En
los últimos siete años, la UV ha vivido un intenso
proceso de innovación académica, de modernización
en su infraestructura tecnológica y planta física,
de descentralización académica y administrativa, de
fortalecimiento de su planta docente, de internacionalización
y de aportación de soluciones a los grandes temas veracruzanos,
bajo el enfoque propuesto por el rector, Víctor Arredondo,
para convertir a la casa de estudios en una verdadera agencia de
distribución social del conocimiento.
Con seis décadas de vida, la UV atiende al 36 por ciento
de la matrícula de educación superior estatal, que
asciende a más de 120 mil estudiantes, y gracias al conjunto
de programas de docencia que imparte, es la institución de
educación superior pública de provincia con mayor
diversificación en su oferta educativa.
Sin lugar a dudas, el proyecto académico más ambicioso
impulsado por Arredondo es el de la implantación del Modelo
Educativo Integral y Flexible (MEIF), el cual surge como una respuesta
a la necesidad de un nuevo paradigma en la educación basado
en el aprendizaje significativo y de por vida. Actualmente, 103
programas (que constituyen el 84 por ciento del total) han adoptado
este nuevo enfoque.
Cambiar el paradigma tradicional de la educación centrada
en la enseñanza para poner al aprendizaje en el centro del
proceso educativo ha significado un reto formidable, sólo
posible de superar mediante la satisfacción de las condiciones
académicas y de infraestructura necesarias que han hecho
posible esa transición.
Paralelamente, la UV emprendió un proceso permanente de certificación
y acreditación externa de sus programas académicos
para asegurar la calidad de la formación universitaria integral
de todos los estudiantes. A la fecha han sido evaluados por los
Comités Interinstitucionales para la Evaluación de
la Educación Superior (CIEES) un total de 115 programas educativos
de licenciatura y posgrado.
De ellos, 49 se ubican en el nivel 1 de consolidación para
la acreditación, situación que la ubica en el segundo
lugar nacional, en cuanto al número de programas en este
nivel.
Además, la UV cuenta con 23 programas educativos de licenciatura
acreditados ante organismos reconocidos por el Consejo para la Acreditación
de la Educación Superior (Copaes), que representan
el 42 por ciento de sus programas, en los que se atiende al 46 por
ciento de la matrícula.
Entre 1998 y 2004, la atención permanente a los fuertes rezagos
acumulados en el pasado logró un incremento significativo
en la planta académica de tiempo completo (PTC), pasando
de 848 a mil 527, al tiempo que se aumentó notablemente el
porcentaje de PTC con posgrado, al pasar de 32 a 72 por ciento.
El número de investigadores registrados en el Sistema Nacional
de Investigadores (SNI) se duplicó en cinco años hasta
alcanzar hoy la cifra de 102.
Para promover la capacidad de aprendizaje autónomo de los
estudiantes, así como desarrollar en ellos una actitud hacia
el logro de metas y a su superación permanente, contemplados
en el meif, la administración de Víctor Arredondo
empeñó enormes esfuerzos por ampliar y modernizar
la infraestructura y equipamiento para el aprendizaje y mejorar
la calidad de los servicios de apoyo requeridos por los estudiantes.
La UV ha logrado en los últimos siete años la operación
óptima y la consolidación de un sistema estatal en
red. La comunidad universitaria dispone hoy de un amplio y diversificado
abanico de servicios de apoyo académico: portales en Internet
e Intranet, cuentas electrónicas, unidades de servicios
bibliotecarios ultramodernos con bibliotecas virtuales y sistemas
de bases de datos de consulta remota; telefonía integrada
a la red, conexión funcional de los centros de autoacceso
y la incorporación de nuevas tecnologías relacionadas
con el llamado aprendizaje electrónico (e-learning)
y aprendizaje semipresencial y no presencial; salas fijas para el
trabajo académico a distancia mediante espacios equipados
para ocho aulas de videoconferencias distribuidas en las cinco regiones
universitarias.
La disponibilidad de equipos de cómputo pasó de 46.1
personas por equipo en 1997 a 11.7 personas por equipo en 2004.
Los servicios bibliotecarios se han incrementado en el mismo lapso
de 690 mil a dos millones 79 mil servicios. La superficie destinada
a las bibliotecas universitarias supera los 26 mil metros cuadrados,
cuatro veces más su extensión en 1997, lo que ha permitido
incrementar en más de 115 por ciento el número de
plazas de lectura.
