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Seduce
Mart’nália con su voz
en el festival Junio Musical
Gina Sotelo |
Presentó
en Xalapa su nuevo disco Menino do Rio |
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“Los
artistas normalmente tenemos una función política, pero
de política cultural. Nuestro movimiento social es a través
de la música. A mí siempre me preguntan mi opinión
sobre lo que acontece en mi país, pero yo digo lo que pienso
y siento cantando, aunque –por lo menos– los artistas
tenemos una mejor imagen que los políticos”, dijo la
artista Mart’nália, mujer espléndida, poseedora
de una voz melódica y aterciopelada.
A primera vista da la impresión de ser una persona que no se
preocupa mucho de las cosas, pero está “sintonizada con
todo el mundo” y con lo que acontece a su alrededor, principalmente
en el ambiente musical.
Mart’nália, una de las compositoras e interpretes más
completas de la música contemporánea en Brasil, visitó
Xalapa invitada a participar en el Festival Internacional Junio Musical.
Luego de haber sido ovacionada por el público que asistió
este jueves a la Sala Grande del Teatro del Estado, la cantante habló
de sus planes, proyectos y grandes pasiones.
“Estoy muy contenta de estar aquí en México por
vez primera. La gente es muy simpática y me hace sentir como
en casa. Aunque aquí no se conoce mucho la música de
mi país, ni allá la de ustedes, estoy muy orgullosa
de ser la portadora del nuevo canto brasileño”.
En febrero pasado Mart’nália lanzó su quinto disco
Menino do Rio –dirigido por Maria Bethânia y apadrinado
por Caetano Veloso–, que salió al mercado bajo el sello
Quitanda. El álbum recoge las buenas vibras que le trajo su
pasada producción y DVD en vivo Ao Vivo, maravilloso y multiaclamado
material que incluyó las voces de Djavan, Caetano Veloso, Martinho
Da Vila –padre de Mart’nália– y Zélia
Duncan.
Mart’nália es a todas luces una digna embajadora del
Brasil. En su sonrisa y mirada se reflejan sus ganas de vivir y compartir,
de disfrutar intensamente cada día: “Cuando no estoy
de gira hago mi vida lo más normal posible. Me gusta mucho
ir a la playa con mis amigos, beber cerveza, andar en bicicleta, bailar
y jugar voleibol”.
De apariencia sencilla, Mart’nália no parece diferente
a ninguna mujer de su edad. Sus trenzas ahora cortas van del canela
al amarillo, coloreadas caprichosamente por el sol. Resalta sobre
su atuendo un escapulario: San Sebastián, el santo protector
de Río de Janeiro, por uno de sus costados; y la Señora
de la Concepción –vinculada a la música, la riqueza,
las aguas dulces, el perfume y el amor–, por el otro. Profesa
una religión que fusiona el catolicismo con el Candomblé,
culto de los orishas: “La religión en mi vida es totalmente
importante y este escapulario es como mi padre y mi madre espiritual”.
Dueña de una voz dulce y timbre especial, Mart’nália
empezó a cantar de manera profesional a los 16 años,
inspirada por su padre. Su amistad con Caetano Veloso se dio a raíz
de que éste produjo su álbum Pé do meu samba.
Carioca al 100 por ciento, su música tiene un predominante
sonido percusivo y fuerza rítmica.
Además de la música brasileña, que es su primera
influencia, gusta de escuchar a Aretha Franklin, Stevie Wonder y otros
grandes músicos de blues y jazz. Se necesita talento sobrado
para que en sus pocos años de carrera haya podido hacerse merecedora
del respeto y el apoyo de importantes personalidades de la música
brasileña como Martinho da Vila, Caetano Veloso y Maria Bethânia.
Mart’nália, además de hacer que surgan como clásicos
nuevas canciones de compositores, hace reverencia a la música
de los grandes maestros de la samba, dentro de la generosa genealogía
musical brasileña. Menino do Rio, su más reciente disco
ya está a la venta en nuestro país, al igual que en
Estados Unidos y Europa. |
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