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Afirma
Ricardo Pascoe Pierce
No genera la sociedad moderna
servicios básicos de seguridad social
Irma Villa
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Actualmente
existe una duda en los mexicanos acerca de la factibilidad de la nueva
democracia como forma de gobierno, porque no atiende ni genera los
servicios básicos de seguridad social que fue la gran virtud
del viejo sistema, el cual procuraba, en la medida de sus posibilidades,
una idea solidaria con la población, refirió Ricardo
Pascoe Pierce, ex embajador de México en Cuba, al dictar la
conferencia La democracia como forma de gobierno.
Dentro de la inauguración del primer ciclo Coloquios en la
Democracia, organizado por Generación Ciudadana, Pascoe Pierce
dijo que en México el transitar de una sociedad tradicional
a una moderna generó una
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Ricardo
Pascoe Pierce. |
incapacidad
de gobernabilidad que no permite pactar los acuerdos necesarios para
acordar, en la cámara de diputados, las medidas económicas
y políticas que el país requiere: No se trata
de volver a una vieja forma de gobierno, pero sí de cuestionar
y de plantear cuáles son los retos de esta nueva representación,
la cual es aparentemente más abierta pero que al mismo tiempo
genera la sensación social de que no resolvemos los grandes
temas y conflictos del país, aclaró Pascoe.
Sobre el papel de la democracia como forma de gobierno, señaló:
Si logramos no sólo descifrar sino también desmitificar
o romper con nuestros propios estereotipos como país, creo
que la transición política hacia una forma democrática
nos planteará los elementos y los lineamientos de dos tipos
de sociedad; una tradicional en vías de extinción y
una sociedad moderna en vías de nacimiento.
La sociedad tradicional de los años 30 hasta mediados
de la década de los 70 se distinguía por tener
una economía regulada por el estado, cuya idea central era
que éste tenía que proveer a la sociedad de una serie
de seguridades. Esta sociedad mexicana, añadió el autor
del libro En el filo, perduró durante mucho tiempo porque tenía
un importante nivel de legitimidad y credibilidad, si no lo hubiera
tenido y hubiera perdurado estaríamos hablando de una sociedad
de tontos y no los somos, independientemente de que combinaba, como
lo hace todo régimen, factores de concesión y represión.
Pero en la medida que crece en el mundo occidental la idea de la democracia
como sistema obligatorio y especialmente la democracia representativa
de Europa y de eua, crece en sociedades como la mexicana una nueva
noción de economía y por lo tanto una nueva noción
de individuo en la sociedad. Así empieza la llamada economía
neoliberal.
Al insertarse la sociedad en la economía de mercado, las responsabilidades
y las obligaciones históricas del estado cambian, éste
deja de ser el proveedor de seguridad social y empieza a privatizar
sus empresas, a perder su capacidad económica y, por lo tanto,
su capacidad de proveer a la sociedad de servicios básicos,
detalló el politólogo.
Al mismo tiempo y análogamente a ese proceso, el estado y la
sociedad dejan de concebir al individuo como un sujeto colectivo para
entenderlo como un sujeto individual y paulatinamente se transita
a una sociedad mucho más individualista.
Por lo que, concluyó, no existe en México una cultura
política de forjar alianzas, tenemos una cultura política
entre la tradicional estatísta y la de pensamiento único,
las cuales generan una modernidad democrática de la dispersión,
donde cada cual defiende literalmente su terruño en términos
políticos.
Sobre esta sociedad que no acaba de nacer, Pascoe aseguró que:
La gran interrogante es cómo combinar la idea de que
la sociedad tiene que seguir siendo solidaria, y proveer redes de
seguridad a los sectores más marginados de México,
y sentenció: Si no somos capaces de plantear como sociedad
estos dos grandes problemas, el progreso político real junto
con la pérdida de la noción de lo solidario, entonces
creo que entraremos en un curso de choque, el cual va a tener altísimos
costos para la sociedad mexicana en su conjunto. |
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