En cuanto al acervo bibliográfico adquirido, de 2001 a la
fecha han sido incorporados a nuestras bibliotecas 70 mil 544 títulos
y volúmenes. El monto para tal fin es superior a los 39 millones
de pesos, provenientes de recursos propios y de la federación.
Los Centros de Autoacceso de Idiomas (CADI) brindan a sus usuarios
la oportunidad de aprender el idioma inglés de una manera
autodirigida. Proponen a la comunidad universitaria un trabajo autónomo
de acuerdo con sus necesidades, intereses, personalidad, ritmo,
y horario. La experiencia acumulada en el diseño de programas
y materiales de esta modalidad de autoaprendizaje ha hecho que la
UV se convierta en el centro nacional del proyecto Inglés
virtual en tu centro, apoyado por la SEP y el Consejo Británico,
y que brindará asesoría a las universidades públicas
del país.
La suma de las fortalezas académicas y tecnológicas
permite ahora a la UV disponer de una herramienta más para
avanzar en la distribución del conocimiento por medio de
la Universidad Veracruzana Virtual (UV2).
Como resultado de un proceso gradual y acumulativo basado en el
conocimiento de las experiencias internacionales más exitosas
y por medio de alianzas con muchas de tales instituciones, la UV
ha iniciado la oferta de cursos y programas académicos en
la modalidad virtual en apoyo a sus estudiantes y a poblaciones
tradicionalmente excluidas del acceso a este nivel educativo. Actualmente
a través de 49 programas educativos cuenta con una matrícula
de tres mil 776 alumnos.
A partir de 1997, el rector Víctor Arredondo emprendió
un esfuerzo para reducir las brechas de infraestructura entre las
regiones. La inversión de 1998 a la fecha realizada en construcción,
remodelación, mantenimiento, equipamiento y mobiliario es
de mil 349.7 millones de pesos. Más de 811 millones de pesos
han significado 508 obras nuevas, remodelaciones, ampliaciones y
dos mil 511 acciones de mantenimiento y conservación.
Destaca la construcción de cinco Unidades de Servicios Bibliotecarios
de Información, USBI, en Xalapa, Boca del Río, Minatitlán,
Coatzacoalcos y Poza Rica. Estas modernas instalaciones son verdaderos
edificios inteligentes que ofrecen a la comunidad universitaria
acceso real y virtual a información biblio-hemerográfica,
a bases de datos referenciales, a textos completos, a la enseñanza
de idiomas y a cursos en línea, además de otros servicios
bibliotecarios tradicionales.
Los estudiantes disponen ahí de alrededor de dos mil equipos
de cómputo conectados a Internet e Intranet
y de sitios de trabajo individualizado y de grupo. En estas obras
se han construido más de 30 mil metros cuadrado de espacios
nuevos en 47 hectáreas, con una capacidad de usuarios simultáneos
de seis mil 686. Esta nueva infraestructura se ha desarrollado gracias
a una inversión acumulada de más de 200 millones de
pesos.
Gracias a toda esta cruzada en favor de la elevación de la
calidad de sus programas académicos y de creación
de una infraestructura física y tecnológica especialmente
pensada para apoyar los procesos de aprendizaje, los estudiantes
han obtenido innumerables logros nacionales e internacionales.
El número de becas estudiantiles se ha duplicado en los últimos
siete años, mientras que el número de estímulos
del Programa Nacional de Becas para Estudios de Educación
Superior (Pronabes), ha crecido en más del 600 por
ciento en los dos últimos años. El total de becarios
en las diferentes modalidades para este año asciende a 27
mil 737.
Como evidencia de la creciente autoestima de sus estudiantes, uno
de cada cuatro egresados que presentan el Examen General para el
Egreso de la Licenciatura (EGEL) en el país son de la UV,
y el 57 por ciento de los sustentantes se han titulado mediante
el EGEL.
Arredondo planteó como uno de los puntos nodales del nuevo
paradigma universitario, convertir a la UV en una verdadera agencia
de distribución social del conocimiento, que permitiera no
sólo formar a sus usuarios tradicionales sino también
sirviera para elevar los niveles de formación y de habilidades
a la población tradicionalmente marginada de los beneficios
de la educación formal.
La universidad es ampliamente reconocida en México y en el
extranjero por la relevancia y calidad de su trabajo de vinculación
y extensión.
