Año 5 • No. 181 • mayo 30 de 2005 Xalapa • Veracruz • México
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Romeo Figueroa, Premio al Decano 2005
México debe formar cuadros que mantengan el diálogo con la comunidad científica y educativa
Edgar Onofre


Romeo Figueroa Bermúdez, profesor de la Facico,
recibió el Premio al Decano de manos del gobernador del estado,
Fidel Herrera Beltrán; observan el rector de la UV,
Raúl Arias Lovillo, y el secretario de Educación y Cultura,
Víctor Arredondo.

El Premio al Decano que la Universidad Veracruzana (UV) otorga a sus académicos cuya antigüedad y vigencia les permite fortalecer el desarrollo de esta casa de estudios, “no sólo estimula a los profesores que lo reciben, sino que, al mismo tiempo, propicia el desarrollo de todos y cada uno de los miembros que conforman la Universidad”, aseguró el profesor y Decano también por la Facultad de Ciencias de la Comunicación (Facico), Romeo Figueroa Bermúdez.

A pesar de que “en mi fuero interno pienso que no lo merezco”, expresó, Figueroa Bermúdez destacó que el reconocimiento de la institución puede estimular a los jóvenes cuadros de profesores, y aún a los estudiantes, para buscar un nivel académico de excelencia: “Creo que la uv reconoció la alta preparación de los maestros homenajeados. Muchos de los galardonados tienen doctorado cum laude o pos doctorados y creo que esto estimula a los jóvenes. Pueden darse cuenta que no necesitamos pensar en tener muchos años para alcanzar un buen nivel y participar activamente en el desarrollo de las instituciones”, explicó.

Para el, ahora dos veces, decano (por la UV y por la Facico), la formación de profesionales y expertos es fundamental para el desarrollo del país puesto que “tenemos demasiadas cosas encima, andamos perdidos en un mundo discursivo que cada vez es más confuso y que en el ámbito de la educación superior genera gran desconcierto. Por eso, creo que el camino que le queda a México es formar cuadros que puedan tener un diálogo con la comunidad científica y, al mismo tiempo, con la comunidad educativa. A México le faltan educadores, gente que produzca, que piense, que publique, que contribuya a cambiar el mundo en el que vivimos”.

Sin embargo, destacó que las perspectivas educativas del país observan en la actualidad un giro positivo: “Creo que vamos en el camino de una nueva perspectiva en la educación pública superior: la unam está en un nivel ejemplar en el ámbito continental y al uv está dando también excelentes frutos, hay más oportunidades para los jóvenes, becas de todo tipo, las tecnologías de convergencia a través de la Internet crean facilidades para que los jóvenes puedan hacer más cosas, para que la gente competente tenga un desempeño óptimo y pueda abrirse paso y enriquecer el avance –no me gusta la palabra desarrollo, la siento imperialista– de la universidad pública en el mundo contemporáneo”, explicó.

Con respecto de estas perspectivas, Figueroa Bermúdez destacó como alternativa importante el programa de educación continua de la UV, la cual “está registrando avances relevantes para ayudar a alcanzar ciertas condiciones entre cuadros de profesionales”. Tales programas, explicó, han incorporado cuadros de los medios de comunicación que buscan la profesionalización de sus labores, “incluso he visto gente de medios que se está abriendo paso estudiando una nueva carrera para encontrar caminos alternos en su quehacer”.

De esta manera, según explicó, los medios de comunicación, a los que frecuentemente se demanda la profesionalización de su oficio, “no tienen que esperar a que los nuevos cuadros se incorporen, son los medios quienes están buscando su profesionalización y en algunos casos lo están haciendo bastante bien”. En ese sentido, dijo, la UV tiene grandes perspectivas: incorporar cuadros de comunidades indígenas y darles facilidades para el acceso a la cultura y la educación es extraordinario. “Ésa es la función de la universidad pública: abrir caminos para entrar a este mundo de desorden y caos y tratar de organizarlo”.

No obstante, Figueroa Bermúdez insistió: “Creo que es muy poco lo que he hecho por la UV en comparación con lo que me está dando”, aunque también explicó que el reconocimiento de esta casa de estudios es “por un lado un gran estímulo, pero al mismo tiempo me hace sentir la responsabilidad que tengo ante la Universidad y ante mí mismo. En un momento dado he llegado a pensar que el premio no lo estoy recibiendo yo, sino todos los que estamos en la facultad, en el sentido de que no hay inteligencia individual, sino que es una inteligencia colectiva la que funciona en el mundo de hoy”.

El Premio al Decano que otorga la Universidad Veracruzana “se otorga al personal académico que, además de su antigüedad, se distinga por su vigencia, méritos reconocidos de liderazgo académico y desarrollo personal, así como por su destacada participación en las actividades universitarias”, de acuerdo al Artículo 142 de del Estatuto del Personal Académico. Este año fueron otorgados cinco reconocimientos del tipo, entre ellos el de Figueroa Bermúdez, en el marco de la ceremonia del Día del Maestro.

Es licenciado en Periodismo por la uv, maestro en Administración de Empresas por la Universidad Cristóbal Colón (UCC) y en Ciencias de la Comunicación por la uv y actualmente es doctorante en la misma disciplina e institución.

Es Decano de la Facico desde 1995 y ha sido ponente en más de 20 foros nacionales e internacionales, autor de numerosos artículos, ponencias y ensayos relacionados con la Historiografía y Filosofía de la Comunicación y de cinco libros sobre el tema, por citar apenas breves datos de su curricula.
 
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