importante que es que un puesto administrativo sea ocupado por un estudioso del arte: “Al egresar de la facultad estudié en México Gestión y Promoción Cultural, ahí me di cuenta que el discurso del comunicólogo y del administrador es muy diferente al de un creador”.

La joven afirmó que en la mayoría de los puestos directivos en los espacios de arte no hay una cercanía con la creación, lo que lleva a un desfase: “Tienen buenas ideas y amplios criterios, pero no la visión de quien produce arte. Para mí como artista es maravilloso conocer las herramientas de la gestión y de la promoción, esto te hace conocer más a fondo el sistema en el que se mueve el arte”.

Ayala reflexiona sobre la manera de consumir el arte y de ser artista, pues afirma que en este momento los creadores ya no pueden ser el artista romántico que está en su taller sólo produciendo, sino que deben estar más abiertos a lo que les rodea: “Si el artista no utiliza las herramientas que la modernización le ofrece, se quedará rezagado”.

Definitivamente estamos inmersos en una sociedad en la que no nos hace falta un cuadro o una escultura para vivir, por lo que –en palabras de la joven creadora– los artistas deben replantearse lo que representa su trabajo para los demás; es aquí donde se proponen maneras diferentes para difundir y consumir el arte.

A escasos días de cumplir un año de gestión en el Jardín, Angélica Ayala apuntó que las galerías deben de ser “espacios vivos” reforzados con información: “El arte contemporáneo exige más respuesta del público, por lo que debemos de informarles qué están percibiendo”.

Angélica Ayala no es “artista de fin de semana”, por lo que ha dejado momentáneamente la creación personal, toda su energía y tiempo los concentra en el Jardín, sin embargo, considera que el proponer es una manera de crear, con distintos elementos.

De los maestros de su facultad, con los que ahora trata de manera diferente a sus tiempos de estudiante, Ayala afirmó que siente un gran apoyo y compañerismo, pues el gestionar y coordinar no es nuevo para quien durante mucho tiempo formara parte del Consejo de Galería de la Alva de la Canal y de la galería de la Facultad de Artes.

De los artistas puristas que no interactúan con otras disciplinas y de las nuevas formas de transmitir el conocimiento –como la del Modelo Educativo Integral Flexible al que se está sumando la Facultad de Artes de la UV– la ceramista y escultora comentó que es básico que las universidades ofrezcan a sus estudiantes una formación más completa.

Angélica Ayala además de hacer escultura y cerámica ha ampliado su discurso; se ha sentido atraída por los audiovisuales y la instalación, además de que ha experimentado con materiales tan diversos como la resina, el plástico, el metal, la cera o las plumas de ave, pues le interesan las ideas, no los materiales.

Y es precisamente con ideas nuevas y concretas con lo que ha sacado adelante su estancia al frente del Jardín de las Esculturas, ubicado en la avenida Rafael Murillo Vidal en Xalapa, Veracruz.