Por cinco años consecutivos ha sido merecedora del reconocimiento
del Programa de Fortalecimiento y Consolidación de Proyectos
de Servicio Social Comunitario, que en forma mancomunada promueven
la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de
Educación Superior (ANUIES), la SEP, Sedesol y la
Fundación «Ford» por el proyecto Centros Comunitarios
de Aprendizajes Múltiples: Casas de la Universidad. Gracias
a estos financiamientos, ha sido posible la puesta en marcha de
cuatro Casas de la Universidad ubicadas en distintas partes del
estado: Coyopolan en Ixhuacán de los Reyes, Vecinos del Manglar
en Boca del Río, Molino de San Roque en Xalapa y El Conejo
en Perote.
Pese a las dificultades económicas del país y las
restricciones del apoyo federal para la educación superior
pública, la UV logró mejorar significativamente su
situación financiera. Estos importantes avances fueron posibles
gracias a una estrategia firme de racionalización del gasto
corriente, al incremento en la generación de recursos propios,
a la obtención de recursos adicionales provenientes de diversos
fondos competitivos –diferentes al subsidio ordinario–
y a la labor del Patronato, la Fundación y el Fondo de Empresas
Universitarias como generadoras de recursos alternos.
La casa de estudios mejoró los aspectos cualitativos de la
gestión y control financiero gracias al respaldo de la Junta
de Gobierno y la Contraloría General, así como a la
estructura presupuestal y los procesos de control en el origen y
aplicación de recursos.
Hoy se sabe con más certeza cómo se aplican los recursos
y cuánto cuesta operar las diversas y complejas actividades
universitarias, merced a los análisis de costos unitarios
y a la operación de un moderno sistema de información
integral.
Asimismo, mediante el trabajo coordinado con la Junta de Gobierno
a través de la Contraloría General, también
se conoce con certeza la extensión y el valor del patrimonio
universitario. La comunidad universitaria, las dependencias gubernamentales
de las cuales se reciben recursos y la sociedad en general saben
con más detalle el manejo de los recursos, a través
de los 14 procesos externos y 252 internos de auditoría y
fiscalización a los que la universidad se ha sometido en
cumplimiento de su normatividad, y a partir de la solicitud expresa
de la propia institución para la investigación y la
innovación y las competencias profesionales que se esperan
en cada una de ellas, explicó.
Además, expuso que el proyecto 6x4 de uealc tiene por objeto
“acercar a las universidades latinoamericanas entre sí
y luego con el proceso europeo de transformación de la educación
superior para que reflexionemos sobre la situación de ésta
en al, México y el mundo y, de esta manera, estemos en condiciones
de inducir aquellos cambios que consideremos pertinentes”.
Advirtió, sin embargo, que las disciplinas seleccionadas
no representan necesariamente las más urgentes de atender
en el marco latinoamericano, sino que éstas conforman las
carreras más representativas de las que hay dentro de una
universidad y se escogieron de manera que los trabajos realizados
en cualquiera de estos programas en cualquiera de las universidades
pueda ser replicado en otra.
“De cada carrera vamos a tener resultados muy concretos acerca
del desempeño en al, acerca de las diferencias o similitudes
fundamentales entre los países y con respecto a Europa. En
cada caso tendremos resultados muy concretos que seguramente llevarán
a que en cada país se sugieran, en la medida que cada universidad
lo quiera, cierto tipo de cambios estructurales”, añadió.
A partir de esta iniciativa, dijo, “estamos logrando que universidades
como la UV puedan agrandar su red de contactos internacionales,
conocer experiencias de punta y compartir sus propias experiencias
con Europa”. De esta manera, añadió, se crean
redes muy distintas –de profesiones, de áreas de evaluación,
por citar dos ejemplos– que hacen que las universidades se
enriquezcan en la medida que así lo deseen. Por lo tanto,
tienen acceso al estado del arte, a los conocimientos de punta en
cada uno de estos aspectos y eso siempre fortalece a una universidad,
además de que le permitirá tomar las decisiones que
considere pertinentes.
A pesar de que el proyecto de UEALC no tiene el propósito
formal de establecer una integración económica o de
otro tipo entre los países latinoamericanos y del Caribe,
Malo aceptó que “ciertamente propone un mayor acercamiento
y, en
la medida que se da entre las universidades y asociaciones de ellas,
seguramente llevará a una mayor comprensión y un mayor
acercamiento de los países”. |