• Participaron en la mesa redonda “Propiedad intelectual e imagen”, organizada por la Fundación Universitaria del Área Andina de Colombia 
• Comentaron que la regulación en la materia está adaptándose al comercio globalizado y requiere enseñarse en las universidades 

Académicos de la UV participaron en mesa organizada por la Fundación Universitaria del Área Andina de Colombia

David Sandoval Rodríguez 

10/09/2021, Xalapa, Ver.- Los cambios recientes en el comercio mundial demandan de los publicistas un conocimiento sobre las leyes de propiedad intelectual, así como de los recursos disponibles para el registro de marcas, coincidieron en señalar académicos de la Universidad Veracruzana (UV) que participaron en la mesa redonda virtual “Propiedad intelectual e imagen” organizada por la Fundación Universitaria del Área Andina (Areandina) con sede en Bogotá, Colombia. 

A través de “Viaje Global”, proyecto finalista del Premio Internacional Interamericano en Modelos Educativos Innovadores en Educación Superior de la Organización Universitaria Interamericana (OUI), los catedráticos expusieron, desde sus diversos campos de estudio, la situación que rige en materia de derechos y propiedad intelectual. 

Teresa Montalvo Romero, investigadora y docente en las facultades de Derecho y Ciencias Administrativas y Sociales (FCAS), expresó: “No podríamos hablar de un marco jurídico adecuado y de propiedad intelectual si no nos ubicamos en lo que hoy denominamos la nueva revolución tecnológica 4.0; nueva porque estos desarrollos tecnológicos han permitido la creación de nuevas relaciones comerciales, denominadas como globales y que han dado la pauta para regiones económicas como la Unión Europea y el T-MEC”. 

Se utiliza ya una nueva metodología en manera jurídica que permite compartir la legislación a nivel global, lo que facilita su aplicación en varias regiones. 

En México hay un orden jurídico y certidumbre mediante dos leyes en específico que cubren a la propiedad intelectual: la Ley Federal de Derechos de Autor y la Ley de Protección para la Propiedad Industrial; existen también dos organismos: el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y el Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor).

Rubí Romero, catedrática del Programa Mercadeo y Publicidad en Areandina, señaló la importancia de acercar a los alumnos al aspecto jurídico de las marcas

Luis Fernando Villafuerte Valdés, académico de la FCAS y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Madrid, explicó que en la actualidad la ciencia política utiliza dos criterios: la crisis de gobernabilidad y la crisis de la democracia representativa debido a la incapacidad manifiesta de resolver problemas y asuntos públicos como la seguridad y el medio ambiente. 

Por otro lado, “la incapacidad de resolver dichos asuntos genera un ascenso, en varias regiones del planeta, de gobiernos de corte neopopulista que están retomando discursos muy conservadores”, advirtió. 

De ahí la importancia de conocer y reflexionar sobre los asuntos públicos, a los que definió como las necesidades de la población en general que tienen una característica básica: implican dinero público. 

Reconoció que los grupos de cabildeo, conocidos como stakeholders, en América Latina tenían una vinculación corporativa con esquemas de corrupción, por lo que planteó una nueva visión de los cabildeadores, además de una nueva lógica en la que existe la figura del gestor público. 

Como universidades, apuntó que “tendríamos que generar un nuevo perfil de administrador que comprenda y colabore en estas nuevas formas de participación y dentro de los nuevos ciclos económicos”.

César Augusto Mejía, jefe de la carrera de Sistemas Computacionales Administrativos de la Facultad de Contaduría y Administración, dijo que se ha facilitado el registro de patentes en México

Rubí Estela Romero Martínez, docente del Programa Mercadeo y Publicidad en Areandina, coincidió en recalcar la importancia de formar asesores en el campo de la publicidad que tengan conocimientos sobre propiedad intelectual. 

Para ello “se debe acercar a los estudiantes a los temas jurídicos a través de lo que ellos conocen, como es el manejo de la marca y sus signos distintivos”. 

En Colombia se ha hecho un esfuerzo respecto a regular la propiedad intelectual; en tal dirección, la académica destacó que el registro de derechos de autor en su país es gratuito, lo que ha incrementado los registros de obras. 

César Augusto Mejía Gracia, jefe de la carrera de Sistemas Computacionales Administrativos de la Facultad de Contaduría y Administración, habló de las herramientas que permiten la protección de la propiedad intelectual en México como el Indautor, que cuenta con un sitio web donde se pueden realizar varios trámites. 

Comentó que en México el software es regulado como derecho de autor, no como patente, que es como sucede en los Estados Unidos.

Eduardo Azouri, académico de la FCAS, abordó el mercadeo del arte partiendo de su concepción como un producto sensible

A la fecha se ha facilitado en nuestro país el registro de propiedad, como ocurre ante el IMPI, donde es posible registrar marcas, patentes, modelos de utilidad y esto se puede realizar en línea, “registrar una marca es relativamente accesible, su costo es de dos mil 695 pesos, más impuestos”. 

Para concluir, José Eduardo Azouri Miranda, académico de la FCAS, habló sobre la importancia de conocer qué tipo de producto es el arte, ya que “si no entendemos su naturaleza mucho menos podremos entender qué tipo de marketing o qué tipo de marcas y propiedades intelectuales puedan requerir”. 

Azouri Miranda precisó que el arte es básicamente un producto sensible y esta noción parte de la teoría de la estética, por lo que definió al producto sensible “como aquel que se consume a nivel emocional y racional, pero donde la razón y la emoción se fusionan en un todo, eso fue un gran hallazgo”. 

Recordó que un producto, desde el punto de vista del marketing, se entiende por su consumo y los beneficios que traslada en su consumo, no por su naturaleza tangible o intangible. 

“El arte se crea y se consume en la intimidad, un estado muy profundo del ser humano, y el consumo sensible se da cuando se fusionan la sensibilidad del artista con la sensibilidad del espectador, para ello se requiere un nuevo marketing que debe crear experiencias sensibles que puedan propiciar tal encuentro íntimo entre creador y consumidor”, puntualizó el académico.