Derechos Humanos

Egresada diseñó evaluación de inclusión de alumnos de telebachillerato

  • María Eugenia Prado Figueroa adaptó índice para identificar las necesidades de los centros escolares y que sean inclusivos 
  • Confía en que su trabajo sea un parteaguas en educación media superior para tener abierta la atención a este renglón 

 

María Eugenia Prado Figueroa, primera egresada del Doctorado en Investigación Psicológica en Educación Inclusiva por la UV

María Eugenia Prado Figueroa, primera egresada del Doctorado en Investigación Psicológica en Educación Inclusiva por la UV

 

José Luis Couttolenc Soto 

Fotos: José M. Hernández Platas y cortesía María Eugenia Prado

17/10/2024, Xalapa, Ver.- María Eugenia Prado Figueroa se convirtió en la primera egresada del Doctorado en Investigación Psicológica en Educación Inclusiva (DIPEI) de la Universidad Veracruzana (UV), con la defensa de la tesis Diseño, implementación y evaluación de un modelo de inclusión con docentes, padres y estudiantes de telebachilleratos de la zona Xalapa, Veracruz”. 

La investigación para el trabajo recepcional la efectuó en dos telebachilleratos de la zona Xalapa: Jilotepec y El Chico, en donde adaptó el índice de inclusión diseñado especialmente para esta población, con el propósito de identificar las necesidades de los centros escolares para que sean más inclusivos; consideró que por su ubicación este tipo de planteles son los más vulnerables. 

Explicó que objetivo del estudio fue diseñar, implementar y evaluar un modelo de inclusión con docentes, padres, madres de familia y estudiantes de los telebachilleratos de las localidades mencionadas. 

Para su validación, lo aplicó a una muestra significativa de alumnos, padres y docentes; posteriormente replicó el proceso en la población de ambos telebachilleratos para identificar necesidades en torno a la inclusión desde la perspectiva de las tres dimensiones propuestas por la UNESCO (2015): prácticas, políticas y culturas inclusivas. 

Prado Figueroa, que estudió la Licenciatura en Psicología, dijo que eligió este tema para su tesis porque desde hace varios años trabaja la educación especial en preescolar, primaria y secundaria, pero el nivel bachillerato –que depende del sistema de educación media superior– se encuentra desprotegido, principalmente los telebachileratos que por las zonas de ubicación son los más vulnerables.

La investigación se realizó con estudiantes de telebachillerato de Jilotepec y El Chico

La investigación se realizó con estudiantes de telebachillerato de Jilotepec y El Chico

 

Ante ello, manifestó su beneplácito de que la UV cuente con un programa de inclusión, dijo que confía en que su trabajo recepcional sea un parteaguas para que el nivel medio superior tenga abierta la atención a la inclusión y discapacidad. 

Precisó que el primer paso de su investigación, que le llevó dos años, fue identificar las necesidades de quienes se encuentran en situación de inclusión; generó un taller y evaluación para conocer los cambios logrados con el proceso en el que estuvieron involucrados padres, docentes y alumnos, con quienes abordó inclusión, discapacidad, violencia y acoso escolar. 

Realizó una revisión al modelo social como sustento de la inclusión educativa, la discapacidad y su clasificación, los enfoques históricos para conceptualizarlas, así como los principios y fundamentos del modelo de escuela inclusiva, barreras para el aprendizaje y la participación social e instrumentos para evaluar los contextos, tomando como referencia el índice de inclusión de Ainscow y Booth propuesto por la UNESCO.

Padres y madres de familia, estudiantes y docentes se vieron involucrados en el estudio

Padres y madres de familia, estudiantes y docentes se vieron involucrados en el estudio

 

Los resultados reportaron el impacto positivo y la aceptación de los participantes ante este tipo de intervenciones que permiten y favorecen el proceso de inclusión en los telebachilleratos. La población de la investigación estuvo de acuerdo en las tres dimensiones evaluadas, siendo las culturas inclusivas las más valoradas, incluyendo el fomento de ayuda mutua, sentido de pertenencia y trabajo colaborativo para generar un ambiente de convivencia escolar libre de discriminación y exclusión. 

Como hallazgo, mencionó que la población de los bachilleratos considera importante trabajar las culturas, que no es nada más decir que somos inclusivos, sino enseñarles por qué y para qué sirve el proceso de inclusión. 

Para su investigación, María Eugenia Prado contó con la asesoría de María José García Oramas, y en el comité académico con Roxana Bigurra de la Hoz y Rebeca Hernández Arámburo.