Los espacios universitarios arbolados son diversos en función a sus usos; la mayoría están inmersos en manchas urbanas y su manejo es prioritario teniendo en cuenta su ubicación. La importancia de estos radica en que son espacios de convivencia para los habitantes de las ciudades y deben aportar la mayor cantidad de beneficios.
Para que estos beneficios se alcancen, una parte indispensable es que el arbolado responda a las características de la vegetación de la región y se adapten a una condición urbana sin dejar de aportar todos los beneficios posibles (ecológicos y sociales). Aunado a esto, se debe contemplar en todo momento la seguridad de los usuarios al disfrutar estos espacios. Su diseño debe responder a un diseño universal que permita la convivencia inclusiva de todas las personas.
