Año 3 • No. 101 • mayo 12 de 2003 Xalapa • Veracruz • México
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La unidad sara está a la altura de los laboratorios de resonancia magnética de todo el mundo


Institución de vanguardia
Ricardo Luna (Fotos: César Pisil)

Según fuentes de desarrollo científico, en materia de resonancia magnética, la espectroscopia de resonancia magnética nuclear (RMN) es una de las técnicas que lleva largo tiempo utilizándose en física y química en pro del bienestar humano. Fue a mediados de los años 40 cuando un grupo de científicos descubrió que los núcleos absorbían energía de las ondas de radio de ciertas frecuencias específicas.
Un análisis de los picos del espectro de frecuencia nos informa sobre el movimiento y la composición de las moléculas. Por tanto, la espectroscopia de RMN se sigue utilizando ampliamente en química para aclarar la composición detallada de moléculas muy complicadas, y en física para estudiar el movimiento molecular. Esta técnica está disponible para la comunidad universitaria en la unidad de Servicios de Apoyo en Resolución Analítica (SARA) como también es conocida. Ahí, todo el quehacer que en materia de investigación científica demanda la comunidad de investigadores de nuestra casa de estudios, es realizado de manera cotidiana por personal especializado que labora en esta dependencia.
Su coordinador, Samuel Cruz Sánchez, señaló que dicha entidad de servicios tiene como objetivo primordial brindar servicios a la comunidad universitaria de nuestra casa de estudios, así como de la comunidad académica de otras instituciones de educación superior. Señala que este centro de investigaciones trabaja particularmente en la elucidación estructural de compuestos orgánicos, (como el carbono, hidrógeno, flúor y el fósforo) esto es, reciben muestras de diferentes matrices o sustancias y se intenta separar los componentes de cada una de las muestras e identificar con ello sus compuestos. Así, en el sara, se pueden analizar los componentes de extractos de plantas, ciertos tipos de té y los principios activos de muchos medicamentos o fármacos, así como componentes de aceites comestibles.
Esta unidad de investigaciones cuenta equipo moderno de espectrometría de resonancia magnética nuclear a 300 megahertz. En ella se puede manejar las técnicas más actuales en resonancia magnética nuclear, también cuenta con equipos de cromatografía de alta resolución con una variedad de detectores, así como un equipo de cromatografía de gases acoplado a un detector de masas. La mayoría de todos estos equipos pueden ser operados de manera automatizada, tanto en los muestreadores como en el manejo completo de los equipos.
Preparando el terreno
Este laboratorio nació a mediados de la década pasada (95-96) como propuesta de un grupo de investigadores de la UV que coincidió en que el único modo de acceder a este tipo de herramientas instrumentales de precisión, y bastante costosas, sería a través de la conjunción de esfuerzos.
Fue así que solicitaron el apoyo del Conacyt, a través de su programa de apoyo a proyectos de infraestructura con el cual es otorgada una buena cantidad de recursos financieros. Éstos, junto con recursos concurrentes de la propia Universidad permitieron comprar, vía licitación pública internacional, el equipamiento actual.

El coordinador del sara indica que estos equipos son tan sofisticados que en nuestro país sólo existen alrededor de 37, más de la mitad centralizados en el DF y zona conurbana, otros más en Guadalajara, Monterrey, Puebla, Pachuca, siendo el de la uv el único en la zona sureste del país.

Una vez adquirido el equipo de laboratorio, se requirió que personal especializado acudiera al sara a realizar el montaje del mismo. Ya que requería contar con instalaciones muy peculiares por las características de los equipos. Por lo que se consiguió que dos personas con posgrado en química pudieran incorporarse a los trabajos de instalación y a los propios laboratorios.
Estos equipos son tan sofisticados que en nuestro
país sólo existen alrededor de 37, más de la mitad en el DF y zona conurbana, otros más en Guadalajara, Monterrey, Puebla, Pachuca, siendo el de la UV el único en la zona sureste del país
La instalación no era fácil debido a que se debía controlar la humedad de la habitación que ocuparía el equipo, problema recurrente en una ciudad húmeda como Xalapa, pero una vez resuelto con éxito este problema, sólo se debía cubrir con una póliza de mantenimiento cuyo costo anual es de 28 mil dólares, así como el suministro de los materiales criogénicos.

Cabe mencionar que para el caso del espectrómetro de resonancia magnética es necesario el uso de criogénicos como el helio y nitrógeno líquido, los cuales son requeridos por lo menos cada 15 días.