- Coincidieron estudiantes que participaron en el Panel 5A del II Congreso Nacional de la Sociedad Mexicana de Sociología
- Lluvia Edith Hernández, alumna de la UV, dijo que como estudiantes desean que se amplíe su acceso a teorías actuales y enfoques más recientes
Paola Cortés Pérez
Fotos: José Miguel Hernández Platas
18/10/2024, Xalapa, Ver.- El principal reto de la sociología es comunicar y difundir entre la sociedad el quehacer científico de la disciplina, y con ello desaparecer el estigma sobre lo que hace y cómo lo hace, coincidieron estudiantes de diversas instituciones de educación superior del país que participan en el II Congreso Nacional de la Sociedad Mexicana de Sociología “En defensa de la sociología”.
En el Salón “Librado Basilio” de la Unidad Académica de Humanidades de la Universidad Veracruzana (UV) se llevó a cabo el Panel 5A “Perspectiva de los estudiantes sobre la enseñanza de la sociología”, en el que participaron: Lluvia Edith Hernández Ramos, de esta casa de estudios; Magali Harumi Fuentes Garay, de la Facultad de Estudios Superiores Aragón (FES-Aragón), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Además de Víctor Manuel Ríos Carmona, del Departamento de Sociología y Demografía del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Hidalgo (UAH), y Ailyn Espinoza Arias y Valeria Sánchez Navarro, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
Lluvia Edith Hernández contó que antes de ingresar a la Facultad de Sociología de la UV no tenía conocimiento sobre la disciplina, lo cierto es que al cursar el programa educativo se rompen y desaparecen los estereotipos establecidos por el neoliberalismo.
“Te das cuenta de que se trata de hacer colectividad, de trabajar en equipo. Desde mi perspectiva como estudiante queremos una sociología que vaya más allá de Marx y El Capital, que se abra y se rescate la sociología latinoamericana, aquella que no es occidental, para integrarla a los planes de estudio de licenciatura.”
Dijo que no quieren que la disciplina se quede anclada en el estudio de sociedades pasadas, sino por el contrario, que se amplíe su acceso a teorías actuales y enfoques más recientes, porque vivimos en un mundo en constante transformación, marcado por fenómenos como el cambio climático, migraciones masivas, tensiones geopolíticas, el auge de las tecnologías digitales y las luchas por los derechos en diversos frentes.
En tanto, Magali Harumi Fuentes contó que en la FES-Aragón se desarrolla investigación, sin embargo, ésta no incide en el campo sociológico y su perspectiva sobre la disciplina se la debe a sus profesores y al apoyo de sus compañeros.
“No sabía nada sobre las ciencias sociales y humanidades; acercarme a la sociología fue impactante a nivel personal porque cambio mi visión del mundo, todo lo que conocía empecé a deconstruirlo y darme cuenta de que había algo más. Ha sido una forma de conocer y explicarme el mundo.”
Uno de los principales retos que tiene la sociología, indicó, es aprender a comunicarla al resto de la sociedad, es decir, poder conectarla con el otro que no tiene acceso al conocimiento.
“Una de las situaciones a las que me he enfrentado es comunicar mi disciplina a otras personas; he tenido la fortuna de colaborar en otras áreas y me han hecho comprender el oficio del sociólogo.”
Víctor Manuel Ríos dijo que la diversidad de perspectivas es lo que enriquece el conocimiento de la sociología, no obstante, la mayoría de los profesores e investigadores de la UAH están inscritos en el Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII), por lo que tienen “el poder” sobre cómo y qué se hace, lo que deriva en el desarrollo de una investigación muy lineal. “Te empiezas a cuestionar qué es la ciencia y quién hace la ciencia, ¿nosotros –como jóvenes– podemos hacer ciencia?”.
Finalmente, Ailyn Espinoza mencionó que una parte relevante de su formación es que los profesores de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM han tenido la iniciativa de ser más que académicos, intentan acercarse más al estudiantado, realizan ajustes a sus planes de estudio, toman en cuenta los intereses de sus alumnos, ejemplifican con la cotidianidad y son apasionados de la sociología.
“No se quedan sólo con la teoría, nos llevan a explorar con la imaginación; nos cuentan que podemos hacer sociología de todo lo que nos rodea en este mundo, no existen límites para nosotros, y nos hacen sentir que realmente somos sociólogos”, reconoció Espinoza Arias.
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