Con
una trayectoria personal en la que el deporte formó parte
importante de su vida, pues practicó Futbol soccer y posteriormente
natación, Noé Dorantes Capistrán es ahora un
triatleta con grandes posibilidades y lo mejor, es un “halcón”.
Dorantes Capistrán cursa el primer semestre de lengua inglesa
dentro de la Facultad de Idiomas de la Universidad Veracruzana con
la intención de realizar maestría y doctorado dentro
de lo que es su pasión, el deporte, específicamente
la Educación Física.
A partir de sus estudios en preparatoria Noé se dedicó
de lleno al triatlón, bajo al tutela de quien lo descubrió
y es su actual entrenador Ollin Caraza. |
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Con
un tiempo de dos horas 30 minutos en 2002, fue la primera experiencia
de Noé al recorrer las distancias olímpicas oficiales:
“Actualmente estoy haciendo un tiempo de dos horas 10 minutos.
Con estos tiempos he podido calificar a olimpiada elite juvenil
obteniendo dos lugares nacionales ‘B’”.
Antes de esto, Noé, ya competía en Triatlones Express,
que son la mitad de las distancias oficiales.
El 31 de octubre asistirá a Cancún, Quintana Roo como
representante de los Halcones de la Universidad Veracruzana a una
competencia panamericana: “Estoy rankeado (marcado) entre
los primeros cinco en el nivel nacional, este ranking que
es por puntaje”.
Lo interesante de esta competencia panamericana es la asistencia
de personalidades del Triatlón tanto de Norteamérica,
como de Canadá y Brasil.
Estudiar en la facultad dentro de la UV le dio a Noé Dorantes
la oportunidad de poder ser parte de los Halcones de la
UV y ser ahora el representante de esta universidad como triatleta.
El 10 de octubre pasado Noé Dorantes compitió con
la camiseta de los Halcones en una competencia Nacional
“B” en Alchichica y obtuvo un muy merecido tercer lugar.
Ser
triatleta
El reto ante sí mismo es lo más importante en este
deporte: “Lo primero es terminar un triatlón, llegar
a la meta y después poder superar tus propias marcas, posteriormente
estás compitiendo con otros triatletas, pero sobre todo es
reto personal”, dijo con un alto sentido de responsabilidad.
El joven atleta comentó que en esta competencia las distancias
son largas, hay que tener condición y sobre todo ser disciplinado.
La sensación que le emociona más sucedió en
Catemaco hace cuatro años: “Fue la primera vez en que
terminé un triatlón, con distancias olímpicas”.
El practicar esta disciplina exige un desgaste tanto físico
como psicológico de alto nivel, por eso Dorantes Capistrán
cuenta con un equipo de especialistas “tengo desde mecánicos
para mi bicicleta hasta nutriólogo, pasando por mi doctor
y un masajista”.
Un
deporte elitista
En una lista de precios que Noé da a vuelo de pájaro,
una bicicleta para entrenamiento cuesta aproximadamente 22 mil pesos
más vestimenta de unos cinco mil pesos: “Por eso digo
que el triatlón es un deporte elitista, es muy caro, pues
necesitas equipo para tres distintos deportes, para entrenar y para
competir”.
Pero también existe otra situación que podría
ser un inconveniente: “El circuito nacional (de competencias)
comprende toda la república y muchas veces en zonas turísticas
caras, afortunadamente en la UV tengo el apoyo para poder seguir
concursando, en un deporte elitista”.
En la competencia del próximo 31 de octubre Noé Dorantes
tiene puesta la esperanza de lograr un muy buen lugar: “Espero
estar dentro de los primeros mexicanos, para poder obtener un buen
lugar panamericano, y sumar puntos en el ranking nacional,
pues es la última fecha del año”.
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