La Cátedra trabaja sobre la articulación de tres elementos: Ciudadanía, educación y sustentabilidad ambiental del desarrollo, partiendo de la premisa de que los problemas ambientales son multidimensionales por lo que no sólo se reducen al ingente deterioro del medio y a la pérdida de integridad de los ecosistemas, sino que impactan fuertemente y en planos y grados diversos, la calidad de vida presente y futura de la población, sobre todo la de los segmentos más vulnerables.
En consecuencia, el binomio ciudadanía-educación se propone impulsar estrategias de empoderamiento orientados a la puesta en acción de los derechos y deberes de los sujetos sociales, para construir nuevas posibilidades de relación política entre y con las instituciones que generen las capacidades para gestionar los conflictos en un momento histórico sumamente complejo inmerso en vertiginosas transiciones, con base en una mejor y más reflexiva participación ciudadana.