar un posgrado en el extranjero, ya que siempre tuvo interés por conocer nuevos lugares.
“Quería salir del país y qué mejor manera que estudiando un posgrado, lo cual no es fácil si no tienes las posibilidades económicas, además conversé con algunos compañeros que tuvieron la oportunidad de hacer estancias por un semestre en el extranjero.”
Narró que el primer contacto que tuvo con el investigador Thorsten Krömer, fue durante las clases que impartió en la Facultad de Biología, posteriormente realizó su servicio social con él y finalmente fue su asesor de tesis de licenciatura.
“En alguna plática le comenté que me gustaría estudiar en el extranjero, previendo que tendría algunos contactos en Alemania. Me respondió que tenía algunos colegas en la Universidad de Göttingen, con quienes se comunicaría para ver las posibilidades de que estudiara algún posgrado.”
El primer paso ya estaba dado, ahora sólo tenía que perfeccionar el idioma inglés y aprender un poco de alemán, así que de inmediato se inscribió al Centro de Idiomas Xalapa. Al concluir sus estudios de licenciatura buscó becas y encontró una que ofrece el Conacyt en conjunto con el DAAD, la cual abre convocatoria cada año.
“Me pareció una buena opción así que de inmediato revisé los requisitos, elaboré el protocolo de investigación y empecé a hacer trabajo de campo en el gradiente, previendo que los viajes serían muy caros y pesados, así que decidí avanzar lo que fuera posible.”
En 2012, gracias al avance que tenía en los idiomas y a la investigación, obtuvo la beca Conacyt-DAAD, que cubría dos meses de estudio intensivo del alemán y los estudios de posgrado durante cuatro años.
“Llegué a Alemania en verano, me sorprendió ver que los días son muy largos, había luz del sol hasta las 10 de la noche, lo que permitía que las ciudades tuvieran mucha vida.”
En octubre de ese año, contó, inició sus estudios de doctorado en la Universidad de Göttingen. Reconoció que el cambio fue un poco difícil, sobre todo porque era la primera vez que vivía solo.
“Mientras estudiaba alemán, conviví con una pequeña comunidad de estudiantes mexicanos, así que fue poca la nostalgia de estar lejos del país y de la familia.”
Comentó que lo difícil fue cuando llegó a Göttingen porque no conocía a nadie, estaba solo en la ciudad y empezaba el invierno. Conforme pasaron los meses empezó a convivir con las personas y después del primer semestre ya se había acoplado, ya tenía su círculo de amigos y colegas.
“También influyó que Alemania es un país muy abierto a los extranjeros interesados en su cultura, y en mi caso la gente que me tocó fue muy amable conmigo, se mostraron con ganas de ayudarme, entonces el choque cultural no fue muy fuerte.”
Otra situación a la que se enfrentó fue el ritmo y la libertad del modelo educativo, ya que el estudiante de doctorado no tiene un horario fijo de clases y la realización del trabajo requiere mucha responsabilidad propia.
“Me costó un poco adaptarme, la educación es muy libre al permitirte tomar clases en las facultades que quieras, incluso está permitido no tomar clases para dedicarte únicamente a escribir la tesis.”
Jorge Gómez estudió durante cuatro años en la Universidad de Göttingen, hizo visitas esporádicas a México para hacer trabajo de campo. Durante el verano del año pasado concluyó sus estudios y regresó a Veracruz para los últimos detalles de su tesis doctoral, la cual presentará a finales de enero de este año.
Para el entrevistado, los jóvenes universitarios deben animarse a hacer estancias y/o estudiar un posgrado en universidades del extranjero, ya que la UV y el Conacyt ofrecen una diversidad de oportunidades para hacerlo realidad, sólo deben prepararse.
“No deben desanimarse, muchos deberían aprovechar las posibilidades que nos da la Universidad porque es una experiencia enriquecedora que cambia la vida. El vivir en otro país es una experiencia única.”
Categorías: Reportaje